Manuel Muñoz, el ingeniero español que manda dentro de Pirelli en la Fórmula 1

La Fórmula 1 habla cada vez más español y aunque los hombres más famosos sean Fernando Alonso y Carlos Sainz, el mundo de la ingeniería también va abriendo las puertas al talento que sale de la Península Ibérica. La mejor noticia de los últimos días la ha protagonizado Manuel Muñoz, un ingeniero de Alcalá de Henares que ha sido promovido a Jefe de Ingeniería de Fórmula 1 de Pirelli. En otras palabras, Muñoz ocupará el cargo técnico más elevado y dirigirá a todos los ingenieros que Pirelli sitúa en cada uno de los equipos de la categoría reina.

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Para Muñoz, se trata del segundo ascenso dentro de la estructura de Pirelli en tan solo tres meses. En junio, la firma italiana le confió ya la dirección de los demás ingenieros de la marca al otorgarle el puesto de Jefe de Ingeniería de pista —centrándose su trabajo en en el circuito, al contrario que ahora—, así que su nuevo cambio de rol es el segundo en un verano mágico para él. A partir de ahora no solo deberá supervisar todo lo que ocurra en los circuitos, sino que también tendrá dirigir los proyectos que se lleven a cargo en la sede de Pirelli Fórmula 1 en Didcot, en el Reino Unido.

El cambio de posición de Muñoz le sitúa directamente bajo Mario Isola, el jefe de Pirelli Fórmula 1. De esta forma, su input y su trabajo serán cruciales para marcar el devenir de la competición en lo que se refiere a los neumáticos. En 2017, la marca ha sido criticada por un producto demasiado duro —como ejemplo, el compuesto más duro se descartó para todo el año después del GP de España— así que habrá mucho trabajo lograr ofrecer compuestos más blandos que permitan mayores variaciónes estratégicas.

La brillante carrera de Manuel Muñoz en la Fórmula 1 no comenzó precisamente hace dos días; en 2011 inició su andadura de la mano de Pirelli —que también reemplazó ese mismo año a Bridgestone en la F1— como ingeniero de la marca italiana en Ferrari, donde trabajó dos temporadas junto a Fernando Alonso. Ambos forjaron una buena relación que acabaría siendo instrumental en otro de sus pasos posteriores. A lo largo de 2013 y 2014, Muñoz se integró en Lotus, donde gracias a su labor pasó a McLaren, siempre como ingeniero de Pirelli.

Su buena relación con Alonso hizo que Muñoz viviera dos temporadas intensas, pero también gratificantes, en el equipo de Woking en 2015 y 2016. De cara a 2017, el plan previsto —y así comenzó la temporada— era el de pasar a Red Bull, pero las cosas cambiaron en verano. En Pirelli constataron su capacidad para dirigir las operaciones en pista y apenas tres meses después, tras la marcha del anterior Jefe de Ingeniería de Fórmula 1, fue el candidato ideal para ocupar el puesto. El fantástico trabajo realizado a lo largo de estos últimos meses le ha supuesto tan rápido ascenso.

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Muñoz afronta un importante desafío trabajando directamente bajo Isola, asegurándose que el producto de Pirelli sea competitivo. Para ello, el trabajo estará tanto en la pista como en la base. Las responsabilidades aumentan para un alcalaíno que es popular tanto entre la gente de dentro del paddock como con los aficionados, para quienes siempre tiene un momento. La Fórmula 1 va hablando cada vez más español y si los pilotos demuestran que tienen talento para estar delante, los ingenieros no son menos.