Las ayudas a la banca elevan el déficit de 2011 al 9,4% del PIB y el de 2012 al 7,4%

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, explicó ayer que el déficit de las administraciones públicas, que fue del 8,96 % del PIB en 2011, se eleva al 9,44 % si se tienen en cuenta las ayudas a la banca, mientras que el de 2012 pasará por el mismo motivo del 6,3 % previsto al 7,4 % del PIB.

No obstante, Montoro aseguró en rueda de prensa que "estas ayudas no computan en la corrección de déficit excesivo", ya que es un desequilibrio que desaparece por sí solo puesto que se trata de préstamos financieros que serán devueltos por las entidades ayudadas.

Se trata de una actualización a título informativo, según Montoro, al añadirse al déficit transacciones financieras extraordinarias que habitualmente no computan como tal, lo que definió como operación one-off.

Montoro admitió que el Gobierno debe calcular el déficit de las administraciones públicas y también la posible repercusión de las operaciones financieras que tienen como objetivo sanear la banca. En este sentido, ha subrayado que la entidad se compromete también a hacer una devolución y ha añadido que la prioridad es conseguir con ese saneamiento que vuelva a fluir el crédito.

Asimismo, señaló que dentro de tres semanas la oficina estadística europea Eurostat emitirá el dato definitivo del déficit de 2011.