Intereconomía amplía capital dos veces en tres meses en plena debacle publicitaria

Intereconomía Corporación, cabecera del grupo editor de La Gaceta, se ha visto obligada a acometer distintos esfuerzos económicos en plena debacle publicitaria del sector. Según la información notificada por la propia compañía en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme), la sociedad ha realizado dos ampliaciones de capital en apenas tres meses para levantar casi dos millones de euros. La auditoría a sus cuentas del año 2010, la última disponible, advertía de que la firma presentaba un fondo de maniobra negativo, un aviso de que podría sufrir problemas de liquidez a la hora de afrontar sus pagos.

El Borme del 9 de diciembre recoge la primera de las ampliaciones de capital, con un resultante suscrito y desembolsado de 975.176 euros. La segunda, del 13 de marzo, contempla un importe adicional de 980.916 euros. Ambas se realizaron con importantes primas de emisión. El empresario Julio Ariza es el principal accionista de la compañía, con un 60% de las acciones. También forma parte del accionariado Javier Tallada, a través de su sociedad Rustraductus, con casi un 16%. Fuentes de la empresa consultadas por El Confidencial no detallaron el objeto de estas operaciones.

La auditoría de las cuentas consolidadas del año 2010, presentadas el pasado mes de septiembre, advierte que al cierre del ejercicio “el grupo presenta un fondo de maniobra negativo”, situación que “es indicativa de que la posibilidad de hacer frente a sus deudas a corto plazo dependerá de la obtención de los recursos financieros necesarios para hacer frente a los mismos en un plazo corto de tiempo”. No obstante, matiza que la sociedad “considera que dispone del apoyo financiero de los socios y de terceros y tiene la certeza de la recuperabilidad de sus cuentas a cobrar y la posibilidad de hacer frente a sus compromisos a corto plazo”, reza el informe elaborado por GAAG Grupo Auditor.

El fondo de maniobra es la diferencia entre el activo y el pasivo corriente. Si es negativo, implica que las exigencias a corto plazo de la empresa no están bien cubiertas y puede acarrear problemas de tesorería. El activo corriente de Intereconomía se situó en 2010 en 24,17 millones de euros, con 16,15 millones en manos de deudores comerciales y cuentas a cobrar. Sin embargo, su pasivo se disparó hasta los 38,59 millones. De ese importe, las deudas a corto plazo alcanzaban los 17,96 millones -15,5 con entidades de crédito- y los acreedores comerciales y otras cuentas a pagar suponían 16,08 millones. La compañía registró un resultado de explotación negativo de 10,66 millones, compensado por créditos fiscales de 7,94 millones. El saldo final aún arroja pérdidas de 2,11 millones.

Desplome de las ventas y la publicidad

Las ampliaciones de capital se producen en un momento especialmente duro para el sector de medios de comunicación y, en especial, para la prensa. Los ingresos por publicidad se han desplomado en la primera parte del año, con caídas de la facturación que las televisiones cifran entre el 15% y el 20%. El escenario es todavía peor para los periódicos, que tienen que afrontar descensos incluso mayores mientras las ventas tampoco responden en pleno cambio del modelo de negocio. Los periódicos se repartieron 1.990 millones de euros en 2007 en concepto de inversión publicitaria. El montante no alcanzó los 1.000 en 2011 y los editores de prensa admiten abiertamente que nunca volverá a los niveles de hace lustro.

La Gaceta no ha sido una excepción a la problemática general. No en vano se ha dejado más de 10.000 ejemplares en el último año. Según los datos publicados por la Oficina de Justificación de la Difusión (OJD), el buque insignia de Intereconomía ha visto cómo los 35.698 ejemplares que vendía en febrero de 2011 se han quedado en 24.559 en el mismo mes del presente ejercicio. Y precisamente son los diarios más pequeños son lo que más sufren el revés publicitario. En lo que respecta a la televisión, Intereconomía apenas alcanzó un share medio del 1,6% en marzo. Pese a todo, la cadena se congratulaba de igualar su máximo histórico.

En este escenario, el grupo de Julio Ariza volvía a la carga hace apenas un mes con el fin de reclutar miembros para su Club de Amigos.  Y recaudar fondos. “La defensa de nuestros valores, que son los de todos ustedes, tiene un coste. No es mucho porque somos muchos. Pero tiene un precio. Ustedes pueden ayudarnos haciéndose socios ahora del Club de Amigos de Intereconomía. Sólo son 14 euros al mes. O pueden ser más, si así lo deciden. Será el dinero mejor invertido en valores de verdad”, reza la información publicada en La Gaceta. Se trata de una cuota destinada a “fortalecer los grupos de comunicación con capital netamente español, para que defiendan de verdad los intereses de los españoles”, zanja la nota.