Es noticia
Marzo Negro: ¿La última estocada en bolsa para la industria del entretenimiento?
  1. Economía
BOICOT DE ANONYMOUS POR EL CIERRE DE MEGAUPLOAD

Marzo Negro: ¿La última estocada en bolsa para la industria del entretenimiento?

Cuarenta días han pasado desde que el FBI echó el cierre al portal de descargas por Internet, Megaupload. Pocas horas después de tomarse esta medida, miles

Foto: Marzo Negro: ¿La última estocada en bolsa para la industria del entretenimiento?
Marzo Negro: ¿La última estocada en bolsa para la industria del entretenimiento?

Cuarenta días han pasado desde que el FBI echó el cierre al portal de descargas por Internet, Megaupload. Pocas horas después de tomarse esta medida, miles de internautas, comandados por Anonymous lanzaron el mayor ataque informático que se recuerda contra la administración y la industria musical estadounidense. Los usuarios se retiraron pero prometieron volver con una ofensiva que bautizaron como el 'Marzo Negro' (Black March). Ahora, el sector se prepara para unas consecuencias difíciles de prever que inquietan a los analistas.

La industria del entretenimiento encara sus particulares idus de marzo, amenazada por el boicot anunciado por Anonymous sobre discográficas, productoras, editoriales… El mensaje se ha extendido como la pólvora por Internet y no puede ser más claro: “Durante todo el mes de marzo no compres discos, películas, videojuegos, libros ni vayas al cine. Esta medida dejará un agujero en el margen de beneficios que la industria contemplaba para el primer trimestre del año. Es la única forma de que nos hagan caso”.

¿Consecuencias para las principales compañías cotizadas? Los analistas coinciden en dos puntos: es difícil realizar una previsión porque se desconoce el alcance de la iniciativa y, en cualquier caso, no debería haber grandes consecuencias por la brevedad de la misma (sólo el mes de marzo). Sin embargo, a ningún experto se le escapa que cualquier ataque no resulta nada alentador para una industria que atraviesa un momento especialmente sensible. “Los resultados del sector van vinculados al consumo. En los últimos tiempos los datos no han sido demasiado positivos, por lo que llueve sobre mojado”, apuntan fuentes del mercado.

Los analistas consultados por Bloomberg, que siguen habitualmente a estas compañías, sencillamente “llaman a la cautela a la hora de atender a cambios bruscos que puedan alterar la cotización de estos valores”.

Valores más afectados

Tal y como apuntan los expertos de Bolsa 3, “las firmas que en su día estuvieron fuertemente vinculadas a las legislaciones SOPA, PIPA o SINDE son las que están más expuestas a problemas”. Entre ellas destacan compañías claramente posicionadas contra lo que consideran “barra libre” de Internet como Sony, Warner, Disney, Virgin o Netflix. Estas empresas son colosos tecnológicos que, a pesar de su tamaño, apenas consiguen registrar repuntes en su cotización en las últimas 52 semanas.

Los números rojos son la tónica dominante en un mercado al que afecta de forma directa la crisis de consumo. “Son productos generalmente caros, sujetos a altos costes de innovación y desarrollo que no se han visto compensados por las ventas en los últimos meses y que se aferran a la recuperación de los mercados, principalmente asiático y estadounidense”, señalan los expertos.

Entre estas firmas destacan los retrocesos en el último año de Sony (-41%), Nintendo (-50%) o Netflix (-45%). Precisamente, este servicio de video vía ‘streaming’ tenía intención de implantar su negocio en España a principios de 2012, una decisión que la compañía ha desestimado por “motivos puramente empresariales de rentabilidad global”.  Esta es la versión oficial de la empresa frente a otra más extendida que apunta a que, según estudios de mercado, en España no existe el hábito de pagar por los contenidos frente a la política del ‘todo gratis’ que se prodiga por Internet.

Cuarenta días han pasado desde que el FBI echó el cierre al portal de descargas por Internet, Megaupload. Pocas horas después de tomarse esta medida, miles de internautas, comandados por Anonymous lanzaron el mayor ataque informático que se recuerda contra la administración y la industria musical estadounidense. Los usuarios se retiraron pero prometieron volver con una ofensiva que bautizaron como el 'Marzo Negro' (Black March). Ahora, el sector se prepara para unas consecuencias difíciles de prever que inquietan a los analistas.