Las reglas para la supervivencia que Patricia Highsmith anotó en sus diarios son maravillosas

Fue un descubrimiento asombroso. Aquella famosa escritora misántropa y hostil, celosa fanática de su intimidad, que nunca concedía entrevistas y que, cuando las concedía, sólo respondía con monosílabos, no había ofrecido nunca otra ventana para asomarse subrepticiamente a su vida que su propia obra de ficción. Imaginen la conmoción cuando, a su muerte, se encontraron nada menos que cincuenta y seis gruesos volúmenes -dieciocho diarios y treinta y ocho cuadernos- en el fondo del armario para la ropa blanca de su domicilio. Por primera vez, los investigadores y curiosos podían adentrarse en la documentación personal de Patricia Highsmith (1921-1995), observar cómo la 'dama del crimen' y una de los mejores escritoras del siglo XX se veía a sí misma.

Anagrama publica este 23 de septiembre un tesoro editorial, los 'Diarios y cuadernos 1941-1995', de Patricia Higsmith, 'Patricia', 'Pat', la autora de 'Extraños en un tren', de la saga de novelas protagonizadas por el inolvidable asesino refinado Tom Ripley, la maestra de la novela negra, capaz de la más insoportable tensión narrativa y la más aterradora penetración psicológica. Y como anticipo de estas más de 1.200 páginas del que seguramente es el acontecimiento editorial del otoño en nuestro país, ahí van estas maravillosas 'reglas para la supervivencia' que la escritora registró en sus cuadernos el 24 de marzo de 1967.

Reglas para la supervivencia

1) Piensa con estrechez de miras. Es decir, sé formal, amable, serio y si es posible más papista que el papa. Supera a los esnobs.

2) Cree que mejoras constantemente.

3) Deja que otra gente haga tantas tareas como sea posible.

4) Cree que has escogido la mejor manera posible de vivir. Date por satisfecho.

5) Descansa siempre un poco más de lo que necesitas. Es decir, déjalo antes de estar agotado.

6) Come tanto como puedas, a la mínima oportunidad. Aprovecha también todo el sol.

7) Cree que ya has logrado prodigios, teniendo en cuenta tu tiempo y energía.

8) Ten una réplica alegre y amable lista para cualquier detractor.

9) Cultiva el esfuerzo seguido por la relajación, a la manera de un atleta.

10) Causas de angustia:

1. Sensación de culpa.
2. Sensación de haber tomado una decisión equivocada respecto a la vida propia, personal o profesional.
3. Fatiga, que también conduce a la angustia porque uno puede volver la vista atrás y ver cómo podría haber ahorrado energía. En mi caso, siempre es con los quehaceres domésticos, nunca con el trabajo.
4. Podría ser la envidia, pero en estos momentos no hay nadie a quien envidie.