Fainé viaja a México para explicar a Carlos Slim "el bombazo" en CaixaBank

El consejo de administración de la Fundación Bancaria La Caixa aprobó el pasado lunes por unanimidad los cambios en la cúpula directiva, que supusieron la salida de Juan María Nin como consejero delegado. Pero no todos asistieron físicamente al golpe de timón dado por Isidro Fainé, que se ha desplazado a México para explicarle a Carlos Slim los detalles de una decisión histórica.

El presidente del órgano que gestiona ahora CaixaBank y Criteria voló a Ciudad de México el pasado martes para reunirse con el hombre más rico del planeta, según la revista Forbes.Fue una visita de cortesía obligada al magnate latinoamericano, con el que el grupo financiero con sede en Barcelona mantiene una estrecha relación. Mientras el mexicano es el primer accionista individual de la sociedad cotizada,La Caixa es dueña de un 10% (llegó a tener un 20%) de Inbursa, uno de los brazos bancarios de Slim.

Precisamente, en el consejo de administración de Inbursa se sentaba Juan María Nin en representación de La Caixa, que llegó a invertir 1.500 millones para adentrarse en el sistema financiero de la primera economía de Latinoamérica. La coincidencia en este órgano de decisión había generado también cordialidadentre el ya exconsejero delegado yel multimillonario mexicano, que quería conocer de primera mano los motivos del cambio. Su apoyo a Fainé es tal que Nin dejará su asiento en Inbursa, aunque mantendrá losde Gas Natural, Abertis y el austriaco Erste Bank.

El viaje relámpago refleja la rapidez con la que Fainé ejecutó el plan de renovación de la cúpula directiva, en el que llevaba trabajando desde marzo, pero que desconocía gran parte del consejo de administración. El veterano banquero se desplazó a la capital mexicana para exponera Slim los detalles del relevo en la alta dirección, la reacción de los mercados al cambio del equipo gestor y los siguientes pasos a adoptar para definir quién será el verdadero jefe de La Caixa cuando el actual presidente se vaya en menos de dos años. "El bombazo", como se ha definido internamente a la destitución de Nin y al nombramiento de Antonio Masanell y de Gonzalo Gortázar como vicepresidente y consejero delegado, respectivamente.

La gran cercanía de Slim con Fainé le llevó a finales de 2012 a adquirir un paquete de 439 oficinas de la entidad financiera española por 428 millones a través de su inmobiliaria Carso, uno de los mayores holdings inversores de Latinoamérica. Slim es el único consejero extranjero de la recientemente creada Fundación Bancaria de La Caixa, hecho que expone la gran confianza personal que el presidente de La Caixa tiene en el millonario latino.

Fainé aprovechó el vuelo al otro lado del Atlántico para entrevistarse también con John Shepard Reed, miembro del consejo de administración de Caixabank desde 2011. El estadounidense, que fue presidente de Citigroup durante 17 años, hasta su jubilación en 2000, es otro de los hombres de confianza del factótum de La Caixa. Su conocimiento de los mercados de capitales –fue presidente de la Bolsa de Nueva York entre 2003 y 2005– y su proximidad con los inversores institucionales son un apoyo vital para el reforzado número uno del tercer banco de España.

De momento, la bolsa ha encajado bien la salida inesperada de Nin. La cotización de CaixaBank, que este año se ha apreciado un 22%, subió un 2,6% durante las cuatro jornadas posteriores a la destitución del consejero delegado. Fuentes de un bróker internacional explican que la marcha del hasta ahora mano derecha de Fainé no debería afectar mucho a la evolución del banco a corto plazo porque las cuentas están hechas gracias a la reversión de las provisiones dotadas en los últimos años.

El impacto en el medio plazo dependerá del nuevo plan estratégico que diseñe Gortázar, un ejecutivo que, gracias a su etapaanterior como director general en Morgan Stanley, tiene experiencia más que suficiente para armar un equity story con el que convencer a los inversores institucionales..