"¿A que molesta?": la encerrona de Chicote al dueño durante un servicio en 'Pesadilla en la cocina'

Alberto Chicote ha querido poner a prueba la empatía del propietario de Magalia durante su visita con Pesadilla en la cocina. El reto consistía en que tratase bien a sus empleados o de lo contrario tendría que ponerse a hacer las labores de este oficio, en lugar de mandar.

A golpe de bocina, el chef avisó a Manuel de las consecuencias de no tener buenos modales con su personal, como por ejemplo hacer labores en la cocina o ser camarero. Fue entonces cuando le comunicó la encerrona que le tenía preparado el equipo del programa, antes de arrancar el segundo servicio de comidas.

"Es un niñato impertinente que no sabe ni donde tiene el brazo derecho"

"Vas a empezar atendiendo a una mesa, salvo que esta mesa es un tanto especial, porque las personas que van a estar en esta mesa son Junior, May y Mariluz", le ordenó Chicote, mientras iban entrando los antiguos trabajadores que estuvieron en este establecimiento, una de ellas durante la friolera de diez años bajo las órdenes de Manuel.

"Que los tengo que atender yo, pues imagínate, unos extrabajadores míos... Yo les dije que no valían para trabajar aquí", reaccionó el propietario con su ya clásica altanería. Comenzó bien, pero ellos no se lo pusieron fácil: le pidieron la sal a voces y de malas maneras, le reprochaban la tardanza, etcétera.

Dijo que estaba haciendo, "de tripas corazón", porque alguno de ellos era, "un poco impertinente", pero lo cierto es que terminó perdiendo los nervios, ya que ellos lo trataron con las mismas formas que lo hizo él cuando era su jefe. Le pidió que no le hablasen así, que así se le hablaba a las cabras.

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"Te estoy hablando como tú nos hablabas a nosotros, ¿a que molesta?", le dijo a voces su exempleado desde la mesa. "Es un niñato impertinente que no sabe ni donde tiene el brazo derecho, ni sabe sujetar una botella", contestó el dueño fuera de cámaras. A otra de ellas la llamó "verdulera", además de negar todas las acusaciones que vertieron al presentador del formato de La Sexta durante la comida.