Breve pero tajante: Belén Esteban, ante la última afrenta de la tía de Jesulín en 'Sálvame'

"Esa señora a mí me ha visto una vez o dos en su vida, y a mi hija un día solo". Con estas palabras se anticipaba Belén Esteban a las declaraciones de Laly Bazán, tía de Jesulín de Ubrique, en 'Sálvame'. La hermana de Carmen Bazán había respondido a la llamada del programa, dejando clara su postura ante el último capítulo en la guerra de la colaboradora y el padre de su hija: "¿Qué quiere que también le pague los estudios? Venga ya, que se los pague ella, o sino que se ponga la niña a trabajar que ya tiene 23 o 24 años".

Así de contundente se mostraba Laly, que iba muchísimo más lejos en su afrenta a Belén: "A los demás no nos importa lo que esta señora tenga que decir, que lleva 24 años hablando de lo mismo, pues que siga hablando hasta que se canse o hasta que la echen. Jesulín no ve la tele. Nosotros no entramos en las especulaciones de los buitres que hay ahí", espetaba con contundencia.

Preguntada sobre una posible docuserie de su sobrino, Laly descartaba esa posibilidad: "Jesulín no tiene nada que aclarar". "Es un buen padre y un buen marido, no la necesita a ella para nada. A su hija no le falta su buena mensualidad cada mes, que eso no lo da ni un millonario", sentenciaba Bazán acto seguido, tratando así de zanjar la última controversia entre Belén y Jesulín, a quien esta acusaba de tratar de forma desigual a sus hijas tras pagarle la operación de pechos a Julia Janeiro: "¡A ella le paga las tetas y a mi hija ni los estudios!".

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Tras escuchar la incendiaria llamada telefónica, Esteban prefería morderse la lengua, consciente de que una respuesta no haría más que avivar el enfrentamiento en los platós de televisión, con Laly Bazán sentándose frente a ella: "¿Qué le voy a decir? Porque para que mañana la llamen y vuelva a decir más cosas, paso. Le podría decir muchas cosas, sobre todo a ella. Todos sabemos de qué va esta señora, que yo no sé de qué vive ni me importa".

Ante las preguntas de sus compañeros, Belén iba calentándose poco a poco, por lo que al final acababa dedicándole un mensaje tajante: "Los padres y las madres, repito la palabra madres en grande para que quede bien clara, están para ocuparse de sus hijos, pequeños, adolescentes y mayores. No te voy a contestar más. Ella dice que yo hablo de mi vida, ¿pero ella de qué vida está hablando, de la suya o de la mía? Yo siempre digo que qué dedo me voy a cortar que no me duela, pero creo que otros sí se cortarían alguno", concluyó desafiante mirando fijamente a cámara.