Es noticia
Asesinato de un candidato presidencial
  1. Cultura
  2. Cine
estreno de 'colosio, el asesinato', de carlos bolado

Asesinato de un candidato presidencial

Estreno de 'Colosio, el asesinato', una película de Carlos Bolado sobre el asesinato del candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio, en 1994

Foto: Una escena de 'Colosio, el asesinato'. (SPLENDOR)
Una escena de 'Colosio, el asesinato'. (SPLENDOR)

“Hay décadas en las que no pasa nada. Y semanas en las que pasan décadas”.Colosio, el asesinatose abre con una cita clásica de Lenin sobre los acelerones de la Historia. La contextualiza en unos títulos de crédito repletos de titulares de 1994. Cuando México vivió unas semanas de infarto informativo: firma del tratado de libre comercio con EEUU, alzamiento zapatista en Chiapas y enfrentamiento entre las diversas facciones del PRI. La madre de todas las crisis políticas tocó techo con el asesinato del candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio, meses antes de las elecciones.

El filme mexicano apuesta por las teorías alternativas sobre el homicidio, las que señalaron al fuego amigo del PRI, una especulación conspirativa alimentada por las contradicciones de la versión oficial y los manejos gubernamentales.

Colosio había sido diputado, senador,presidente del PRI y secretario de Desarrollo Social en el gobierno de Carlos Salinas de Gortari. Era un hombre del aparato.En noviembre de 1993 fue nombrado sucesor de Gortari en medio de una lucha cruenta en el interior del PRI. Para colmo, el 1 de enero de 1994 Chiapas se levantó en armas. El mismo día que entraba en vigor el acuerdo de libre comercio con EEUU. Los zapatistas derribaron el mito de la paz social y provocaron una crisis política que se solapó con la crisis interna del PRI. El proceso neoliberal se había atascado.

El 6 de marzo de 1994, Colosio dio un discurso electoral frente al Monumento a la Revolución Mexicana que provocó un maremoto político. El candidato criticó la deriva liberal y corrupta del PRI. Sus palabras se interpretaron como un intento por dar perfil propio a una candidatura discutida por los sectores inmovilistas del PRI. Palabra de Colosio: “Veo a un México de comunidades indígenas que no pueden esperar más a las exigencias de justicia, dignidad y progreso”… “A un México de hombres y mujeres afligidos por el abuso de las autoridades".“Como partido de la estabilidad y la justicia social, nos avergüenza advertir que no fuimos sensibles a los grandes reclamos de nuestras comunidades”.

¿Era Colosio un rupturista o un oportunista? ¿Quería transformar México o era el enésimo movimiento gatopardista de un PRI que llevaba en el poder desde 1929? Dicen que el discurso pudo costarle la vida. No obstante, si hubo una mano negra detrás del homicidio, quizás tuvo más que ver con cuotas de poder que con cuestiones ideológicas de fondo, aunque ambas variables pudieron cruzarse. El hecho es que Colosio fue asesinado de un tiro en la cabeza durante su primer acto de campaña. Un 23 de marzo.

La policía detuvo al autor del disparo segundos después de apretar el gatillo. Lo del autor intelectual ya fue otro cantar. De eso se ocupa el filme. Al estilo del asesinato de JFK, la versión oficial habló de tirador solitario y perturbado. La alternativa, por el contrario, habló de ajuste de cuentas entre familias del PRI. El partido habría entrado en una deriva homicida que le haría perder el poder en 2000 tras siete décadas al frente de México. Que José Franciso Ruiz Massieu, cuñado de Salinas de Gortari y secretario general del PRI, fuera asesinado seis meses después de Colosio no ayudó precisamente a que remitieran las teorías conspirativas.

El director del filme, Carlos Bolado, ha explicado así su posición:“Tú no puedes acusar a nadie sin las pruebas. México es un país de rumores y son muy fuertes, aunque a veces dicen la verdad…No podemos acusar porque no tenemos pruebas, de lo contrario iríamos directamente a la fiscalía, pero hubo muchos intereses en borrar pruebas… Nosotros simplemente apuntamos a que fue un crimen de Estado. En esa época el Estado y el partido eran lo mismo, igual que el sistema electoral”.Resumiendo: convicción, toda; pruebas, ninguna. Una ambigüedad que lastra un filme incapaz de poner toda la carne en el asador. Su conspiración es demasiado fantasmagórica. No acaba de quedar claro quién y por qué.

En el arranque deColosio, el asesinato, aparece un agente viendola escena televisiva del asesinato. A cámara lenta, rebobinando una y otra vez, como si buscara algo oculto en las imágenes, al igual que el director del filme, que busca algo oculto tras la historia oficial. Lo que encuentra es a la fontanería del PRI trabajando a pleno rendimiento para enmarañar la verdad. Algo perfectamente verosímil. Pero esto no es elJFKde Oliver Stone. Lo que allí era un trepidante thriller político que te llevaba en volandas a lomos de la conspiración, aquí es una intriga con falta de nervio y estética de telefilme. Una película que, como le ocurre a la versión oficial del asesinato de Colosio, presenta más sombras que certezas, pese a la interpretación de Daniel Giménez Cacho como la inquietante mano que mueve los hilos del PRI.

Colosio, el asesinato
Director: Carlos Bolado
Reparto: José María Yazpik, Daniel Giménez Cacho, Kate del Castillo.
Género: Thriller
Nacionalidad: México
Duración: 100 minutos

“Hay décadas en las que no pasa nada. Y semanas en las que pasan décadas”.Colosio, el asesinatose abre con una cita clásica de Lenin sobre los acelerones de la Historia. La contextualiza en unos títulos de crédito repletos de titulares de 1994. Cuando México vivió unas semanas de infarto informativo: firma del tratado de libre comercio con EEUU, alzamiento zapatista en Chiapas y enfrentamiento entre las diversas facciones del PRI. La madre de todas las crisis políticas tocó techo con el asesinato del candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio, meses antes de las elecciones.

Crimen
El redactor recomienda