España superó los 21 millones de afiliados en abril y creó empleo en todos los sectores

El mercado laboral español marcó un nuevo hito histórico en abril. Por primera vez hubo más de 21 millones de personas cotizando a la Seguridad Social en alta laboral a lo largo del mes. En concreto, la afiliación media mensual alcanzó los 21,1 millones de personas, con un crecimiento mensual de casi 200.000 empleos. En el mes de marzo España ya tuvo un día con más de 21 millones de cotizantes al inicio de la Semana Santa, una tendencia que se consolidó desde principios del mes de abril.

La creación de empleo llegó a todos los sectores, un hito que es poco común, ya que siempre hay alguna actividad que flaquea. En abril todos los sectores aumentaron el número de cotizantes respecto a marzo, lo que indica que la expansión de la actividad está siendo generalizada. Sin embargo, el protagonismo volvió a recaer sobre la hostelería, que creó nada menos que 92.000 empleos a lo largo del mes. Tanto la primavera como el otoño son cada vez más atractivos para los turistas, lo que está recortando la duración de la temporada baja. Esto explica que tres sectores vinculados con el turismo: hostelería, transporte y ocio y cultura, generaran más de la mitad del crecimiento de la ocupación.

Aún así, el resto de actividades también crecieron. La industria manufacturera, que está muy golpeada por la crisis que sufre Europa, incorporó a algo más de 6.000 personas, superando en casi 400 el aumento del mismo mes del año anterior. Los servicios de alto valor añadido (informática, ciencia, ingeniería y actividades profesionales) incorporaron a más de 8.000 cotizantes. También el sector público sigue tirando del empleo, con casi 13.000 nuevos cotizantes, de los cuales, algo más de 5.000 son nuevos sanitarios.

En definitiva, en esta fase del ciclo económico están generando empleo tanto los sectores de alto valor añadido, como los de bajo. Esto está animando a la demanda interna, lo que se refleja en el comercio, que creó algo más de 11.500 puestos de trabajo a lo largo del mes.

Sin embargo, el final de la Semana Santa provocó una cierta desaceleración del empleo, lo que supone la nota negativa para un mes histórico. Si en marzo el empleo aumentó en casi 80.000 personas con datos corregidos de estacionalidad y calendario, en abril el incremento se redujo hasta 41.000 nuevos cotizantes. Se trata del dato más bajo de creación de empleo desde enero. Sin embargo, esta ralentización podría ser consecuencia del hecho atípico de que la Semana Santa se adelantase íntegramente al mes de marzo. Incluso las cifras corregidas de estacionalidad y calendario son imprecisas a la hora de limpiar este efecto de la Semana Santa precisamente por ser muy infrecuente.

El resultado es que el ritmo anual de creación de empleo se ha frenado hasta su tasa más baja desde enero de 2023. En concreto, en el último año el número de afiliados aumentó un 2,36%. Por primera vez en más de un año no se alcanza la cifra de medio millón de empleos creados en 12 meses. El mes de mayo determinará si el mercado laboral empieza a mandar señales de agotamiento o si simplemente ha sido un efecto estadístico producido por el adelanto de la Semana Santa.

La creación de empleo también fue generalizada por todo el territorio nacional. Sólo tres provincias perdieron cotizantes a lo largo del mes: Jaén (por la agricultura) y Huesca y Lleida (por el final de la temporada de esquí). El turismo se desplazó hacia la costa, con especial incidencia en Baleares, que incrementó el número de cotizantes nada menos que un 10,7%, lo que supone 55.000 nuevos trabajadores. Andalucía, Murcia y Cantabria también destacan con un aumento mensual de la ocupación de más del 1%.

En paralelo al crecimiento del empleo se redujo de forma leve el número de desempleados registrados en las oficinas de empleo. En concreto, el número de parados se redujo en 60.500 personas, situando el stock total en 2,66 millones, el menor número de desempleados desde septiembre de 2008, mes en el que quebró Lehman Brothers. En el último año el número de parados se ha reducido en 122.000 personas, el peor dato desde mayo de 2021, mes en el que concluyó el último estado de alarma de la pandemia.

Los datos del paro registrado, como los de la afiliación, muestran esta ralentización del mercado laboral. Aún es pronto para constatar si se trata de un agotamiento del empleo o si es simplemente una distorsión provocada por el efecto calendario.