¿Por qué Ana Mena ha quedado última en Sanremo? Su propuesta, desgranada

Ana Mena había puesto mucha ilusión en debutar en Sanremo, pero está claro que la ilusión no es lo único que importa en un Festival con el calado y la tradición de este, y solo una aportación brillante podía destacar.

¿La veremos como representante de Italia en Eurovisión? Por mucho que aún falte la votación del público, me temo que no, porque su canción no llega. De todos modos también hay que dejar claro que aunque se ofrece al ganador de Sanremo ser representante de Eurovisión este festival no es una preselección, sino que es una entidad musical en sí mismo y los ganadores o ganadoras pueden renunciar a su participación en el eurofestival.

Volviendo a la participación de Ana Mena, la malagueña se presentó con 'Duocentomile Ore', una apuesta que quedó última en la votación del jurado compuesto por una selección de la prensa, y es que doscientas mil horas son muchas y al final la canción se hacía bastante larga.

Y, ¿por qué tan mal posición en la tabla? En este caso puede que hayan sido varios factores los que han influido en la decisión:

• Adaptación orquestal. Una de las condiciones del Festival di Sanremo es la adaptación de las canciones a una versión con orquesta en directo. Esto hace que las versiones suenen muy diferentes a lo que serán en estudio o al estilo personal de cada artista, el caso es que la adaptación de Ana Mena no aportaba nada en especial.
• Desconocer la canción. Esta es otra de las maravillas de este Festival, las canciones no se conocen previamente, se estrenan en ese escenario y en esa versión, esto la acerca al concepto de Eurovisión donde, a pesar de que se conocen las canciones, las diferencias idiomáticas hacen que tengas que conquistar en tres minutos. Si te enfrentas a una gala de cinco horas de música en la que ninguna canción es conocida, el tema que presentes tiene que conseguir levantar al público de su asiento y tu melodía se tiene que clavar en sus cerebros. 'Duecentomile Ore' no tiene ninguna de estas dos cosas. ¿Por qué se ha alejado tanto Ana del estilo en el que tiene más éxito en favor de una canción ligera?
• Puesta en escena. Ya siento decir que en este punto tampoco ha presentado nada que haya llamado la atención. No ha sabido conmover, enganchar al público… no ha habido movimiento, ni pasión, ni emoción contenida. Lo siento, pero la propuesta era muy floja.

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A todo esto, que son motivos puramente musicales, debemos añadir que esto es un concurso, con lo que la comparación está siempre presente, y aquí palidece. Y es que nos paramos a escuchar a Ana Mena por ser la española en Sanremo y porque desde 2015 ninguna extranjera había pisado ese escenario, pero, ¿habéis escuchado alguna de las demás propuestas?

No hace falta saber italiano para que el 'Brividi' de Mahmood & Blanco que se llevó el primer puesto del jurado te ponga los pelos de punta. Brividi significa escalofrío y, si queréis sentir uno, os recomiendo que les escuchéis. Nada fuera de lo común, música ligera, pero con una interpretación maravillosa a la que se añadía la dificultad de dominar un registro muy agudo en el estribillo. Una puesta en escena muy bonita con la que Mahmood se consolida como uno de los claros favoritos para regresar a Eurovisión, donde ya logró un meritorio segundo puesto en solitario en 2019 con 'Soldi'.

Y claro, por curiosidad también había que escuchar al menos la segunda para poder ver cómo en Sanremo se juntan estilos de lo más variopintos. Rapprasantante di lista llegó con un ritmo superpegadizo, haciendo juegos vocales, divirtiéndose en el escenario y contagiando al público con su 'Ciao ciao'.

Y esto es solo la primera 'serata'… está claro que el jueves Ana Mena podrá defender su canción para que sea evaluada por el jurado demoscópico y sumar a su puntuación actual, pero, sin duda, se antoja bastante complejo que pueda ascender mágicamente en la clasificación. Le seguiremos la pista.