Las mejores posiciones que puedes adoptar en la cama para dormir
¿Harto de no encontrar la postura correcta? Concíliate con Morfeo con estos consejos de tres expertos
Es cierto: encontrar la posición más cómoda en la cama nada más acostarte puede ser complicado y deparar muchas horas en vela sin hallar la postura que invoque de una vez a Morfeo. Diversos estudios han revelado que hay ciertas actitudes a la hora de disponerte a dormir que se deben dejar de adoptar por los efectos negativos que acarrean sobre su salud.
¿Cuál sería la más adecuada para la salud? Seguramente estés harto de levantarte con dolor de cuello, espalda y articulaciones. 'The Daily Mail' revela las cuatro posiciones principales con las que las personas tienden a dormirse y si son buenas o malas para el bienestar general. Aquí te las contamos.
Posición fetal o "la bolita"
La 'coach' y experta australiana Elina Winnel afirma que las personas deberían evitar quedarse dormidas en posición fetal o acurrucadas. "Quizás no nos damos cuenta que estamos poniendo nuestro cuerpo en una postura de lucha o huida", analiza. "Si nos acostamos con esta posición, podemos mandar una señal inconsciente a nuestro sistema nervioso de que estemos en una posición de alerta, lo que el cerebro traduce en inseguridad a la hora de dormir".
Si duermes boca arriba, evitas que suba el incómodo reflujo o ácido intestinal
Para paliar esta mala posición, Winnel recomienda planchar la oreja con una postura abierta, ya que ayuda a abrir el área de los pulmones, lo que permite realizar respiraciones profundas y un sueño más tranquilo.
De costado
Por su parte, el doctor Ehrlich cree que dormir de costado es una de las mejores posiciones. Debes recoger la almohada con tus brazos y apoyar la cabeza. "Desde una perspectiva estructural, neurológica y muscular, es lo más amable para el cuerpo", asegura. "También sucede que es la mejor para la tarea de la digestión, particularmente acostado del lado izquierdo, donde el esófago se une al estómago".
Tumbado boca abajo
"Lo peor", avisa Ehrlich en su popular libro 'A Life Less Stressed' ("Una vida con menos estrés", en inglés). "Si duermes boca abajo ejerces una presión sobre los músculos de la cabeza, el cuello y la mandíbula y también tuerces la parte inferior de la espalda y la pelvis".
Shelby Harris, experta en medicina del sueño y profesora del Colegio de Medicina Albert Einstein, está de acuerdo con Ehrlich. "Dormir boca abajo implica ejercer fuerza contra todo el cuerpo. Es probable que te despiertes con entumecimiento y hormigueo en los músculos, puede aumentar la posibilidad de padecer un fuerte dolor muscular y articular", advierte.
De espaldas
Muchos expertos y popes en la materia han concluido que es la mejor posición para dormir del resto. "Para no perjudicar a tu salud, lo más recomendable es domir de espaldas con la cabeza, el cuelloy la parte superior del pecho ligeramente inclinados", aconseja el doctor Mark T. Brown a 'The Chicago Tribune'. "Esto proporciona descanso a los hombros y la espalda, y también ayuda a evitar que suba el reflujo de ácido si te acuestas nada más cenar", señala.
Es cierto: encontrar la posición más cómoda en la cama nada más acostarte puede ser complicado y deparar muchas horas en vela sin hallar la postura que invoque de una vez a Morfeo. Diversos estudios han revelado que hay ciertas actitudes a la hora de disponerte a dormir que se deben dejar de adoptar por los efectos negativos que acarrean sobre su salud.