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Tres alimentos que eliminar de tu dieta para dormir mejor por la noche
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Tres alimentos que eliminar de tu dieta para dormir mejor por la noche

Para que Morfeo no te suelte en toda la noche, mejor que comas ligero. Estas son las cenas que debes evitar a toda costa si quieres descansar

Foto: Foto: iStock.
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Vivir bien siempre es sinónimo de dormir bien. Si no quieres que tu condición física, mental y emocional se resienta, lo mejor será que hagas las paces con Morfeo y te venga a visitar todas las noches. Algo que desgraciadamente no sucede con demasiada frecuencia: más de cuatro millones de españoles tienen problemas crónicos para dormir por la noche, según los datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), entre un 20 y un 48% de los adultos.

La falta de sueño tiene que ver más de lo que crees con lo que comemos cada día. Hay alimentos que hacen un flaco favor a tu descanso nocturno. Por ejemplo y el que es más evidente, el café o la cafeína. Si tomas demasiado, aunque solo sea por la mañana, tienes muchas más probabilidades de no poder dormir correctamente; incluso aunque lo consigas, tu sueño seguramente no sea completamente profundo o reparador.

Los expertos recomiendan ingerir productos lácteos como el yogur o la leche, ricos en calcio, en caso de quedarte con hambre

Todo el mundo sabe que no hay mejor sensación que despertarse por la mañana y sentirse descansado, perfectamente preparado para hacer frente a los retos del día a día. En caso contrario, nos sentiremos menos productivos y nuestra memoria se resentirá. Es imprescindible, pues, cenar de una forma ligera para conseguir una noche relajada y un sueño sin interrupciones. El diario 'The Independent' propone tres alimentos que nunca deberías tomar en horario nocturno para conseguir unas noches más plácidas y tranquilas.

La carne roja

Muy difíciles de digerir, ya que cuentan con una gran cantidad de grasas saturadas, así como un alto nivel de sodio y proteínas. Todo esto augura una digestión incómoda y prolongada. Por ello, si ya es de madrugada y aunque apriete muchísimo el hambre, mejor pensar en ingerir otro tipo de alimento más ligero. Por no hablar de la comida basura en forma de hamburguesas o perritos calientes. Si quieres tener un sueño reparador y sentirte descansado al día siguiente, mejor algo suave.

El alcohol perjudica al sueño REM durante la segunda mitad de la noche

Pero si te apetece mucho y aún quieres comer un buen filete de ternera, David Gibson, experto británico en sueño, recomienda dejar al menos cuatro horas entre una comida pesada y la hora de acostarse. Si aun así quieres recenar y sigues con hambre después de esas cuatro horas, los expertos aconsejan tomar productos lácteos como el yogur o la leche. Son ricos en calcio, por lo que ayudan a reducir el estrés.

Alcohol

El engaño perfecto a Morfeo. A quién no le apetece una pinta o un buen vino después de un largo y tedioso día de trabajo. La sensación de euforia propia del alcohol te llenará y hará que ya no lo veas todo tan mortecino o aburrido. Pero una vez pasen unos minutos, desaparecerá y en lugar de ella emergerá un estado de sedación placentero pero engañoso.

placeholder Que no te duela tanto el sonido del despertador. (iStock)
Que no te duela tanto el sonido del despertador. (iStock)

"El alcohol afecta negativamente al equilibrio de nuestro sueño REM, el estado profundo en el que se procesa nuestra memoria a corto plazo, especialmente durante la segunda mitad de la noche", afirma Gibson. "Si bebes alcohol antes de dormir, el sueño puede interrumpirse durante este período".

El picante

Si tu aparato digestivo es más bien sensible, el picante puede provocar una inflamación e irritación durante la digestión en tu estómago e intestinos. Esto conseguirá que aparezcan los molestos gases y reflujos gástricos, sobre todo si nada más cenar te acuestas. Por ello, evita este tipo de alimentos con sabor picante en horario nocturno. "Elevan la temperatura del cuerpo y causan molestias en el abdomen", puntualiza Gibson. Si te gusta mucho y no puedes evitar poner una o dos guindillas o unos buenos pimientos del padrón (muy sabrosos, por cierto), mejor resérvalos para la comida. No sea que en vez de Morfeo te visite la acidez estomacal.

Vivir bien siempre es sinónimo de dormir bien. Si no quieres que tu condición física, mental y emocional se resienta, lo mejor será que hagas las paces con Morfeo y te venga a visitar todas las noches. Algo que desgraciadamente no sucede con demasiada frecuencia: más de cuatro millones de españoles tienen problemas crónicos para dormir por la noche, según los datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), entre un 20 y un 48% de los adultos.

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