María de Villota sube de nivel: vivirá, trabajará y pensará como un piloto de Fórmula 1

El sueño se cumplió poco más tarde de las 10 de la mañana de este miércoles. María de Villota había firmado un papel por el cual se transformaría en un piloto más, una más en este caso, del Gran Circo. La nueva reserva de Marussia ha peleado durante toda su vida para formar parte de esta familia y -a sus 32 años recién cumplidos- su pilotaje, trabajo y patrocinadores que creen en ella, la han situado en el paddock de la Fórmula 1 a partir de este próximo GP de Australia. Además de viajar a todas las carreras, pilotará el viernes de Abu Dabi y realizará un programa en el simulador de McLaren al igual que sus compañeros Timo Glock y Charles Pic. Su 'caché' ya ha aumentado y lo de ayer fue un paso más para alcanzar su meta: estar presente en la salida de un gran premio.

A las 20:15 horas de este miércoles aterrizó en Barajas una de las personas más felices de este país. María de Villota voló desde Londres para estar con los suyos y comenzar a preparar su aventura con Marussia, una escudería con poco más de dos años de vida y que compite por no quedar última en el presente año.

La decisión vino de manera un tanto inesperada. Después de tener gran parte del camino hecho con Lotus el pasado mes de diciembre –"sólo falta la firma", indicó a El Confidencial- el plan cambió (ahora está en otro box) aunque no el objetivo: llegar a la F1. Las negociaciones las ha llevado su nuevo agente, Mark Blundell que, aunque esta unión se haya hecho oficial hace sólo unos días, trabajaba para María desde finales de enero, un mes y medio aproximadamente.

'Hola' y 'Heliocare' creyeron siempre en De Villota

Gracias a los test que realizó en agosto para Lotus y el apoyo económico de la farmacéutica Heliocare y de Hola, el expiloto Blundell convenció a Marussia para que María fuese la elegida. La escudería rusa ha sido la que más facilidades ha puesto para la incorporación de la primera mujer española que ha pilotado un F1.

María de Villota vivirá una experiencia única al viajar a los 20 grandes premios de este año. Sabrá de primera mano cómo funcionan los entresijos del Gran Circo y adquirirá más preparación por si en un futuro diera un salto mayor. Pocos pilotos españoles pueden decir eso.

El viernes 4 de noviembre será su día. María será una de las encargadas de rodar en Abu Dabi y, hasta entonces, realizará un plan de preparación física como la de sus compañeros que estará 'supervisada' por McLaren gracias a un acuerdo entre ambas escuderías.

Trabajo físico y  simulador de McLaren

Además de este convenio, entre Marussia y los de Woking también existe otro más importante por el cual utilizarán el simulador de las flechas plateadas. De Villota, en este caso, tendrá que cumplir con un programa de simulación. Trabajará, vivirá y pensará como un piloto de Fórmula 1 con la única -pero gran diferencia- de que, hoy por hoy, no competirá. Eso sí, su 'pedigrí' ha aumentado porque no todo el mundo puede presumir de tener en su CV una línea en la que se lea: piloto de F1.

Una vez que el trabajo más complicado en los despachos ha concluido, aún faltaría por cerrar algún tema económico. La guinda en el pastel sería la incorporación de alguna de las firmas patrocinadoras que se han interesado por este proyecto. Con María vestida con la camiseta de Marussia, las dudas se han disipado y las ideas deben estar más claras.

De Villota se convierte en un integrante español más de la Fórmula 1, además de Fernando Alonso, Pedro de la Rosa, Marc Gené, Dani Clos y la escudería HRT.