El ‘Messi brasileño’ da calabazas al Barcelona y firma con el Fluminense

Cassiano Bouzon, el niño de 11 años que es conocido como el 'Messi brasileño', ha dado calabazas al Barça por el Fluminense. Tras viajar en diciembre a Barcelona con su padre pasó un concurrido test para formar parte de las categorías inferiores del club. "Tenía que vivir sólo en España, sin mi familia durante 5 meses", afirma Cassiano, por lo que declinó la oferta. Fue cuando apareció el Fluminense, campeón brasileño de este año. En los próximos días toda su familia -padres y hermana- dejan la ciudad de Salvador para vivir en Río de Janeiro. "Un día jugaré en el Barcelona y en la selección de Brasil", afirma convencido Cassiano. El tiempo lo dirá.

Lo que fue un regalo para celebrar su undécimo cumpleaños ha cambiado la vida del pequeño Cassiano. Con las mejores imágenes de sus actuaciones se editó un vídeo de 6 minutos para mostrarlo en su fiesta. Cassiano sopló las velas de la tarta en su casa de Salvador y a alguien se le ocurrió subir el vídeo a internet. El efecto fue inmediato. "Con rapidez alcanzó las 4.000 visualizaciones. Me fui a dormir y, al día siguiente, al encender el ordenador ya tenía 26.000", recuerda sonriendo su hermana María Cecilía.

El vídeo fue observado por los técnicos del Barcelona que lo invitaron a hacer un test en la Ciudad Condal. Todo pagado. Fue en los primeros días de diciembre. Cassiano acompañado de su padre Francisco Jesús permaneció 20 días en Barcelona. "Allí sorprendió a todos, también por su tamaño y su manejo de la pelota. Lo miraban y no daban crédito por su calidad técnica y su habilidad con la pierna izquierda. Es muy habilidoso", recuerda su padre. Durante su estancia estuvo en el Camp Nou viendo un partido del Barça.

Jugó con la camiseta del Cornellá, equipo con el que colabora el Barça, donde marcó tres goles. "Juego con la pelota pegada a los pies, toco la pelota, se driblar, soy rápido", afirma con desparpajo Cassiano cuando se le compara con Messi. "Hay una diferencia él es blanco y yo soy pretinho", se ríe Cassiano cuya historia podría recordar algo a la del mejor jugador del mundo que con 14 años dejó el Newell's Old Boys de su país para vestir la camiseta del Barça en las categorías inferiores del club catalán.

El Barça tras verlo en directo no lo dudó y le ofreció incorporarse a las categorías inferiores del club. El único problema era que el club no se planteó ayudar a la familia para permanecer en España. Según su padre Francisco Jesús, nadie de la familia le iba a acompañar en la aventura en Europa. La familia declinó la oferta para que Cassiano se formase en el mejor club del mundo.

Y, como no podía ser de otra forma, apareció el Fluminense, club en el que ahora juega el ex barcelonista Deco. Le ofreció casa y asistencia a toda la familia en Río de Janeiro. Se cerró la puerta del club español y se abrió la del equipo carioca, que cuenta con una de las mejores canteras de futbolistas del país brasileño.

“Somos una familia, somos cuatro y vamos a permanecer justos”, asegura la madre de Cassiano que viajará a Río de Janeiro en los próximos días para que su hijo se incorpore a las categorías de base del Flu.