Las normas de etiqueta que debes seguir si quieres triunfar en la fiesta de Nochevieja

El último día del año da para mucho. Promesas de todo lo que haremos cuando cambiemos de mes, desde dejar de fumar hasta ir al gimnasio, y que se van desinflando conforme pasan los días, gente a la que vemos y a la que echábamos de menos, preparación de cenas y uvas con 'Mecano' de fondo, y, por supuesto, la fiesta de Nochevieja. Esa celebración en la que haces lo mismo que cada viernes solo que disfrazado de gala y pagando mucho más por las copas.

Ahora bien, si quieres asegurarte de que tu comportamiento no te convierta en una persona non grata para la fiesta del año que viene, lo mejor es que te grabes con fuego algunas de estas normas de etiqueta esenciales antes de que llegue el gran día, todo cortesía de la revista 'Best Life'.

Qué hacer

Comer antes de ir a la fiesta. Generalmente si comienzas a beber antes de la fiesta la noche tiende a salir mal, no cometas ese error y asegúrate de cenar antes de llegar y que comiencen a correr las bebidas, aunque, por otro lado, es bastante probable que te reúnas con tu familia para tomar un suculento menú de cinco platos y postre.

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Ada Nuño

Lleva un regalo. Si vas a casa de alguien, no vayas con las manos vacías, hombre. Eso es de primero de etiqueta, por mucha confianza que tengáis. No hace falta gastarse una millonada, pero adornos para el árbol, un postre o algo divertido nunca está de más.

Socializa. Haz un esfuerzo, por mucho que te cueste, por mezclarte con la gente del evento al que estés asistiendo, es una oportunidad estupenda para conocer a nuevas personas.

Pregunta. A todos nos encanta hacernos fotos que subir a las redes sociales para que nuestros conocidos y compañeros de fatigas vean lo bien que nos lo estamos pasando, pero asegúrate antes de que todo el mundo está de acuerdo. Podrías meter a algunas personas en líos o avergonzarlas.

Vuelve a casa. Nunca está de más ser previsor, no esperes a que alguien de la fiesta se ofrezca a llevarte o a que el anfitrión te deje un sofá. Asegúrate de planificar el transporte con tiempo para poder dormir en tu mullida y cómoda cama.

Qué no hacer

Organizar la fiesta sin avisar a tus vecinos. A lo mejor se trata de una pareja de ancianos que aspiran a irse a dormir en cuanto den las uvas. No perturbes su sueño, y si lo vas a hacer, pide disculpas con antelación e infórmales de cualquier trastorno que puedas causar.

A todos nos encanta hacernos fotos que subir a las redes sociales, pero asegúrate antes de que todo el mundo está de acuerdo con que lo haces

Hacer la 13/14. Por muy aburrida que sea la fiesta, tampoco es plan de lanzar una bomba de humo y desaparecer sin dejar rastro. Y aunque te lo estés pasando muy bien con otras personas, abandonar a la persona con la que llegaste tampoco es de buen gusto.

Dominar la conversación. Seguro que tus anécdotas son muy divertidas, pero si quieres mantener las amistades para el año que viene, déjales hablar un poco.

Cuidado con los zapatos. En España tenemos la fea costumbre de entrar en las casas sin quitarnos los zapatos, pero si tu anfitrión ha estado limpiando desde por la mañana el suelo quizá no le hace mucha gracia que entres con tus botas embarradas y le manches el parqué.

No respetar la etiqueta. Si el que invita te ha aconsejado que te pongas corbata o traje, no le hagas el feo presentándote con un look casual. Ir elegante siempre es una buena idea.

Sobre todo disfruta, no bebas mucho y, si lo haces, no conduzcas, y despide el año rodeado de gente que verdaderamente te importe, para que el nuevo sea más apoteósico (si cabe). ¡Chin chin!