Bale, oculto en Marbella en una ‘urba demodé’ y a espaldas del Rey Fahd

El jugador galés Gareth Bale, el que será el fichaje más caro de la historia del futbol, regresó en la mañana de ayer a Inglaterra desde el aeropuerto de Málaga tras pasar el fin de semana en Marbella y coincidir -aunque sin verse- con el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez.

El paso de Bale por Marbella nada ha tenido que ver con la de otros jugadores como David Beckham o Zinedine Zidane, que eligieron lugares de lujo cien por cien como ‘La Zagaleta’ o ‘Marbella Club’ para alojarse. El galés ha sido más austero y, aprovechando que su representante Jonathan Barnett y otros compañeros suyos de la Premier League, como John Hart, portero del Manchester City, o Ashley Cole del Chelsea, tienen su residencia en ‘La Trinidad’, se ha cobijado bajo el techo de esta urbanización.

Una de las inmobiliarias mas importantes de la ciudad ‘Nvoga’, contratada en su día por Piqué y Shakira para buscarles propiedad y que ha vendido a Manuel Pellegrini su casa de los Monteros, informan a este medio que “el lugar donde se ha alojado Bale, a las espaldas del palacio del Rey Fahd es un complejo habitado por ingleses casi al cien por cien”. Maribel Ocaña precisa que ‘La Trinidad’ ha quedado “reducido a este tipo de clientes. Es una de las urbanizaciones más antiguas de bloques de pisos. Si lo comparamos con otros enclaves de lujo de Marbella, ha quedado ya muy antiguo. Fueron una de las construcciones de la primera época de la ciudad. Normalmente hemos enseñado pisos a jugadores del fútbol inglés que pueden oscilar entre los 3.000 euros el alquiler más caro de larga temporada. Hay ocho bloques de pisos con salida a la carretera de Istan”.

Florentino y Bale el sábado en distintos restaurantes

En su estancia en Marbella Bale ha estado más a la sombra de los cipreses de ‘La Trinidad’ que conociendo los placeres de la villa. Tal vez le ha compensado estar a resguardo, en un lugar seguro, lejos de la prensa y donde poder cerrar los últimos flecos de su fichaje en el Madrid. Llegó a Marbella el mismo día y a la misma hora que el heredero de Arabia Saudí. Se da el caso de que la llegada del Príncipe Salman a Marbella el sabado llenó de Policía y seguridad las inmediaciones de la zona de Al Ryad, pegada a la urbanización de La Trinidad donde se alojaba Bale. La algarabía era tal que según ha podido saber El Confidencial el jugador no se atrevió ni asomar las narices fuera de su ‘círculo de confort’. La ubicación de su residencia a las puertas de la carretera de Istan le ha permitido moverse con naturalidad por esa zona sin ser visto, pero no por los lugares habituales de la jet.

A cada salida que hacía Bale llamaba a la seguridad privada para preguntarle si había mucha prensa esperando fuera de la urbanización y, dependiendo de la respuesta, se movía o no.

Y mientras Bale se escondía, el que presumiblemente será su nuevo presidente se lucía a escasos metros. Florentino Pérez, que pasaba también el fin de semana ‘casualmente’ en Marbella, se acercó a cenar al restaurante de su amigo Santiago Domínguez, santuario gastronomico de Julio Iglesias, Antonio Banderas o el mismísimo Beckham.

El presidente del Madrid no dijo palabra sobre Bale. Comió su marisco habitual con unos amigos y se reservó cualquier opinión sobre el que será su nuevo fichaje. Mientras tanto a Bale, guiado por su maestro de ceremonias Jonathan Barnett, le llevaban a un sitio cerca de casa llamado ‘Babilonia’ para cenar.

El concejal de Turismo marbellí, José Luis Hernández, se congratuló por los días en que ha estado en la ciudad descansando el jugador. Las instantáneas de los paparazzi no aparecen de momento, y en las redes sociales se han empezado a distribuir fotos en las que se ve a Bale curiosamente con el mismo bañador que llevaba en julio, cuando también pasó otras vacaciones en la casa de su agente. En las fotos aparece con el socorrista de ‘La Trinidad’ en la piscina de la urbanización, donde presta sus servicios. El chico está feliz con su foto en el móvil, tal vez la más tuiteada estos días. De momento, Bale ya ha vuelto a Londres. Y ‘La Trinidad’ nunca volverá a recibirle: demasiado modesta para la nueva perla del Bernabéu.