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Emilio y Raimundo ya no guardan silencio. Pablo ha sido detenido en la corrala: "Ha sido un error"
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CAPÍTULO 40

Emilio y Raimundo ya no guardan silencio. Pablo ha sido detenido en la corrala: "Ha sido un error"

Teresa se muestra ilusionada tras el acercamiento con Miguel. Mientras, Laurita da una segunda oportunidad a Collado, de la que más tarde se arrepentirá. Por su parte, Antonia ha conseguido el dinero para Pilar, pero no es suficiente

Foto: Emilio y Raimundo son interrogados durante el capítulo 40 de 'La Moderna' (RTVE)
Emilio y Raimundo son interrogados durante el capítulo 40 de 'La Moderna' (RTVE)

'La Moderna' sigue impactando con sus tramas en los espectadores de la ficción de sobremesa de La 1 de TVE. La nueva etapa de la serie diaria ambientada en el Madrid de los años 30 atraviesa su momento más álgido. En el capítulo anterior, Emilio ha sido detenido y tendrá que defender su inocencia junto a su hermano Raimundo. El investigador Ocampos les acusa de ser los responsables materiales del crimen de Don Jaime. Por su parte, Laurita acepta el perdón de Collado tras obligarle a reconocer sus errores delante de sus amigos del cine.

Miguel vuelve borracho y hecho una piltrafa a su casa tras la fiesta que se ha pegado junto a Teresa y sus amigas. Trini se levanta disgustada ante una celebración de aniversario totalmente frustrada. El librero asegura que ha sido una encerrona de la que no ha podido escaparse. La dependienta no entiende cómo no ha podido zafarse de aquellas alimañas, especialmente de Teresa que bebe los vientos por su marido. Un nuevo enfado sacude a la joven: ahora Miguel no encuentra el regalo que le iba a entregar durante la velada.

El inspector Ocampos aparece en el hospital para informar a Doña Carla de las últimas novedades sobre la investigación. Los detenidos han sido puestos a disposición judicial y les espera un futuro negro. Los hermanos Peña no podrán librarse de la cárcel. La villana de 'La Moderna' ha cargado el muerto a Raimundo y Emilio y nunca mejor dicho.

La vida de los Garcés puede cambiar para siempre

Doña Carla quiere acudir a un balneario para terminar de recuperarse, pero el policía no puede autorizar ese viaje hasta que siga abierta la investigación. Iñigo tampoco podrá irse a las Vascongadas para solucionar el asunto de Aguirre. El empresario tira una lanza a favor de Emilio y asegura que no tiene madera de asesino: jamás podría matar a nadie a sangre fría.

Teresa quiere ir a recoger la prensa para pasar más tiempo con Miguel y recordar la inolvidable noche que pasaron en el Madrid Cabaret. Trini intenta impedirlo, pero es tarea imposible. Mientras, Antonia ha empeñado sus anillos de compromiso para conseguir el dinero de Pilar, pero no es suficiente. La dependienta siente pena y compasión por la hija de su difunto marido que está en el hospicio.

Pietro, en cambio, pone en duda la honradez de las intenciones de la amante de su marido. Teresa quiere apuntarse a clases de baile y asistir al concurso en el Madrid Cabaret. El librero se muestra arrepentido por la salida nocturna y necesita ordenar sus ideas. Por otro lado, Esperanza le pide una revancha a Pietro. Sin embargo, el italiano se niega a dedicar más tiempo a la repostería. Mientras, Collado y Laurita pasean del brazo por el salón de té.

El actor regala el oído a la dependienta y asegura que es la chica más guapa de España. Los jóvenes acuden al cine. Se desvela la verdadera cara del intérprete y es que Esperanza tenía razón: es un auténtico golfo. Collado se reencuentra con Amelia, su esposa que ha vuelto a la ciudad tras su viaje en Argentina.

Iñigo avisa a Matilde de las novedades del caso: Raimundo y Emilio son los detenidos y culpables del asesinato de Don Jaime. El policía les acusa doblemente por el crimen del empresario y el atraco del cine. Sin embargo, Matilde no encuentra sentido a lo que le cuenta su amigo especial. La dependienta quiere salir antes del trabajo porque necesita ser ella quien le cuente a Luisa lo que ha sucedido.

En la corrala, Rosario vive un duro golpe. La matriarca de los Garcés ha recibido una mala noticia a través de un telegrama: su madre se muere. En el salón de té, Don Fermín recapacita y le entrega a Antonia un préstamo a título personal. El propietario de 'La Moderna' no quiere que la dependienta pase penalidades y también le ayudará a cubrir el gasto de las alianzas que ha empeñado. Emilio es interrogado por la policía que le culpa del asesinato de Don Jaime. El joven asegura que es mentira. Tras la insistencia del inspector, los hermanos Peña terminarán confesando que Pablo estaba con ellos.

Matilde llega a casa tras haber podido escaparse del trabajo. La joven le cuenta a Luisa que Emilio y Raimundo están acusados de asesinar a Don Jaime. Sin embargo, la ilustradora se niega a creer que hayan sido ellos y termina confesando la verdad a su hermana. Además, no es la única mala noticia que ha recibido la familia: la abuela de las Garcés ha sufrido un infarto.

Antonia se muestra emocionada porque tiene el dinero para ayudar a la hija de Ramón. Sin embargo, no ha servido de nada, ya que las gestiones se complican. Pilar Valladares necesita más pesetas para pagar al abogado que promete sacar del hospicio a su descendiente. Por otro lado, la policía se presenta en casa de los Garcés. El inspector Ocampos se lleva detenido a Pablo bajo la mirada afligida de Matilde, Luisa y Clarita.

'La Moderna' sigue impactando con sus tramas en los espectadores de la ficción de sobremesa de La 1 de TVE. La nueva etapa de la serie diaria ambientada en el Madrid de los años 30 atraviesa su momento más álgido. En el capítulo anterior, Emilio ha sido detenido y tendrá que defender su inocencia junto a su hermano Raimundo. El investigador Ocampos les acusa de ser los responsables materiales del crimen de Don Jaime. Por su parte, Laurita acepta el perdón de Collado tras obligarle a reconocer sus errores delante de sus amigos del cine.

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