Es noticia
Juanjo Lobato, expulsado del Lotto Jumbo por consumir somníferos sin permiso
  1. Deportes
  2. Ciclismo
no despertaba y fue llevado al hospital

Juanjo Lobato, expulsado del Lotto Jumbo por consumir somníferos sin permiso

Junto a otros dos compañeros es apartado "por haber usado medicamentos para dormir, no relacionados con el dopaje, que no fueron proporcionados por el equipo o usados en el mismo"

Foto: Juanjo Lobato, con Lotto Jumbo. (Team Lotto NL Jumbo Cycling)
Juanjo Lobato, con Lotto Jumbo. (Team Lotto NL Jumbo Cycling)

Aseguraban con convencimiento las personas más implicadas con el desarrollo del ciclismo actual que su pasado más oscuro, el de las trampas eran tan habituales como el propio deporte en sí mismo, que no permitía diferenciar entre una cosa y la otra, estaba erradicado. Los años 90 no volverían nunca más. Hay tantos análisis, tanto control al pelotón profesional que resulta si no imposible sí improbable participar bajo los efectos de sustancias prohibidas, que se podía volver a confiar en que lo que veíamos por la televisión y a pie de ruta eran deportistas limpios jugando simplemente a ser los mejores llevando sus cuerpos hasta el extremo natural. Esta semana indica justo lo contrario.

Después de la noticia del positivo de Christopher Froome en la pasada Vuelta a España, un nuevo escándalo está revolviendo el pelotón mundial y afecta, en este caso, directamente a un corredor español. El equipo LottoNL-Jumbo ha informado este miércoles de que ha expulsado por tiempo indefinido a tres ciclistas, entre ellos Juan José Lobato, por usar o estar en posesión de medicamentos para dormir no relacionados con el dopaje. Además, en el caso de Lobato se plantea rescindirle el contrato unilateralmente al considerarlo la persona que suministró los medicamentos a sus compañeros.

El Lotto, que se entrena en Girona hasta este viernes, ha expulsado a Lobato y a los holandeses Antwan Tolhoek y Pascal Eenkhoorn "por haber usado o estar en posesión de medicamentos para dormir, no relacionados con el dopaje, que no fueron proporcionados por el equipo o usados en el mismo". El equipo los ha expulsado indefinidamente por considerar que se trata de "una grave violación de las estrictas normas del equipo ciclista". "Debido a su comportamiento inaceptable, que contraviene los valores fundamentales del equipo, la dirección ha expulsado indefinidamente a los tres ciclistas", señala.

Según diferentes fuentes, la alarma saltó entre la dirección del equipo holandés cuando encontraron a Eenkhoorn deambulando por los pasillos del hotel desorientado y con un comportamiento extraño. Se percataron posteriormente de que Tolhoek había consumido somníferos, Stilnox y Noctamid, según cuenta 'El País', pero ya el susto fue mayor cuando encontraron a Juanjo Lobato durmiendo en su habitación y no pudieron despertarlo. Pidieron una ambulancia, pero cuando llegó Lobato ya estaba despierto, aunque igualmente fue llevado al hospital junto a sus compañeros y de madrugada regresaron al hotel.

El representante de Juanjo Lobato aseguró a 'El País' que el corredor gaditano no les proporcionó las pastillas a sus compañeros, solo unas gotas. "Él no participó en la fiesta, sino que tomó el somnífero para dormir sin más", dice Juan Campos. Esto evidencia lo extendido que está entre los ciclistas profesionales el uso de productos para dormir, que los atontan y desconciertan no solo durante las horas en las que buscan conciliar el sueño. El Lotto Jumbo es el primer equipo en poner el grito en el cielo, probablemente no sea el último. Lobato será la primera víctima a sus 28 años.

Aseguraban con convencimiento las personas más implicadas con el desarrollo del ciclismo actual que su pasado más oscuro, el de las trampas eran tan habituales como el propio deporte en sí mismo, que no permitía diferenciar entre una cosa y la otra, estaba erradicado. Los años 90 no volverían nunca más. Hay tantos análisis, tanto control al pelotón profesional que resulta si no imposible sí improbable participar bajo los efectos de sustancias prohibidas, que se podía volver a confiar en que lo que veíamos por la televisión y a pie de ruta eran deportistas limpios jugando simplemente a ser los mejores llevando sus cuerpos hasta el extremo natural. Esta semana indica justo lo contrario.