Yusta, el jugador "muy entrenable" del Madrid que ya ha dejado de ser una promesa

Que un entrenador diga de uno de sus jugadores que "juega bien todos los días" es un gran elogio. Eso es lo que piensa Pablo Laso de Santi Yusta, el canterano que esta temporada regresó al Real Madrid tras dos años cedido en el Obradoiro y que poco a poco está adquiriendo más importancia en los planes del entrenador vitoriano. Este domingo, en la victoria ante el Joventut en Badalona (66-84), fue el mejor con 18 puntos y 4 rebotes.

Cuando el Madrid anunció en verano que recuperaba a Yusta, costaba imaginarlo jugando más que los minutos de partidos decididos, pero las numerosas bajas le han dado más protagonismo del previsto y él lo está aprovechando. Tras la lesión de Rudy Fernández en diciembre, Laso le dio la titularidad y de momento la está manteniendo. Sus estadísticas, salvo el partido de este domingo y el de finales octubre en Burgos no llaman la atención, pero está jugando muy bien, sobre todo en defensa.

"Yusta para mí juega bien todos los días. Sabe la oportunidad que tiene de jugar, se lo ha ganado y está respondiendo", dijo Laso el viernes tras la victoria en casa ante el Maccabi, partido en el que anotó 7 puntos en el primer cuarto. Esos 7 puntos son su máxima anotación en Euroliga, como los 18 son su tope en la Liga Endesa (igualando las dos ocasiones en que lo hizo con el Obradoiro, una ante el Madrid).

El rendimiento de Yusta es solo un ejemplo más del buen trabajo del Real Madrid con la cantera que dirige Alberto Angulo en los últimos años, tan importante como los éxitos del primer equipo desde la llegada de Laso. Solo la promoción de un talento como Luka Doncic ya vale por el esfuerzo de años en la formación de jugadores, pero en la base madridista hay mucho más. Nikola Mirotic y Willy Hernangómez, uno más aprovechado que el otro, juegan en la NBA. Jonathan Barreiro o el propio Yusta comienzan a hacerse un sitio en la Liga Endesa, donde otros como Dos Anjos o Cate también han debutado. Y en la primera plantilla también está Dino Radoncic, con quien el Madrid ha preferido seguir un camino similar al de Doncic.

Con Yusta, en la cantera desde categoría infantil, se tomó la decisión de cederlo en el verano de 2015. El madrileño formaba parte del júnior que lo ganó todo aquella temporada, incluido el título europeo. Doncic era la estrella de un equipo que dirigía Paco Redondo, ahora ayudante de Laso, y que contaba con los ya nombrados Barreiro, Dos Anjos o Cate. Con 18 años, el Obradoiro apostó por Yusta y Yusta apostó por el Obradoiro. Dos años después, el resultado solo puede calificarse de exitoso.

"Es un tío muy maduro para los años que lleva en el juego, que no le tiembla la mano, que nunca se esconde a la hora de tomar decisiones, que juega como si tuviera treinta y muchos y que en ese cuerpo de 20 años, su sangre fría es de treinta y muchos, creo que eso será lo culpable de su éxito como jugador", explicaba en verano a 'Planetacb' Moncho Fernández, su entrenador las dos últimas temporadas en Santiago de Compostela.

En febrero de 2016 demostró esa sangre fría en la Copa del Rey de A Coruña. En el partido de cuartos de final ante el Baskonia no le temblaron las piernas y anotó 10 puntos que permitieron al Obradorio, anfitrión del torneo, poner contras las cuerdas al equipo vitoriano, que acabó siendo subcampeón. Tuvo algún que otro partido similar, pero en general sus estadísticas fueron irregulares. Normal en un jugador de 18/19 años (no hay muchos de esa edad en ACB). Lo que buscaba el Real Madrid no eran tanto buenos números como maduración.

"(Yusta) Es un jugador que conocemos desde hace mucho tiempo, el trabajo que han hecho de cantera con él es magnífico. Cuando terminó su etapa junior necesitaba tiempo de juego en otro equipo, el trabajo de Moncho en Obradoiro ha sido muy bueno y sabíamos que nos podía dar muchas cosas en su vuelta", dijo Laso este domingo en Badalona. “Es un jugador magnífico, muy entrenable y con mucho margen de mejora. Miramos hoy sus números pero ha sido capaz de defender con mucho nivel a un jugador muy importante en el Joventut como es Vidal. Lo que valoramos mucho es que nuestros jugadores crezcan y hagan crecer al equipo", continuó.

Yusta ha sido durante mucho tiempo una de las grandes promesas del baloncesto español. A nivel de club y de selección lo ha jugado todo y lo ha ganado casi todo en categorías inferiores. Su crecimiento ha sido modélico, paso a paso, sin prisa, pero sin pausa. Y ahora empiezan a verse los frutos. Lo celebran Laso y Sergio Scariolo, que tiene su nombre apuntado en su libreta.