¿Qué es el modo monje? La técnica para aumentar la productividad que arrasa en TikTok

De vez en cuando, se ponen de moda diferentes métodos para aumentar la concentración y la productividad en el trabajo o en los estudios. El método Feynman o la técnica Pomodoro son ejemplos de ello. A algunos les funcionan y a otros les desesperan. Ahora, parece que ha aterrizado en las redes sociales el “modo monje” o “monk mode”, una nueva técnica para ser un Terminator de la productividad.

Como explican en Business Insider, “el modo monje consiste en completar un objetivo sin ninguna distracción”. Es una actitud con la que todos nuestros sentidos están comprometidos con una tarea. Se emula la práctica de aislamiento y autodisciplina de los monjes. De esta manera, como los monjes, alcanzaremos “un estado de atención plena, alejándonos de cualquier tipo de distracción”. Pero, ¿cómo se hace?

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El modo monje se puede dividir en cuatro pasos esenciales, que conforman toda la disciplina, y algunos de ellos los debemos aplicar día a día. El primero es marcarnos un objetivo medible, con fecha de inicio y fecha de fin. Por ejemplo, aplicar el modo monje a nuestro trabajo diario o a una rutina de ejercicios.

El segundo paso requiere constancia

El segundo paso consiste en varios hábitos que tendremos que realizar todos los días para estar en forma. Debemos deshacernos de los malos vicios, como beber y fumar. Y necesitamos aplicar a nuestro día a día nuevas rutinas saludables, como salir a correr, hacer ejercicio, comer bien, meditar todos los días o descansar. Todo lo que nos ayude a estar en forma para afrontar nuestros objetivos y conectar con nuestro cuerpo y nuestra mente.

El tercer paso envuelve la técnica en sí. Se trata de los periodos largos de trabajo, el momento que vamos a reservar para enfocarnos en nuestra tarea que hemos establecido en el primer paso. Será un periodo de tiempo, por ejemplo, cuatro horas, en el que tendremos cero distracciones. Ni móviles, ni juegos, ni familia, ni llamadas. Estamos solos ante nuestra tarea.

El cuarto y último paso es el aislamiento. Es el paso más complicado de todos, porque requiere disciplina, fuerza de voluntad y la colaboración de las personas que nos rodean. Si trabajamos desde casa, debemos informar a nuestra familia de que vamos a entrar en el modo monje, no pueden interrumpirnos. Vamos a aislarnos, en una habitación, por ejemplo, y vamos a trabajar en nuestro objetivo.

El modo monje es algo flexible y permite adaptarlo a nuestras necesidades

Muchas personas encuentran en el modo monje un método más fácil de seguir que otros en los que se intercalan pausas, ya que en estas pausas uno se puede distraer fácilmente y encontrar luego dificultades para retomar la tarea. El modo monje se centra en el enfoque y la concentración junto con el aislamiento. No es una técnica para todos, pero puede funcionar muy bien si la persona que la aplica es capaz de mantener los cuatro pasos en todo momento.

Aunque no lo parezca, el modo monje es algo flexible. Cada uno elige por cuánto tiempo va a aislarse y en qué horas puede hacerlo, tal vez una vez al día o varias veces al día. También es buena idea establecer las horas en las que se estará disponible para familia y compañeros de trabajo. La parte más complicada del aislamiento es no distraerse con los pensamientos propios. Esto requiere práctica y, cuando dominemos la técnica, seremos capaces de hacer mucho trabajo en menos tiempo que antes.