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Hamilton: "Si le quitas el peligro a la Fórmula 1, dejaría de hacerlo..."
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EL BRITÁNICO, A CORAZÓN ABIERTO

Hamilton: "Si le quitas el peligro a la Fórmula 1, dejaría de hacerlo..."

Es una entrevista fascinante. Por su particular visión de la Fórmula 1, por cómo nos recuerda el valor del factor humano, y por la evolución personal

Foto: Hamilton: "Si le quitas el peligro a la Fórmula 1, dejaría de hacerlo..."
Hamilton: "Si le quitas el peligro a la Fórmula 1, dejaría de hacerlo..."

Es una entrevista fascinante. Por su particular visión de la Fórmula 1, por cómo nos recuerda el valor del factor humano, y por la evolución personal que en ella Lewis Hamilton nos confirma. El piloto británico se abría al Daily Mail poniendo en evidencia una mayor profundidad y madurez que va adquiriendo como ser humano, y que también va empapando al piloto. Y, sobre todo, nos cuenta por qué se sube a un monoplaza. ¿Conclusión?: independientemente de la opinión que se pueda tener del británico, no puede negarse que es un piloto de pura raza.

"Piloto en la forma en que imagino que Senna lo haría"

El Lewis Hamilton actual busca sus fuentes de inspiración en Ayrton Senna y en el contexto competitivo de su época. Desde la infancia sentía hacia el brasileño una enorme admiración que se reforzó tras la prueba del Mp4/4 que llevó a cabo en Silverstone hace unos años, “una de las mejores experiencias que nunca tuve, aquello es lo que quería adoptar, Senna, Villeneuve…, quería ser como ellos y ahora piloto en la forma en que imagino que Senna lo haría, es la única forma que sé. Fueron los mejores, lo que hicieron fue lo mejor, y quiero dominarlo también”.

Con 28 años, Hamilton  bebe de las fuentes del pasado para alimentar su espíritu como piloto. En este sentido, afrontar y dominar el riesgo forma parte esencial de su contextura psicológica. “Si ves a Sebastian Vettel ahora, pasa por el astroturf y el piano más de lo que debería, más allá de la línea blanca…. Pero en los días de Senna, si pasaba unos centímetros por encima del piano, había hierba, y hacía un trompo, era penalizado. Él estaba justo en el límite, no por encima del límite, y yo respeto más este estilo de pilotar”.

"No seré más prudente por nada"

La razón por la que me gustan los circuitos urbanos como Mónaco es porque no hay margen para el error y, si lo cometes, lo pagas. No quiero que la gente se haga daño, sino que pierda tiempo o tenga que parar el coche. De eso van las carreras, y por eso admiro tanto a los chicos del pasadoSegún Hamilton, las pistas modernas perdonan, “porque tienen grandes escapatorias. Ellos (en la época de Senna) tenían arena, la tocabas, y se dañaba tu coche o quedabas atrapado. Ahora puedes salir indemne y volver, cuando lo consigues te dices, ¡fantástico!, pero la razón por la que me gustan los circuitos urbanos como Mónaco es porque no hay margen para el error y, si lo cometes, lo pagas. No quiero que la gente se haga daño, sino que pierda tiempo o tenga que parar el coche. De eso van las carreras, y por eso admiro tanto a los chicos del pasado”.

“Me gusta que ahora sea más seguro, pero sus coches estaban hechos en bruto, si tenían palanca de cambio... Ves a Senna en Mónaco haciendo contravolante con una sola mano, era realmente fantástico, tan fantástico…”. En oposición, Hamilton se encuentra ante una Fórmula 1 “tan técnica..., te sientas a hablar sobre un reglaje hidráulico, tengo toneladas de botones, -26 en el volante del Mercedes-, y entenderlos y utilizarlos es una ciencia en sí misma. Así que si pudiera elegir una época, eligiría la de Senna, en 1988, 1989..”.

Para valorar los desafíos de entonces, Hamilton recordaba la “experiencia extracorporal” del pilotaje de Senna en Mónaco, y de cómo le seduce el riesgo que supone manejar un monoplaza. “Escuchas a algunos pilotos que se hacen más prudentes con la edad, quizás tengan hijos y pierdan esa voluntad para llevar el coche al límite, pero no soy el tipo que haga eso, no tendré más prudencia por nada, es la forma en la que estoy hecho, tiene que ser peligroso para mí, si le quitas el peligro a la Fórmula 1, dejaría de hacerlo. Todavía es suficientemente peligroso, cuando hago una vuelta de clasificación al límite”.   

Por ejemplo, habla de la sensación de ir a tope en el antiguo Nurburgring, “un sitio que da miedo, y cuanto más peligrosas son las carreras, más atractivas son, pero no peligrosas porque no quiero que alguien se haga daño… En el Nordschleife no hay escapatorias, así que es como un circuito urbano, y esto es fantástico. Me llevé al límite allí, me encantó, despegué, hay una parte en la que vuelas… como piloto, nunca pienso qué ocurre si falla algo, esto es lo que te da la emoción, estar a punto de hacer un trompo o golpear un muro… La esencia es el peligro”. Pero también matiza cuando explica que “soy prudente, no me hago daño porque no corro riesgos estúpidos, así que no siento que sea un adicto a la adrenalina, de hecho, no creo que sea adicto a nada”.

Los paralelismos de Ron Dennis y su padre

También habla de los muchos cambios producidos en su vida. “Espero que la gente haya modificado su percepción sobre mí desde 2007”, y explica cómo su vida era controlada hasta en los más nimios detalles. “Nada me controla ahora, tengo un jefe que es Ross Brawn, pero tomo mis propias decisiones y no tengo que informar a nadie”. Recuerda aquellos tiempos en los que hacía una llamada de teléfono y “me preocupaba que hubiera hecho algo mal, porque es la forma en la que crecí mirando a mi padre, tenía mucha presión, y ahora no, puedo llamarle y decirle que me he comprado un coche o una casa y lo comparto con él. Es una química diferente. Las cosas son magníficas con él ahora, aunque no llegó de una forma inmediata”. 

En cuanto a su experiencia con McLaren, “es cierto que hay paralelismo entre dejar a Ron Dennis y la redefinición de mi relación con mi padre. Ambos son poderosos, ambiciosos, mi padre es el cabeza de toda la familia, como un 'Padrino' al que todo el mundo lleva sus problemas. Y Ron es algo así en McLaren”. También afirma que “ahora tengo la piel más dura, al principio me afectaba todo, ahora son más consistente porque mi fortaleza mental ha mejorado”.

"La velocidad simplemente increíble de Alonso"

Hamilton también tiene espacio para Fernando Alonso. Y aunque ambos no ocultan el respeto mutuo que se profesan, sus palabras hacia el piloto español adquieren una dimensión especial en el contexto de los sentimientos y sensaciones expresados más arriba. “Es divertido, el piloto que más admiro es Fernando Alonso por su velocidad pura, su velocidad simplemente increíble, creo que nadie pueda igualarle en este deporte”. 

Hamilton reflexiona sobre su enfrentamiento de 2007 con el español en McLaren. “Ahora soy mayor, estoy seguro de que habríamos tenido otra relación diferente. Todavía habría momentos intensos porque ambos hemos madurado mucho. Creo que soy mucho mejor a la hora de manejar la relación entre compañeros de equipo. Y depende de los pilotos”. Y aquí el británico entra en un terreno interesante. “Pon a Sebastian Vettel junto a Fernando Alonso y el equipo tendría problemas inmediatamente, la química….” Y silba como forma de expresarlo. ¿Y en su caso particular? “Creo que podría pilotar con Sebastian, “¡no cambiaría el programa del motor para bajarlo de vueltas!"

Es una entrevista fascinante. Por su particular visión de la Fórmula 1, por cómo nos recuerda el valor del factor humano, y por la evolución personal que en ella Lewis Hamilton nos confirma. El piloto británico se abría al Daily Mail poniendo en evidencia una mayor profundidad y madurez que va adquiriendo como ser humano, y que también va empapando al piloto. Y, sobre todo, nos cuenta por qué se sube a un monoplaza. ¿Conclusión?: independientemente de la opinión que se pueda tener del británico, no puede negarse que es un piloto de pura raza.

Lewis Hamilton