Como en Silverstone, los pilotos vuelven a jugar con fuego

"Necesitamos respuesta y la que nos dan "pista sucia", no es una respuesta". Mark Webber ha mostrado la intranquilidad con la que afrontan los pilotos este GP de Bélgica tras dos pinchazos en la sesión del viernes y la siguiente duda: ¿se me pinchará una rueda cuando vaya a 250 km/h? "Es necesario un análisis cuidadoso", manifiesta Fernando Alonso, el mismo piloto que estuvo a escasos centímetros de verse involucrado en un terrible accidente en Silverstone si no llega a reaccionar ante un inesperado pinchazo del McLaren de Sergio Pérez. Este ejemplo es uno de los que sirven para poner en tela de juicio, nuevamente, los compuestos de Pirelli dentro de una Fórmula 1 donde la seguridad es una prioridad.

Primero fue Pirelli, luego la ‘silly season’ con los rumores del cambio de aires de Kimi Raikkonen (y compañía) y ahora se ha regresado a Pirelli. Un sándwich de temas extradeportivos ha copado buena parte de la actualidad de la Fórmula 1 en 2013.

El caso de Pirelli se creyó haber resuelto después del cambio de carcasa interna (kevlar por acero) y tras un GP de Hungría sin incidentes. El director deportivo de la firma italiana, Paul Hembery, ha hecho un primer estudio superficial de lo sucedido "tanto a Sebastian Vettel como a Fernando Alonso, que tuvieron un pinchazo en la rueda trasera derecha cerca de la curva 14". En un análisis inicial plantea que "ambas fueron causadas por un factor externo, probablemente restos en la pista", una explicación que no convence a Webber. En Silverstone, Pirelli indicó primero que se trataba de los "pianos" agresivos del trazado y posteriormente a que los neumáticos no fueron debidamente montados o que no llevaban la presión correcta (una respuesta más convincente).

Al margen de los pinchazos al inicio de la temporada, causados supuestamente por desgaste, en el GP de Gran Bretaña cuatro monoplazas sufrieron reventones en sus ruedas traseras izquierdas: los del inglés Lewis Hamilton (Mercedes), el brasileño Felipe Massa (Ferrari), el francés Jean-Eric Vergné (Toro Rosso) y el mexicano Sergio Pérez (McLaren). Este hecho provocó que una semana después, en Alemania, la Asociación de Pilotos de Grandes Premios (GPDA) emitiera un texto en el que advirtieron que se retirarían "inmediatamente de la carrera si se manifiesta cualquier problema similar durante el Gran Premio de Alemania".

Los pilotos han solicitado a la FIA un escrito para garantizar su seguridad, algo que no se ha considerado oportuno en el máximo organismo del automovilismo. El sol y la temperatura del asfalto belga tendrán mucho que decir en unfin de semana en el quelos pilotos volverán a jugarcon fuego.