¿Por qué son tan caros los productos sin gluten?

El 27 de mayo se celebra el día nacional del celíaco. Pese a que a día de hoy se conoce más sobre esta enfermedad digestiva que daña el intestino delgado y altera la absorción de las vitaminas, minerales y demás nutrientes que contienen los alimentos, aún existen ciertas dudas al respecto. No existen distintos niveles o grados de celiaquía y no tiene cura.

Aquellos aquejados con celiaquía no toleran la proteína del gluten, que se encuentra en los cereales (trigo, avena, cebada, centeno), pero también se debe tener cuidado con otros alimentos como determinados procesados, carnes, salsas o embutidos. Cuando no han sido diagnosticados y siguen manteniendo una dieta que contenga estos alimentos, pueden sufrir hinchazón, gases, dolor de estómago, diarrea o vómitos.

Por suerte, en la actualidad, los celíacos tienen muchas opciones a las que pueden acceder para evitar problemas de salud. Pero, ¿son los precios de sus productos iguales que los de aquellos que no tienen ninguna clase de alergia alimentaria o enfermedad? Vamos a hacer una comparativa de precios entre productos con o sin gluten para ver las diferencias. Nos hemos basado en la oferta gluten/sin gluten de varios supermercados online.

Pan

El pan en todas sus formas es el producto en el que más diferencia de precio se aprecia en función de si tiene gluten o no. Generalmente, muchas barras de pan compradas en el supermercado no llegan al euro (rondan desde los 0,40 céntimos aproximados a los 0,80). A veces, también hay muchas que se encuentran en oferta y puedes llevarte, por ejemplo, tres baguettes por 1,20 €. La misma baguette sin gluten (y una sola), no suele bajar del 1,60€.

Pan de molde

La oferta de pan de molde es bastante variada para los productos sin gluten, y suelen ir del euro, con corteza, a los 2 € en caso de que estén hechos de masa madre. El pan de molde sin gluten en un embase de 300 gramos puede ir de los 2,99 € a precios comprendidos entre los 4 y los 6 euros.

Magdalenas

Desde las que pertenecen a marcas blancas no suelen llegar al euro (0,70 céntimos aproximados en envases de seis unidades), y las de marcas más caras (envasadas individualmente en 18 unidades aproximadas y que pueden costar hasta 2,29 €), la oferta con gluten es variada. En el caso de la oferta sin gluten, las más baratas (en paquete de seis) cuestan 2,73 €, y las más caras (una bolsa de 225 gramos, también de seis), 4,51 €.

Macarrones

Un kilo de macarrones con gluten puede ir desde los 0,75 céntimos a 1,89 euros, en función de la marca. En el caso de los que están libres de gluten, un paquete de la misma marca de tan solo 500 gramos puede costar 1,82 €, y, el más caro, hasta 3,23 € (siendo un envase de 400 gramos).

Pero, ¿por qué son tan caros?

Hemos puesto solo algunos ejemplos, pero en realidad las diferencias también se pueden observar en otros alimentos tales como la lasaña, la pizza, las tartas, el pan de hamburguesa, la cerveza, la harina, las galletas e incluso determinados cosméticos. Hay dos razones principales por las que los productos sin gluten se encarecen tanto: por un lado, la fabricación de alimentos para dietas especiales no se vende tan fácilmente ni en tan grandes cantidades como las dietas que llamaríamos normales. Por otro lado, y aunque pueda parecer contradictorio, los alimentos sin gluten contienen muchísimos más ingredientes. Por ejemplo, la Asociación Nacional de Molineros de Harina Británicos e Irlandeses señala que una barra de pan sin gluten puede tener más de 20 ingredientes en su receta, principalmente para compensar la falta de trigo.

Los alimentos sin gluten contienen muchísimos más ingredientes y no se venden con tanta facilidad, por eso se encarecen sus precios

A pesar de que en la comparativa realizada por Celíacos.org entre los años 2009 y 2019 aprecia una bajada de los costes de los productos sin gluten (lo que, según explican, puede deberse a que muchas personas sin celiaquía han decidido por su propia voluntad comenzar a tomar alimentos libres de gluten y eso ha aumentado la demanda), todavía existe una gran diferencia de precios. Es decir, aunque se observa una tendencia a igualar los precios de los productos sin gluten a los productos con gluten, queda un largo camino para que se normalice.

El estudio que realizaron en 2019, basándose en una dieta de 2000 a 2200 calorías, y eligiendo productos de marcas blancas, intermedias, o más caras, concluyó que una familia con un miembro celíaco podía incrementar su gasto en la cesta de la compra en casi 19,49€ a la semana, lo que significa un incremento de unos 77,95 € al mes, y de 935,46 € al año, sobre otra familia que no cuente con ningún celíaco entre sus miembros. Por supuesto, si hubiera más de un miembro en la familia, los gastos se incrementarían.

Un estudio de 2019 concluyó que una familia con un miembro celíaco podía incrementar su gasto en la cesta de la compra en casi 935 € al año

La ley de la oferta y la demanda marca un problema de difícil solución, las materias primas para la fabricación son más caras y específicas y la población que requiere productos sin gluten, aunque es cada vez mayor, sigue siendo poca en comparación con el conjunto general. Sin embargo, como los celiacos no tienen opción a elegir otros productos, están marcados por la obligatoriedad. Es por ello que en un día como hoy parece necesario hacer una pequeña reivindicación al respecto.