Rudy y Mirotic enseñan al Madrid el camino del triunfo para afianzar el liderato en la Euroliga

Fabulosa exhibición ofensiva del Real Madrid. El conjunto blanco, en una segunda parte memorable, barrió de la pista al Khimki de Moscú para asegurar una victoria más en la Euroliga, la quinta, afianzar el liderato del grupo A y prácticamente asegurar su pase al 'Top-16' (aún no lo es de forma matemática). Un Rudy Fernández colosal (23 puntos) y un Nikola Mirotic (17) que no le fue a la zaga, se erigieron en protagonistas de una tarde-noche completamente feliz para los seguidores blancos, que incluso tuvieron la oportunidad de ver debutar a su último fichaje, Rafael Hettsheimeier.

Sorprendió Pablo Laso con un quinteto inicial poco habitual, con la inclusión de Draper como base y Sergio Llull en la posición de dos, dejando a Rudy Fernández en el banquillo, quizá reservando al escolta mallorquín por los problemas de espalda que venía arrastrando en los últimos días. La obsesión por defender a Zoran Planinic pudo más en la cabeza del técnico vitoriano en el arranque. Sin embargo, y a pesar de unos primeros instantes de tanteo, el croata marcó la pauta durante el primer cuarto. El Madrid no encontraba la forma de pararlo, mientras el ex de Baskonia campaba a sus anchas. Tras un parcial de 0-6 favorable al conjunto moscovita, Laso pidió un tiempo muerto y dio entrada a Rudy y Jaycee Carroll. El conjunto blanco seguía atascado en ataque, ni Draper primero ni Llull después acertaban con la dirección, mientras que el cuadro dirigido por Rimas Kurtinaitis castigaba el aro merengue desde la línea de tres. Pero fue precisamente desde ahí, más allá del 6,75 donde Carroll cerró el primer cuarto con el primer triple de su equipo para dejar el marcador en una exigua ventaja para los visitantes (21-23).

Con el Palacio ya algo más caliente -la gente llega muy justa del trabajo en estos horarios de Euroliga-Champions- los blancos empezaron a entonarse. En el subconsciente de todos ellos estaba el partido de la primera vuelta, donde el Madrid concedió una ventaja que no pudo remontar. Por eso, de la mano de Rudy, el conjunto merengue comenzó a ser más consistente, sobre todo en defensa. Ocho puntos del escolta internacional, con dos triples, metía el miedo en el cuerpo a un Khimki que seguía subsistiendo a base de triples (un 54% de acierto en la primera mitad). El partido entre los líderes de grupo no podía estar más igualado. Fue entonces cuando Pablo Laso volvió a dar otro respiro a Rudy, pero Felipe Reyes tiró de galones para hacerse cargo de la faceta anotadora y que las espadas se mantuvieran en todo lo alto. Y con el predominio de los ataques sobre las defensas concluía el primer período, ya con ventaja madridista  (46-45).

Rudy-Mirotic, pareja letal

Quizá con la imagen de la última jugada en Moscú grabada a fuego en su memoria, el Madrid volvió de vestuarios con la clara intención de cerrar el partido y no dar opción ninguna a su rival. Especial atención merecen dos jugadores, Rudy y Mirotic, que con sus soberbias actuaciones condujeron al equipo blanco hacia la victoria. El arsenal ofensivo madridista fue de tal calibre en el tercer cuarto que al Khimki no le quedó otra cosa que mirar y aplaudir. El parcial de 33-19 en este período lo dice todo. Los de Laso arrasaban para deleite de los 8.500 espectadores presentes en el Palacio. La fiesta ya había comenzado y los Planinic y compañía no estaban invitados. En la recta final de este tercer cuarto, el técnico madridista daba descanso a Rudy para poner a todo el pabellón en pie. El trabajo parecía certificado, aunque aún restaran 13 minutos para la conclusión.

Las dinámicas de uno y otro conjunto eran dispares. Mientras el Madrid iba claramente de menos a más, los moscovitas habían desconectado del partido, quizá cortocircuitados por su rival. Los quince puntos de diferencia a falta del último capítulo (79-64) se antojaban demasiada diferencia para los de Kurtinaitis. Y así fue. Con el héroe de la noche en el banquillo, Llull asumía el papel de líder, bien secundado por Mirotic y Carroll. El partido se aproximaba a su final con la seguridad por parte de todos de que el Madrid iba a asestar un duro golpe a su rival, afianzando el liderato del grupo y demostrando una vez más que, en casa, es un rival prácticamente invencible. Otra película es cuando sale fuera de casa en competición europea, asignatura pendiente del equipo de Pablo Laso si quiere convertirse en serio candidato a adjudicarse esta Euroliga. Los denominados 'minutos de la basura' en el argot baloncestístico sirvieron para ver cómo debutaba Hettsheimeir y para que el equipo español superaba los 100 puntos.

Ficha técnica:

104 - Real Madrid (21+25+33+25): Draper (4), Suárez (0), Mirotic (17), Llull (14) y Begic (2) -quinteto inicial-, Rudy (23), Rodríguez (3), Slaughter (7), Reyes (10), Carroll (14), Hettsheimeir (2) y Pocius (8).

81 - Khimki Moscú (23+22+19+17): Augustine (4), Koponen (5), Loncar (9), Rivers (5) y Planinic (15) -quinteto inicial-, Fridzon (17), Vyaltsev (2), Monya (19), Khvostov, Zhukanenko (2), Davis (3) y Nielsen.

Árbitros: Guerrino Cerebuch (ITA), Joseph Bissang (FRA) y Anastasios Piloidis (GRE). Paul Davis fue eliminado por cinco personales en el minuto 40.

Incidencias: Partido correspondiente a la séptima jornada de la primera fase de la Euroliga disputado en el Palacio de Deportes de Madrid ante 8.518 espectadores.