Los mejores trucos para mantenerte fresco y despierto sin tener que recurrir a la cafeína

En épocas de exámenes, mucho trabajo, noches de fiesta, primeras noches con un bebé... Son muchos los motivos por los que podemos querer ser capaces de mantenernos despiertos durante horas y llegamos incluso a abusar de la cafeína.

Abusar del café es perjudicial para nuestra salud por diferentes motivos y es por eso que lo mejor es evitarlo; sin embargo, no siempre es posible, sobre todo cuando necesitamos permanecer despiertos.

No obstante, aunque a veces no lo parezca parezca, mantenerte despierto y no dormirte por los rincones en el día a día es posible sin necesidad de beber café. Para ello, tan solo tendrás que seguir los consejos y recomendaciones de los expertos que recoge Lifehacker. Es más, estos consejos pueden ser incluso más eficaces que beberte una taza de café.

Bebe agua y come

Aunque la cafeína es la que te puede dar un chute de energía a corto plazo y rápidamente, lo más eficaz para mantenerte despierto durante todo el día es mantener a tu cuerpo bien nutrido e hidratado. Por tanto, lo que realmente necesitas para mantenerte activo es tanto el agua como la comida.

Beber agua es muy beneficioso para la salud por diferentes motivos, pero uno de ellos es que beberla fría te hará sentirte más despierto. Con la comida ocurre lo mismo, pero hay que evitar ingerir alimentos muy pesados, porque estos son los que pueden hacer que te sientas más cansado y somnoliento por culpa de una pesada digestión.

Ingerir calorías saludables también te hará sentirte más despierto.

Muévete, haz ejercicio

Si estás tratando de mantenerte despierto y tu atención en una actividad monótona y sientes que el sueño se está apoderando de ti, quizá sea el momento de dejar lo que estés intentando hacer y moverte, caminar durante algunos minutos o incluso hacer algo de ejercicio físico más agresivo, ya que este aumenta tus niveles de energía, puede despejarte y agudizar tu cerebro.

Es más, lo ideal es dar esta caminata al aire libre, bajo la luz solar, que es otra fuente de energía para nuestro cuerpo. No tiene que ser durante mucho tiempo para que no te distraigas, con quince minutos es suficiente. Después de este parón, podrás volver a la actividad que estabas desarrollando previamente mucho más despierto.

Duerme la siesta

Aunque parezca paradójico, echarte una siesta de 20 minutos es una buena manera de no quedarte dormido. Si te sientes muy cansado y estás en un lugar en el que puedes acostarte, lo ideal es que lo hagas, pero no 8 horas, como mucho 20 minutos, que es la duración ideal. Tras esta siesta, te encontrarás mucho más despierto y descansado.

Si descansas más de 20 minutos puede que tu ciclo normal de sueño se vea afectado y que esa noche no puedas descansar correctamente, así que no abuses de estas siestas, pero permítete descansar unos minutos siempre que lo necesites.