El 'boom' de los libros de segunda mano

Los libros de segunda mano tienen muchos seguidores, cada vez más. Tanto por su precio ventajoso como por el aumento de la concienciación ante la sostenibilidad, como por la magia que encierran sus páginas. Muchos lectores agradecen tener en sus manos una cubierta roñosa que solo a través del tacto cuente una historia, un fetichismo que solo los libros usados tienen el privilegio de satisfacer. El caso es que las librerías de segunda mano han experimentado un aumento en su popularidad. Basta pasearse por los madrileños barrios de Lavapiés o Malasaña para encontrarse con numerosos establecimientos de artículos usados con precios tentadores. La segunda mano se ha convertido en el apellido moderno que acompaña a muchas de las compras en los últimos años. Ha pasado de ser algo con connotaciones negativas y vinculado a escasos recursos a una señal de ecologismo, sostenibilidad e historia.

El precio medio de un libro de primera mano ronda los 19,99 euros, según Statista, un portal de estadísticas. Un lector asiduo consume, al menos, tres libros al mes, lo que supone un desembolso de 60 euros mensuales. Y a eso se añade que la franja de edad que más activamente practica la lectura es la de los jóvenes de entre 14 y 24 años -según un estudio de la Federación de Gremios de Editores de España-, para quienes ese desembolso de 60 euros mensuales resulta especialmente gravoso. Además, la inflación en 2022 ha sido la más alta de los últimos 40 años, alcanzando un 8,4% de media. Y la inflación no solo repercute en el valor de la gasolina, el aceite o la luz: los libros se han visto afectados por un aumento de entre el 20% y el 30%.

El precio medio de un libro de primera mano está en torno a los 19,99 euros, y son los jóvenes de entre 14 y 24 años los que más leen

Todo eso explica el auge de los libros de segunda mano. El de la reutilización es un mercado en auge, que además de precios competitivos en ocasiones brinda también ofertas. Un libro por 4 euros, dos libros por 6 euros: esa es por ejemplo la propuesta de la cadena de librerías lowcost Reread. Fundada en Barcelona, con más de 10 años en el sector y ya presente por todo el país, cuenta con servicio de tarjetas de regalo y su propio merchandising, como las tote bags (Las famosas bolsas de tela) con la leyenda "Me vuelves Lorca". Además, si alguien te regala un libro que no te gusta no hace falta que te lo quedes y lo uses como pisapapeles: Reread tiene en su portal la opción de vender libros.

Entrar al mercado de San Fernando, en el madrileño barrio de Lavapiés, supone encontrarse con puestos de comida, carnicerías, fruterías y... ¡una librería de segunda mano! Se llama La Casquería y nació hace unos 11 años, cuando un grupo de amigos decidió abrir este establecimiento que se dedica a vender libros usados al peso. Se trata de una modalidad de venta que no discrimina entre títulos de galardonados con el Premios Nobel y novelas románticas, el peso es lo único que marca la diferencia.

"Leer no es un lujo, la segunda mano hace muy asequible al lector conseguir libros, las bibliotecas públicas también. Me asombra el precio de los libros de primera mano, leer desde luego no es un lujo, seguir las modas sí que lo es", sentencia Mario, uno de los fundadores de La Casquería.

Paga lo que consideres que vale: esa es la apuesta arriesgada que abandera Tuuulibrería. Entonces, ¿quién tasa el valor de un libro? En este caso quien fija el precio es el comprador, el lector, el consumidor de cultura, tú en definitiva. Pero hay excepciones: hay una sección con títulos etiquetados como "libros especiales", que se venden por Wallapop y que se centra en ediciones antiguas y de colección. Tasadas, eso sí, por la mitad del precio que normalmente se pide por ellas.

Grandes del sector como La Casa del Libro o Amazon se han sumado a la venta de la segunda mano

Como la mayoría de los fondos de estas librerías proceden de donaciones, muchas veces no encuentras ese libro que tanto te gusta o el que es tendencia en Booktok. Para eso hay tiendas de este estilo que se enfocan en libros de colección. Es el caso de La Tarde, fundada por un coleccionista que ha decidido poner en venta su repertorio de 70.000 libros.

"Los libros siempre han sido un lujo. Mi librería, a diferencia de otras de segunda mano, no está centrada en que te compres un libro barato para leer, que sí, también los hay. Pero La Tarde se centra sobre todo en el coleccionismo y en ediciones raras, y por eso se paga pasta", afirma el coleccionista y dueño de la librería.

Un planteamiento curioso es el de @libro2damano, una cuenta de Instagram que ofrece el método de subasta inversa. En esa cuenta se ofrece cada día un libro a un determinado precio. Cuenta con un apartado que permite a los usuarios interactuar y decidir si quieren comprar el libro a ese precio o esperar a que baje. Así, el precio del libro se reduce cada día en 50 céntimos, hasta que alguien decida pujar por él y quedárselo.

Los grandes se unen

Tal es el auge de este mercado que grandes del sector como La Casa del Libro o Amazon no se han quedado atrás y se han sumado a la venta de libros usados, con secciones en sus páginas webs que redirigen a otros vendedores -por lo general, con precios superiores a los que habitualmente se encuentran en librerías de segunda mano-.

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Portales de internet como Wallapop, Vinted o Milanuncios se han especializado en la venta de artículos usados, libros incluidos. Coincidiendo con el Día del Libro de 2022, Milanuncios realizó un estudio sobre la compra de libros de segunda mano: los resultados arrojaron que la demanda de libros usados ha aumentado un 30% desde el año 2020, generando más de 9,8 millones de euros en el 2021.

Ya sea por sostenibilidad, por moda o por economía, el de la segunda mano es un mercado creciente. Y no solo en lo que respecta a los libros, sino tamboién a ropa, electrodomésticos, móviles o artículos del hogar. La economía circular que da una nueva vida y utilidad a objetos desaprovechados ya se ha convertido en una opción frecuente y popular.