Klopp, el candidato que pasa a ser enemigo en el camino hacia la Décima

Primero llama la atención por su manera de ser, para después pasar a ser centro de atención por el fútbol de su equipo. Hablamos de Jürgen Klopp, que ha pasado de ser uno más a ser uno de los elegidos, uno de los que figuran en la lista que Florentino Pérez guarda en esa agenda manuscrita que siempre lleva consigo. Quizás no sea el favorito llegado el caso de tener que encontrar un sustituto para José Mourinho, pero el excéntrico alemán es de los entrenadores que gustan al presidente del Real Madrid y a las personas que tienen influencia en las decisiones del jefe blanco. "Voy a ser el nuevo Mourinho de Guardiola en la Bundesliga", comentó nada más anunciarse la llegada de Pep a la Alemania, detalle que gustó por la zona noble del Bernabéu por su mensaje cargado de ambición.

Los dos partidos jugados por el Borussia Dortmund ante el equipo blanco en la fase de grupos tienen la culpa de esa aparición en los deseos futbolísticos del presidente madridista. Campeón de la Bundesliga, el juego de su equipo responde perfectamente a su carácter. Atrevido al máximo, el equipo amarillo logró arrebatar el cetro alemán al Bayern y lo hizo apostando por el talento de jugadores que destacan individualmente, pero que están 'sometidos' a la perfección a la dictadura del grupo. Y es que el equipo está por encima del destello o del lucimiento de cada jugador. 

Extrovertido al máximo, celebra los goles propios como lamenta los recibidos. No se corta un pelo. Su manera de ser nada tiene que ver con la de Mourinho. Si el portugués celebra y busca la soledad, el alemán es feliz rodeado de aficionados, de gente y también de periodistas. Las puertas de su despacho siempre están abiertas y no es una frase hecha, es una realidad que pueden comprobar el aficionado que acude a un entrenamiento o un periodista que sienta curiosidad por la manera de trabajar de un equipo al que el técnico del Real Madrid, con toda la sabiduría futbolística que encierra, le vaticinó como aspirante al título. Y el Dortmund no ha fallado al entrenador madridista.

Klopp no se corta un pelo dentro del atrevimiento que da a cada acto de su vida, algo que gusta por el Bernabéu. Calado con una gorra, no tiene inconveniente en celebrar los goles al más puro estilo Fernando Vázquez, es decir, corriendo la banda para abrazarse con el que se encuentre por el camino. Es atrevido y no le duele criticar la tristeza de los periodistas de Málaga o ese 'complejo' de superioridad del Bayern y que le lleva a aplastar a todo aquel que se mueve en Alemania. Irónicamente, el pasado viernes se jugó el culo ante la posibilidad que tiene el equipo bávaro de utilizar a Guardiola durante su próximo enfrentamiento con el Barcelona. 

Este licenciado de Ciencias del Deporte de 45 años tiene a bien presumir de vanguardista, ha demostrado en los dos años anteriores ganando la Bundesliga y en esta campaña pisando las semifinales de la Champions que hay técnico en ese muchacho que se inició en el Mainz 05 nada más quitarse las botas, que no se queda en ese nervioso y espontáneo que corre sin rubor celebrando los éxitos de su equipo. 

Klopp forma parte de una lista de técnicos que son del agrado de Florentino Pérez y que maneja en caso de que el portugués confirme su intención de marcharse al término de la temporada, tal y como le confesó esta misma semana en Estambul. Ancelotti, y Vilas Boas son otros de los nombres relacionados con el futuro del Real Madrid.