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Al menos 39 muertos y 69 heridos en un atentado en una discoteca de Estambul
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el atacante iba vestido de santa claus

Al menos 39 muertos y 69 heridos en un atentado en una discoteca de Estambul

La policía empieza a recoger los primeros datos de la identidad del autor gracia al arma que el atacante abandonó en el local. El primer ministro ha desmentido que fuera vestido de Papa Noel

Un hombre armado con armas automáticas ha abierto fuego durante las celebraciones de Nochevieja en el Club Reina de Estambul, uno de los locales recreativos más exclusivos de la capital económica de Turquía, en el barrio de Ortaköy. El número de muertos asciende ya a 39, entre ellos 16 extranjeros, y otras 69 personas han resultado heridas, ha informado el ministro turco del Interior, Süleyman Soylu. El ataque fue perpetrado a la 01.30 hora local en el club Reina, situado a las orillas del Bósforo, por un desconocido con un arma automática que está huido y la operación policial para su búsqueda y captura está en curso.

De las víctimas, 16 son extranjeros. Entre los 69 heridos que están recibiendo tratamiento en diversos hospitales, cuatro "están en estado crítico y uno de ellos está gravemente herido", dijo.

El atacante dejó su arma en el lugar de los hechos y la policía cuenta con unos primeros indicios sobre su identidad, ha informado el primer ministro turco, Binali Yildirim. En una rueda de prensa, Yildirim, ha desmentido que el atacante fuera vestido de Papá Noel. "He oído que el terrorista iba vestido de Papá Noel. No es cierto", declaró el primer ministro. "Es un terrorista como ya los conocemos. Disparó al policía de la puerta, entró y ametralló y mató a personas inocentes. Entonces dejó el arma y abandonó el lugar durante el caos", relató el jefe del Gobierno turco.

[Las imagenes del atentado]

Yildirim agregó que la policía tiene "algunas opciones sobre la identidad de los atacantes", sin entrar en más precisiones. "Algunos detalles han comenzado a emerger pero las autoridades están trabajando para lograr un resultado concreto", ha dicho sobre quién podría estar detrás del ataque, del que hasta ahora no se ha responsabilizado ningún grupo.

La televisión CNNTürk ha informado de que la Policía ha lanzado una operación policial en Kuruçesme, un barrio vecino al de Ortakoy, donde ocurrió el ataque, y están buscando allí al sospechoso.

"Desestabilizar al país"

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha asegurado que el atentado busca desestabilizar Turquía. "Están intentando desestabilizar nuestro país y destrozar la moral del pueblo creando el caos. Pero estamos decididos a eliminar estas amenazas en su punto de origen", dijo el jefe de Estado.

"Estos ataques perpetrados por diferentes organizaciones terroristas contra nuestros ciudadanos no son independientes de otros incidentes que suceden en la región", aseguró Erdogan. "Turquía está determinado a hacer lo que sea necesario en la región para mantener la seguridad y paz de los ciudadanos turcos", dijo el presidente en aparente referencia a la lucha del ejército turco contra el grupo terrorista "Estado Islámico" (EI) en Siria. En ese sentido, Erdogan hizo un llamamiento al pueblo turco a mantenerse unido y en calma.

Primeras confusiones sobre el número de atacantes

Durante largo rato ha existido confusión sobre si había habido más de un atacante. En su primera intervención el Gobernador de Estambul ha hablado de un solo terrorista, aunque algunos testigos habían mencionado a al menos dos personas. Según los supervivientes, al menos un hombre vestido de Santa Claus -algo que ha desmetido el primer ministro turco horas después- mató a un policía en la entrada del local y penetró abriendo fuego de forma indiscriminada, tal y como puede verse en este vídeo:

Este sería el momento en el que el atacante se despoja de su abrigo:

Algunos testigos aseguran que el tirador hablaba árabe, lo que apunta a un atentado de probable autoría yihadista. Hasta el momento, el atentado no ha sido reivindicado. El propietario del club, Mehmet Koçarslan, ha afirmado que los servicios de inteligencia estadounidenses le habían alertado sobre un posible ataque de este tipo, y que se habían tomado precauciones al respecto, que no han sido suficientes.

La policía desplazó numerosos agentes al lugar para registrar el local, además de ambulancias, y ha detenido a un taxista que aparentemente llevó a uno de los atacantes al club Reina.

Las imágenes de una de las cámaras de seguridad muestran a un individuo con ropa blanca disparando dentro de la discoteca.

Numerosos asistentes a la fiesta han podido escapar lanzándose a las gélidas aguas del Bósforo, muchos de las cuales han sido rescatados por los Guardacostas.

Una superviviente llamada Sinem Üyanik ha contado su experiencia durante el ataque: "Antes de que pudiese entender lo que pasaba, mi marido cayó encima de mí. Tuve que quitarme varios cadáveres de encima antes de poder salir", ha dicho a agencias turcas en la puerta del hospital de Sisli, donde su marido, Lütfü Üyanik, había sido ingresado por herida de bala.

Aparentemente, el club estaba lleno de gente cuando ha tenido lugar el ataque, y el número de personas en su interior podría rondar las ochocientas personas. Un camarero del local indicó al diario Hürriyet que en el local había entre 500 y 600. Según un usuario, este era el estado del local horas antes de la tragedia:

Las televisiones turcas han mostrado imágenes de supervivientes, en estado de pánico, abrazando a amigos y conocidos antes de montar en alguna de las decenas de ambulancias desplegadas en el lugar. Las autoridades turcas han decretado un bloqueo informativo, una medida habitual en este tipo de atentados, para impedir la difusión de información que pueda ayudar a los terroristas, pero también que resulte perjudicial para el Gobierno.

El atentado se produce horas después de que la policía turca detuviese a 8 presuntos miembros del Estado Islámico en Ankara que, según creen las autoridades de Turquía, estaban preparando un atentado en dicha ciudad esta misma noche. Más de 25.000 agentes de policía estaban desplegados este sábado en Estambul en previsión de posibles ataques. Hasta hoy, un total de 277 personas han muerto en atentados del ISIS en este país.

Un hombre armado con armas automáticas ha abierto fuego durante las celebraciones de Nochevieja en el Club Reina de Estambul, uno de los locales recreativos más exclusivos de la capital económica de Turquía, en el barrio de Ortaköy. El número de muertos asciende ya a 39, entre ellos 16 extranjeros, y otras 69 personas han resultado heridas, ha informado el ministro turco del Interior, Süleyman Soylu. El ataque fue perpetrado a la 01.30 hora local en el club Reina, situado a las orillas del Bósforo, por un desconocido con un arma automática que está huido y la operación policial para su búsqueda y captura está en curso.

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