Es noticia
Vetusta Morla: "¿Qué pasaría si una Nochebuena no pusieran el discurso del rey?"
  1. Cultura
entrevista

Vetusta Morla: "¿Qué pasaría si una Nochebuena no pusieran el discurso del rey?"

El grupo de Tres Cantos (Madrid), que triunfa con 'Mismo sitio, distinto lugar', está conquistando México, Colombia y Argentina

Foto: Vetusta Morla (EFE)
Vetusta Morla (EFE)

Cuesta encontrar una banda española que haya sufrido una acogida tan destemplada. A pesar de su sonido indie, se toparon con la abierta hostilidad de un sector de aficionados al género. Festivales emblemáticos como Primavera Sound se niegan a incluirles en su cartel. Los Directivos, un grupo efímero y humorístico, les dedicaron un himno burlón, titulado 'La tortura' . Revistas especializadas como Rockdelux no les quieren dar portadas, ni incluirles en las listas de mejores discos del año. Contra viento y marea, sin prisa pero sin pausa, se han ganado el respeto y el cariño de sus compañeros de profesión. Por ejemplo, Nacho Vegas hace un cameo en el vídeo de 'Te lo digo a ti', junto a Lolita y Nacho Vigalondo. El superventas Bunbury les invita a su disco desenchufado y ellos devuelven la cortesía pidiéndole cantar en un concierto de Vestusta. El pujante Jacobo Serra contó con Juanma La Torre (guitarra y compositor) para producir su último disco.

Batallitas de prestigio aparte, Vetusta Morla continúa su intenso romance con el público de habla hispana, que les ha llevado en volandas al nivel de estadio. Para quien todavía no les haya escuchado, podríamos describirles como unos Héroes del Silencio para la generación Radiohead. Pero sería injusto, ya que tienen su propio estilo, cada vez más definido en el reciente ‘Mismo sitio, distinto lugar’. Conquistada ya España, tienen todas las papeletas para lograrlo en Colombia, México y Argentina, los tres principales mercados musicales de habla hispana en América Latina. Pese a quien pese, ya son un grupo clásico del rock español.

PREGUNTA. ¿El objetivo inmediato es América Latina?

RESPUESTA. Guillermo Galván: Siempre nos ha interesado. Es genial tener la música como salvoconducto para entrar en otros países. La cultura popular de allí es maravillosa y tengo la sensación de que, desde Europa, se mira con demasiada sensación de superioridad. Por ejemplo, me encanta el bombo legüero de Argentina, que es un instrumento que tiene mucho que ver con lo que se hace en España o en África. Cuando viajas por allí te das cuenta de que en nuestro país la palabra “mestizaje” tiene demasiadas connotaciones negativas. Hay mucho que aprender de América Latina. Mira como el reguetón se ha ganado su sitio en la industria. No podemos mirar eso como algo de rango inferior. Nos encanta la sala, la salsa choke, el merengue… Hay que aprender a que se te vaya la cadera como se les va a ellos. Yo comprendí eso en unas vacaciones en Venezuela. Allí la música une a todos, a pesar de los estratos sociales. No sé, la rumba española tiene ritmos parecidos al reguetón. Nuestra canción 'Consejo de sabios', aunque no lo parezca, podría ser un reguetón lento.

Pucho Martín: Por ejemplo, fue impresionante tocar en el Rock al Parque, un festival gratuito que se celebra en Bogotá. Actuamos ante cien mil personas. Se hicieron los pogos más salvajes que hemos visto.

P: ¿Cómo vivió el grupo el rechazo inicial del mundo indie?

No gustábamos a la radiofórmula y tampoco al indie más talibán. Eso nos ha permitido desarrollar una carrera personal, al margen de unos y de otros

Guillermo Galván: Es extraño, pero eso que puede parecer negativo nos ha permitido desarrollar una carrera personal, al margen de unos y de otros. Me refiero a que no gustábamos a la radiofórmula y tampoco al indie más talibán. Seguramente, a los últimos les molestó que el público conectase con algo que no había recibido su sello de prescripción. Por contra, nosotros hemos sido una casa de puertas abiertas, donde ha entrado todo el que ha querido pasar. Nunca hemos mirado con rencor un festival por no llamarnos.

Pucho Martín: Yo estoy encantado porque siempre voy al Primavera Sound como público y así lo disfruto más relajado, sin preocuparme por tocar.

Guillermo Galván: Al final, los festivales se ha convertido en marcas. Ya no es como los noventa, cuando cada grupo pertenecía a un redil. Hoy no está claro que el indie exista, pero sabemos que la independencia tampoco depende de que un festival te llame o no.

P: Se os ha intentado denigrar con el adjetivo “épico”. Arcade Fire y Springsteen son épicos que molan, pero vosotros épicos que no.

Hay mucho que aprender de la música de América Latina

Pucho Martín: No son argumentos lógicos. Sigur Rós también son épicos que molan, un poco porque sí. Hay gente que dice que nuestra música se les hace bola. A mí me pasa con otros grupos, por ejemplo Perfume Genius. Tampoco pasa nada.

Guillermo Galván: Noto mucho respeto hacia nosotros. Personas que no nos tragaban ahora nos miran diferente. Lo sé porque nos lo cuentan ellos mismos. Son comentarios que me encantan porque es como ir a un festival y ganarte a quienes se quedan en la barra, tomando cervezas, que son los más difíciles de convencer. Ahora mismo, gustemos más o menos, se reconocen nuestros logros.

Juanma La Torre: Épico es descriptivo, no un juicio de valor, pero sí es verdad que con nosotros suena peyorativo. Tenemos cosas épicas y otras que no. El final de 'Los días raros' es muy épico, mientras que 'Tour de Francia' no, ya que trata de una siesta viendo deporte en la tele. Nuestros discos son como la vida, que tiene momentos muy diferentes. El rock es épico por naturaleza y muchos oyentes buscan épica cuando compran la entrada de un concierto.


P: Otra cosa que os distingue es el compromiso político: apoyo al referéndum del Sáhara, petición de justicia para José Couso, la reconstrucción del conservatorio de Lorca, la financiación de las escuelas de música de Madrid…Incluso ceder una canción para una campaña de Podemos, que puede crear muchas antipatías.

Guillermo Galván: Más que político, diría que tenemos compromiso ciudadano. Nos interesa lo que ocurre alrededor. Nos gusta que haya relación personal con el proyecto en el que participamos. ‘La deriva’ (2014) fue un disco con las antenas hacia afuera y no podíamos ignorar la crisis a nuestro alrededor. Por eso letras como 'Golpe Maestro'. Cada causa que apoyamos tiene un motivo detrás. Nosotros hemos sido alumnos de escuelas de música municipales. No solo nos parecen importantes para la gente que va, sino por el tejido social que se crea alrededor.

P. En este disco destaca 'El discurso del rey', con una letra que parece decir que las élites actuales tienen una retórica vacía, que no está a la altura de la emergencia social.

Juanma La Torre: Es una lectura posible. La canción se pregunta por las cosas que marcan nuestra percepción del tiempo. ¿Qué pasaría si una Nochebuena enciendes la televisión y no está el discurso del rey? Crearía desconcierto, pero también sería una oportunidad de empezar a hacer las cosas de manera diferente. La letra se me ocurrió hace dos navidades, cuando estábamos la familia reunida, charlando y brindando. Entonces mi padre dijo ‘Vamos a poner el discurso del Rey’. En vez de poner la tele del salón, se fue a la cocina, donde encendió otra chiquitita para volver inmediatamente con nosotros. Me imaginé al Rey viendo la escena, pensando que estábamos haciéndole el vacío y tomando la decisión de no volver al año próximo.


P. Habláis de “compromiso ciudadano” en vez de “político”. ¿Tan mal suena la última palabra?

Guillermo Galván: Uso ‘ciudadano’ en vez de ‘político’ porque la palabra ‘política’ nos la han hurtado los profesionales de la política. Para mí, el público acepta que los artistas aborden cuestiones sociales siempre y cuando sientan que lo hacen de manera natural. Incluso la industria lo acepta. Este año, por ejemplo, Residente hizo un disco muy social y le han dado cinco Grammy latinos. Puede parecer que hubo rechazo a un álbum como ‘Resituación’ de Nacho Vegas, pero nunca he visto a tanta gente cantando en un concierto como cuando lo presentó en Joy Eslava.

Juanma La Torre: Hay una visión reduccionista. La gente escucha que un grupo es político y piensa que le vas a dar una chapa para que metas una papeleta determinada en la urna. No noto que los músicos tengan más rechazo a hablar de política que otros colectivos. También ocurre a nivel personal. Mi chica no me deja hablar de política porque dice que soy un rojeras. (Risas).

P: Pucho tiene fama de ir mucho al teatro. ¿Incorporas a los conciertos algo de lo que ves?

Pucho Martín: Voy mucho al teatro, al cine y a exposiciones. Soy bastante devorador de cultura. Hablo mucho con Maxi, el responsable de iluminación y le comento cosas que he visto en alguna obra. El también me recomienda espectáculos que le gustan. No suelen ser elementos literales. Por decir algo concreto, he integrado cosas del teatro kabuki para mi propio vestuario. Estuve viendo una expo de una escala de kabuki del siglo XVIIi en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Me encantaban las telas que tenían de los quimonos, la superposición de patrones me dio ideas de vestuario. En la exposición de Bowie que hubo en Barcelona me di cuenta de que él también lo usaba, con el diseñador japonés que le hizo los famosos bombachos. El kabuki también nos ha inspirado para la caída del telón de los conciertos, por ejemplo. El rock tiene un elemento teatral que no hay porqué rechazar.

Cuesta encontrar una banda española que haya sufrido una acogida tan destemplada. A pesar de su sonido indie, se toparon con la abierta hostilidad de un sector de aficionados al género. Festivales emblemáticos como Primavera Sound se niegan a incluirles en su cartel. Los Directivos, un grupo efímero y humorístico, les dedicaron un himno burlón, titulado 'La tortura' . Revistas especializadas como Rockdelux no les quieren dar portadas, ni incluirles en las listas de mejores discos del año. Contra viento y marea, sin prisa pero sin pausa, se han ganado el respeto y el cariño de sus compañeros de profesión. Por ejemplo, Nacho Vegas hace un cameo en el vídeo de 'Te lo digo a ti', junto a Lolita y Nacho Vigalondo. El superventas Bunbury les invita a su disco desenchufado y ellos devuelven la cortesía pidiéndole cantar en un concierto de Vestusta. El pujante Jacobo Serra contó con Juanma La Torre (guitarra y compositor) para producir su último disco.

Música
El redactor recomienda