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Del protegido Rafinha al crucificado Vidal: Luis Enrique sentencia al garbanzo negro
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el segundo, fuera de la convocatoria

Del protegido Rafinha al crucificado Vidal: Luis Enrique sentencia al garbanzo negro

Rafinha firmó un doblete para alborozo del entrenador asturiano, enamorado del juego del brasileño. Con Sergi Roberto lesionado, Aleix Vidal se quedó fuera de la lista. Está más que sentenciado

Foto: Rafinha celebra uno de los dos goles que marcó ante el Deportivo en el Camp Nou (EFE)
Rafinha celebra uno de los dos goles que marcó ante el Deportivo en el Camp Nou (EFE)

Volvió Leo Messi y el juego del Barcelona ganó brillo. Fue en el segundo tiempo, período en el que el Deportivo fue superado con claridad cuando el argentino se puso a jugar. Tras semanas alejado de los campos por culpa de una lesión, el genial jugador reapareció en todo su esplendor. Pero los grandes protagonistas de una plácida tarde en la que el equipo gallego no tuvo opciones de sorprender a los azulgranas, fueron otros. En concreto uno del que está enamorado Luis Enrique y otro al que enterró -eso parece- de manera definitiva. Los focos se centraron, también lo hicieron en un Paco Alcácer negado con el gol, en Rafinha y Aleix Vidal. El protegido y el garbanzo negro del que manda en el vestuario...

Luis Enrique ya dijo que dispone de una plantilla superior, "sobre el papel la mejor que he tenido", subrayó. Y aunque Rafinha aparece en la segunda línea, de sobra es sabido que va a tener protagonismo siempre con su actual técnico. Está enamorado del brasileño, al que se llevó a Vigo en aquella temporada que posteriormente le abrió las puertas del Barcelona. Conoce sobradamente al talentoso efectivo de su etapa trabajando en las categorías inferiores y sabe que tiene virtudes de sobra para brillar en diferentes demarcaciones. No tiene la etiqueta de titular, pero ya suma cuatro goles. Y alguno más que vendrá, pues el estratega le seguirá dando minutos siempre que pueda.

Foto: Rafinha brilló con un doblete (Andreu Dalmau/EFE)

Los números corroboran que Rafinha, sin ser un indiscutible como otros tantos compañeros, está llamado a desempeñar un papel de importancia esta temporada. En estas primeras ocho jornadas de LaLiga Santander ha formado parte del once en cuatro oportunidades. "Siempre viene bien marcar goles y disfrutar de una victoria", dijo el doble goleador del Barça. "En un momento dado se me pasó por la cabeza que podría firmar un 'hat trick' ante el Deportivo", desveló el centrocampista. Luis Enrique puso en valor la gran versatilidad del hijo de Mazinho, fundamental para entender esa predilección que tiene por su pupilo. "Me gusta jugando en el centro del campo y de delantero. Para mí es una gran virtud que pueda jugar en varios sitios, siendo efectivo en todos. Tengo a mi disposición varios futbolistas que tienen esas características. El caso de Rafinha es como el de Arda Turan", subrayó el técnico.

"Esperando que aporte cosas"

Se le vio en la grada, junto a los no convocados, comiendo pipas y rumiando sus penas. Es el polo opuesto al de Rafinha. Sus días en el Barcelona tocan a su fin. Salvo milagro inesperado, en el próximo mercado invernal abandonará el Barcelona. Un triste epílogo que nadie podía esperar hace más de un año, cuando Luis Enrique señaló su nombre como posible refuerzo y la dirigencia soltó unos 18 millones de euros (más variables) por un jugador que entonces brillaba en el Sevilla y ya se había asomado a la Selección que dirigía Del Bosque. "Se entrena a las mil maravillas", dijo hace unos días el entrenador asturiano, que siempre ha preferido no dar excesivas explicaciones sobre las permanentes ausencias de Aleix Vidal de las convocatorias.

Ante el Deportivo firmó su séptimo partido consecutivo sin ser citado por Luis Enrique. El pasado 10 de septiembre se coló en el once titular coincidiendo con la visita del Alavés al Camp Nou. El equipo de Vitoria se llevó los tres puntos (1-2) y ya nunca más se supo de Aleix Vidal. En todas las comparecencias del asturiano ante los medios de comunicación contestó más o menos con las mismas palabras. Tan enquistado está el asunto, más bien cocinado por completo, que este sábado, en la sala de prensa del Camp Nou, ningún periodista le preguntó por el futbolista catalán. No hay mucho más que decir.

Por si le faltaba algo al ex jugador del Sevilla, apareció Robert Fernández en escena para darle el tiro de gracia como jugador del Barcelona. Desde luego, eso pareció. El director deportivo del club azulgrana no se cortó y ante el micrófono de 'Bein Sports' fue contundente a la hora de valorar la situación de Aleix Vidal: "Ya en su momento Luis Enrique dejó muy claro que su situación puede variar en cualquier momento. Este verano pasado salimos al paso cuando empezaron a aparecer algunos rumores. Junto a Sergi Roberto, sigue siendo nuestra apuesta para el lateral derecho. Estamos esperando que aporte cosas. Si miras la lista, ¿a qué jugador no convocas?".

Volvió Leo Messi y el juego del Barcelona ganó brillo. Fue en el segundo tiempo, período en el que el Deportivo fue superado con claridad cuando el argentino se puso a jugar. Tras semanas alejado de los campos por culpa de una lesión, el genial jugador reapareció en todo su esplendor. Pero los grandes protagonistas de una plácida tarde en la que el equipo gallego no tuvo opciones de sorprender a los azulgranas, fueron otros. En concreto uno del que está enamorado Luis Enrique y otro al que enterró -eso parece- de manera definitiva. Los focos se centraron, también lo hicieron en un Paco Alcácer negado con el gol, en Rafinha y Aleix Vidal. El protegido y el garbanzo negro del que manda en el vestuario...

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