La segunda enfermera ingresada da negativo en la prueba del virus

Una enfermera de la UCI del complejo hospitalario La Paz-Carlos III que habría mantenido contacto con la auxiliar de enfermería contagiada por el virus del Ébola así como con otros compañeros, fue ingresada la pasada madrugada en el hospital madrileño de la calle Sinesio Delgado, según confirman fuentes oficiales. La prueba de ébola practicada ha dado negativo. Además, el marido de la sanitaria contagiada, que responde al nombre de María Teresa R., se encuentra aislado en el mismo centro hospitalario. Una tercera persona, que se trata de un ingeniero que viajó recientemente a Nigeria también permanece en observación y ha dado negativo en la primera prueba, aunque habrá que esperar 72 horas para practicarle la segunda y definitiva.

María Teresa R. fue trasladada anoche desde el Hospital Universitario de Alcorcón hasta el Carlos III al que llegó a las 00:50 horas. Más tarde, a eso de la 1:50 otra ambulancia del SUMMA llegaba al mismo hospital con el marido de la auxiliar de enfermería, aislado desde entonces en el centro. Además, este diario ha confirmado que hacia las 4:00 de la madrugada ingresó otra enfermera que tuvo contacto directo con la paciente infectada, a la que todavía se le están practicando las pruebas.

Según han relatado fuentes hospitalarias no oficiales a este diario, otra ambulancia habría entrado en el Hospital Carlos III a las 4:30 de la madrugada, esta vez con un médico del Hospital La Paz, que también habría estado en contacto con la sanitaria infectada. Se espera que en el trascurso del día puedan ingresar a más personas que trabajaron con María Teresa R. Asimismo, sí se confirmó que en el día de ayer acudió a la Unidad de Urgencias del Hospital de La Paz una médica intensivista con fiebre, pero que tras una analítica se descartó que estuviera contagiada del virus.

El gerente de La Paz de Madrid, Rafael Pérez-Santamarina, ha precisado que según los responsables sanitarios, la paciente infectada podría haber mantenido contacto con unas 22 personas a las que se someterá a un "seguimiento continuo por si hubiera algún problema". Se trataría de varias personas de su entorno familiar, además de profesionales que le atendieron en los primeros instantes en el hospital madrileño de Alcorcón.

Además, el coordinador del centro de Alertas y Emergencias del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón, confirmó esta misma mañana que “no se descarta aislar a otras personas que hayan podido tener contacto estrecho con la afectada por precaución”. Según explicó, la Comunidad de Madrid empezó el pasado domingo por la noche la tarea de identificación de personas que pudieron haber tenido contacto con la paciente y que hoy tendrá "muy avanzado" o terminado ese listado. Simón subrayó también que la población debe estar tranquila, a pesar de que la probabilidad de que haya una epidemia “es real, aunque muy poco probable”. Según el coordinador de Alertas y Emergencias de Sanidad, la auxiliar de enfermería no tiene “por ahora” ningún “riesgo vital” y se encuentra estable.

"Varias opciones terapeúticas se aplican desde ayer"

Una vez agotadas las existencias del suero ZMapp, que surtió efecto en el paciente estadounidense y que no llegó a aplicarse al misionero Manuel García Viejo al no disponer de más dosis, la directora general de Salud Pública, Mercedes Vinuesa, ha confirmado que ahora se prueban otras opciones terapéuticas.

Los médicos del complejo hospitalario La Paz-Carlos III han explicado en rueda de prensa que en estos momentos se están aplicando a la auxiliar de enfermería infectada dos terapias en fase experimental. En primer lugar, un suero ‘hiperinmune’, que consiste en la muestra de sangre de un paciente que haya superado la enfermedad, y que por tanto, tenga los anticuerpos. Aunque el anonimato es un requisito imprescindible de la OMS para llevar a cabo la donación, todo apunta a que el suero que se está utilizando pertenece a la hermana Paciencia, la misionera que tras ser ingresada en el Hospital St Joseph de Monrovia, superó la infección. El segundo, se trata de un antiviral llamado Favipiravir, hasta ahora desconocido, que estaría haciendo efecto contra el ébola en animales pequeños.