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Ikonika, la estrella de la música electrónica: "Rechazar el reguetón es racista"
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concierto en la casa encendida de madrid

Ikonika, la estrella de la música electrónica: "Rechazar el reguetón es racista"

Hablamos con una de las figuras más sólidas de la escena dubstep británica que se encuentra de gira en España

Foto: Ikonika
Ikonika

Agradable sorpresa: el festival Electrónica en Abril (Madrid), conocido por su papel de escaparate hipster de la música de clubes, reconoce este año el poder del Caribe . El texto que explica la programación de este año suena bastante claro: “El reguetón y el dancehall, dos géneros con una profunda historia a sus espaldas y, en muchos casos, marcados por la polémica, protagonizarán algunos de los momentos más atractivos del fin de semana. Tanto Merca Bae como Endgame, alrededor del Bala Club inglés, han decidido abordar el perreo musical desde un punto de vista iconoclasta. Baile en su máxima expresión.

Foto: Giorgio Moroder en acción. (EFE)

Lo mismo sucede con el dancehall y sus diferentes mutaciones. El movimiento contará con dos portavoces de esas nuevas líneas que están investigando los riddims jamaicanos: Equiknoxx, directamente desde Las Antillas, y STILL, creando conexiones entre el norte de Italia, Etiopía y Kingston. Globalidad bien entendida”. El párrafo, ciertamente, da para mucho análisis. ¿Qué polémica ha suscitado el reguetón aparte de su rechazo por los oyentes más estirados? ¿En qué consiste el “perreo iconoclasta”? ¿Qué diferencia existe entre “bailar” y “bailar en su máxima expresión”? Las respuestas llegarán a lo largo de esta decimosexta edición.

Racismo sonoro

Dentro de los nombres seleccionados, destaca el de Ikonika, una de las estrellas más sólidas de la escena dubstep británica. Su nombre real es Sara Abdel-Hamid, londinense de padre egipcio y madre filipina. Sus progenitores se conocieron en el aeropuerto de Heathrow y vivieron muchos años en las inmediaciones. El estruendo de aviones retumbando en las paredes de su casa fueron buen entrenamiento para una vida encerrada en clubes de electrónica. Antes de hablar de su música, le preguntamos por el enfoque de esta edición del festival. ¿Es consciente de que los modernos españoles rechazaron durante muchos años el reguetón y el dancehall y ahora empiezan a aceptarlo, bajo la etiqueta de “experimental”? “Bueno, suena como que esa actitud puede tener un poco de racismo. Seguramente al principio no les entraba porque lo consideraban vulgar. Ahora que es mayoritario y está de moda… ¿quizá hayan visto una oportunidad de apropiárselo? Para mí, el dancehall siempre ha sido experimental. Es una palabra extraña: poner “experimental” como adjetivo de cualquier género se ha convertido en sinónimo de “sofisticado”. Me da que es una distinción demasiado artificial”, explica.

Láser azules y accidentes de coche

Definir la música de Ikonika es complicado. Su apuesta puede presumir de ecléctica, dentro del minimalismo y la atención a los matices. ¿Qué tipo de concierto tiene preparado para el sábado? “Estoy muy contenta con mis últimas grabaciones, así que me centraré en eso. Podéis esperar cualquier cosa desde ambient hasta grime, pasando por el r’n’b ”. Básicamente, desde lo más suave hasta lo más áspero de la música de baile actual, pasando por lo más melódico. Para concretar un poco, le pido que describa el último concierto suyo con el que se quedó realmente satisfecha. “Disfruté mucho la fiesta de presentación de ‘Distractions’ (2017). Alquilamos los estudios Corsica de Londres, que tiene dos salas. De las visuales se encargó Mungo, que también hará las de Madrid. Montamos una instalación que mostraba las influencias del álbum, además de tres pantallas con imágenes relacionadas y también un accidente de coche. En la segunda habitación, la llenamos de humo procedente de unos cubos de hielo seco. Se creó un ambiente denso rematado con luces láser de color azul. Allí compartí la cabina con algunos de mis amigos”, recuerda. La electrónica como experiencia inmersiva y alteradora de la percepción.

Machismo en los clubes

La entrevista no puede evitar el gran debate cultural del año pasado: ¿se siente discriminada en su trabajo por ser mujer? “¡Obviamente! No tengo ni de lejos las mismas oportunidades que mis compañeros hombres”. ¿Qué puede hacerse para mejorar la situación? “Necesitamos más chicas representando distintos géneros de la música de club. Y que se nos juzgue menos por aspectos extramusicales y más por nuestro trabajo. Vamos…tampoco es tan complicado. Para mejorar la situación solo requiere algo tan elemental como pensar de manera inclusiva a la hora de trabajar”, afirma.

Necesitamos más chicas representando a la música de club. Y que se nos juzgue menos por aspectos extramusicales y más por nuestro trabajo

Para muchos oyentes veteranos, la escena electrónica atraviesa uno de sus peores momentos, tras el arrase de la Electronic Dance Music (EDM), que contagió a los discjockeys los peores tics del pop comercial y del rock de estadio. ¿Comparte Ikonika el pesimismo general? “De ninguna manera. La música del Reino Unido está en un momento espléndido. Recomiendo mucho las producciones de Steel Bangelz. También adoro a artistas como Spice, Hood Celebrityy, Taliwhoah, Jammz, Mist y MoStack. Acabo de terminar un trabajo con 45 Di Boss. Me parece increíble colaborar con un tipo que despliega ese enorme talento vocal. Además trabaja muy rápido”. Teniendo en cuenta la calidad de sus grabaciones y directos, habrá que tener muy en cuenta las recomendaciones que comparte Ikonika. En el siguiente enlace pueden consultar la programación de Electrónica en Abril.

Agradable sorpresa: el festival Electrónica en Abril (Madrid), conocido por su papel de escaparate hipster de la música de clubes, reconoce este año el poder del Caribe . El texto que explica la programación de este año suena bastante claro: “El reguetón y el dancehall, dos géneros con una profunda historia a sus espaldas y, en muchos casos, marcados por la polémica, protagonizarán algunos de los momentos más atractivos del fin de semana. Tanto Merca Bae como Endgame, alrededor del Bala Club inglés, han decidido abordar el perreo musical desde un punto de vista iconoclasta. Baile en su máxima expresión.

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