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UFC 227: Dillashaw le da una lección al fanfarrón Garbrandt con su KO
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Cejudo sorprendió al ganar a Johnson

UFC 227: Dillashaw le da una lección al fanfarrón Garbrandt con su KO

En su segunda pelea en un año, Dillashaw volvió a ganar a Garbrandt, que había dicho que era demasiado para su rival. En el peso mosca, Henry Cejudo dio la sorpresa al ganar a Johnson

Foto: Dillashaw (d) y Garbrandt (i) repitieron su pelea de 2017 y el resultado fue el mismo: victoria para el primero. (USA TODAY Sports)
Dillashaw (d) y Garbrandt (i) repitieron su pelea de 2017 y el resultado fue el mismo: victoria para el primero. (USA TODAY Sports)

TJ Dillashaw y Cody Garbrandt son dos luchadores que, podríamos decir, se detestan. Se han dicho de todo y han tenido los peores gestos posibles. Ambos lucharon hace un año por el título del peso bantam y saltaron chispas, especialmente después de que Garbrandt le dedicara una peineta a su rival en medio de la pelea. Son cosas que le pierden al de Ohio, que en ocasiones se viene demasiado arriba. Le pasó en aquella pelea de la que salió noqueado y le volvió a pasar esta vez, en UFC 227. Días antes de la pelea no dudó en decir que era "demasiado rápido, demasiado fuerte y demasiado malo para Dillashaw", actitud que le ayudó poco. Dillashaw sabía de esta tendencia de su rival y no dudó en prepararle una emboscada. Lo tenía todo preparado al milímetro.

La dinámica de esta segunda pelea fue muy parecida a la primera, con Dillashaw trabajando mucho las patadas y Garbrandt saliendo a golpear con su explosividad característica. Pero Dillashaw hizo una pelea muy inteligente. Era obvio que había estudiado a su rival hasta la extenuación y conocía perfectamente sus secuencias de golpeo. Así que, en esta ocasión, cuando Garbrandt salía a golpear, Dillashaw retrocedía un poco y se plantaba para contraatacar con todo. Se lo hizo tres veces y a la tercera le cazó: esquivó su croché por abajo y le colocó una mano al mentón que sacó a Garbrandt de la pelea. A partir de ahí, este intentó sobrevivir, pero era demasiado tarde.

Johnson vs Cejudo

En la rueda de prensa, Dillashaw no pudo evitar decir que ese puñetazo le había sabido especialmente bien. Con él dio por finalizada su rivalidad con Garbrandt: “Hay victorias que son especiales y esta lo es. Por mí esta etapa con Garbrandt ha terminado. Ahora quiero otro reto". Dillashaw no dudó en señalar a los otros dos grandes protagonistas de la noche, Demetrious Johnson y Henry Cejudo, que se batían por el cinturón del peso mosca. Los dos protagonizaron una pelea muy igualada y muy táctica en la que, por primera vez en mucho tiempo, vimos a Johnson pasarlo mal e incluso perdiendo en la lucha. Al final hubo decisión dividida y la victoria se la llevó Cejudo, que hizo historia porque ganó al mejor luchador libra por libra de UFC. La verdad es que fue toda una sorpresa.

Cuando le preguntaron en la sala de prensa a Cejudo cómo se sentía, esta fue su respuesta: "No os podéis imaginar cómo me siento. Hace diez años yo no tenía ni papeles. Éramos pobres. Hoy puedo decir que he ganado una medalla de oro olímpica para este país y a Demetrious Johnson”. Lo cierto es que Cejudo estaba exultante y no es de extrañar, después de lo que ha tenido que pasar en la vida y de ganar a un luchador que llevaba 13 victorias consecutivas en UFC, con once defensas del título. Ahora bien, la leyenda de Johnson es tal que Dillashaw parecía preferirle a él antes que a Cejudo en su próxima pelea.

Foto: El cartel que anuncia la pelea entre Conor McGregor y Khabib Nurmagomedov. (UFC)

Vuelve McGregor

UFC 227 fue una noche de gran éxito para UFC, que vendió hasta la última entrada del Staples Center de Los Ángeles y concentró a un buen puñado de 'celebrities' estadounidenses, incluidos algunos miembros de los Red Hot Chili Peppers o a Zlatan Ibrahimovic. UFC sigue ganando en popularidad y es probable que la tendencia siga al alza, sobre todo después de confirmar la superpelea entre Conor McGregor y Khabib Nurmagomedov para el 6 de octubre en UFC 229. Ese combate supondrá el regreso del irlandés a UFC después de su duelo con Floyd Mayweather. La pelea tendrá tintes muy personales, especialmente después del incidente protagonizado por McGregor el mes de abril en Nueva York, cuando llegó a lanzar una carretilla contra el autobús de Nurmagomedov.

TJ Dillashaw y Cody Garbrandt son dos luchadores que, podríamos decir, se detestan. Se han dicho de todo y han tenido los peores gestos posibles. Ambos lucharon hace un año por el título del peso bantam y saltaron chispas, especialmente después de que Garbrandt le dedicara una peineta a su rival en medio de la pelea. Son cosas que le pierden al de Ohio, que en ocasiones se viene demasiado arriba. Le pasó en aquella pelea de la que salió noqueado y le volvió a pasar esta vez, en UFC 227. Días antes de la pelea no dudó en decir que era "demasiado rápido, demasiado fuerte y demasiado malo para Dillashaw", actitud que le ayudó poco. Dillashaw sabía de esta tendencia de su rival y no dudó en prepararle una emboscada. Lo tenía todo preparado al milímetro.

Conor McGregor
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