El gran batacazo del teatro durante la pandemia: más de 400 millones de euros en pérdidas

El batacazo del sector de las artes escénicas en los años de la pandemia -2020 y 2021- en toda España ya tiene una cifra concreta: más de 400 millones en pérdidas, según el informe ‘Impacto del Covid-19 en exhibidores, compañías y productoras escénicas’ que han hecho público esta tarde FAETEDA (Federación Estatal de Asociaciones de Teatro y Danza) y la Red de teatros y festivales de titularidad pública, y que ha contado con el respaldo del Ministerio de Cultura a través del INAEM. Ese es el guarismo que sale tras varias encuestas a salas exhibidoras, productoras y compañías de todo el país, públicas y privadas -si bien no hay una cifra concreta de participantes- y que arroja otros datos bastante negativos: se dejaron de vender 16 millones en entradas, una de cada cuatro empresas redujo plantilla y las nuevas creaciones se desplomaron. La fotografía del informe es un verdadero desastre.

Si se ajusta el foco, el informe destaca que en 2020, cuando los teatros cerraron completamente durante dos meses mínimo, la facturación cayó en 249 millones de euros (un 64% menos que en 2019), mientras que en 2021, cuando comenzaron a abrir -no a igual ritmo en todas las Comunidades Autónomas- la caída con respecto a 2019 fue de 166 millones (un 44% menos). Con respecto a las entradas la reducción fue de entre 8,3 y 12,3 millones de en 2020 y de entre 5 y 7,5 millones de entradas en 2021, respecto de los datos de 2019.

En 2020, cuando los teatros cerraron completamente, la facturación cayó en 249 millones de euros (un 64% menos que en 2019)

¿Qué explica la caída de facturación? La disminución de la venta de entradas, ya que fue un 59% menos en 2020 y un 36% menos en 2021. Pero el sector también añade la reducción de los fondos públicos y de los patrocinios.

Consecuencias

Entre las consecuencias que trajo la pandemia para los teatros hay algunos datos más curiosos. Por ejemplo, la respuesta del público, que fue más exultante en 2020 que en 2021. No todas las comunidades respondieron igual con la apertura de teatros. Madrid fue la más predispuesta a una rápida reapertura seguida de Baleares y Cantabria mientras que Castilla La Mancha, Canarias y Asturias fueron las más lentas. Y el público acudió con más ahínco en 2020 allí donde fue posible que en 2021. Cuando se quitaron todas las restricciones se notó más la bajada de público -en aforos completos- por “miedo al contagio, las limitaciones de movilidad y una peor experiencia en general”, cita el informe.

Los temores también provocaron que se redujera la edad de los públicos y, paradójicamente, los teatros que más sufrieron la caída fueron los de las grandes ciudades, habituados a más aforo (y por ende, más ingresos). Con la reapertura se vivió también una concentración de espectáculos. Una gran mayoría de teatros montaron las obras que se habían quedado colgadas en 2020 y apenas hubo nuevas producciones en 2021. El 52% de los recintos disminuyó la programación de nuevas propuestas para dar cabida a esos espectáculos, lo que también provocó un parón en la creación.

Hubo teatros y compañías que lo intentaron, pero lo digital no acabó de funcionar y, de hecho, no tiene visos de quedarse en ninguna parte. “Prácticamente, la mitad los recintos y compañías manifiestan sus dudas respecto a la idoneidad del formato digital para la actividad escénica”, incide el informe. Pero ni siquiera en otros ámbitos como el márketing ya que las empresas señalan que no tienen recursos tecnológicos para ello, pese a que, precisamente, las ayudas del fondo de recuperación del Ministerio van destinadas, en gran parte, a la digitalización.

Problemas desde 2008

Si bien el informe centra sus resultados en lo ocurrido en 2020 y 2021, también hace un exhaustivo recorrido por el sector -y la cultura en general- desde 2008 a 2019, ya que cuando llegó la pandemia apenas se había recuperado de la gran recesión que empezó en 2008.

Entre estos datos se recoge que, si la aportación al PIB de las actividades culturales en 2008 había sido de 38.000 millones de euros, en 2013 apenas llegó a los 32.000 millones de euros. La cifra de 2021 que ofrece el Anuario de Estadísticas Culturales del Ministerio de Cultura y Deporte 2021 -el último con datos- es de 30.171 millones de euros. Un reflejo de que la recuperación en el ámbito cultural es lenta.

Pero donde más se notó la recesión fue en el gasto de los hogares en cultura. Entre 2007 y 2019 se redujo un 34%, lo que equivale a 350 euros menos. Y si en 2013 el gasto medio por persona en productos culturales fue de 288,7 euros, en 2021 fue de 230 euros de media en toda España. Sí, nos gastamos menos en cultura en 2021 que en lo peor de la crisis económica.

Si en 2013 el gasto medio por persona en productos culturales fue de 288,7 euros, en 2021 fue de 230 euros. Nos gastamos menos que en la crisis

Yendo en concreto a las artes escénicas, el informe también refleja la precariedad de los trabajadores del sector hoy. El 80% de los encuestados percibe un nivel de precariedad mayor en las artes escénicas que en otros sectores. El 70% declara la necesidad de complementar sus ingresos con trabajos ajenos a las mismas y solo un 43% de los encuestados declara haber cotizado más de 180 días al año, y un 14,9% declara haber cotizado entre 90 y 180 días.

Exigencias a la Administración

Por tanto, con estas cifras en la mano -del catacrak de la crisis al batacazo pandémico- el sector ha plasmado algunas exigencias a la administraciones públicas, sobre todo, al Ministerio de Cultura. La primera es que aumenen las ayudas directas, seguida de una reducción en el IVA (ahora está en el 10%). Por su parte, los teatros públicos piden se modifique la Ley de Contratos del Sector Público por las excesivas trabas burocráticas que genera mientras que los privados solicitan que se desarrolle ya el Estatuto del Artista (por las intermitencias en el trabajo, cotizaciones, paro etc). Es decir, que los artistas tengan un estatus especial dentro del régimen laboral.

Precisamente, el INAEM ha anunciado esta tarde después de la reunión del Consejo Estatal de las Artes Escénicas y de la Música que en 2022 ha inyectado a este sector 134 millones en ayudas. En esta cifra están incluidos los créditos gestionados en 2022 de Fondos Europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.