Marina ('Tentaciones') se prepara, ¿para la infidelidad?: "Quiero estar con un hombre"

No ha visto aún imágenes de su novio en la hoguera ni tampoco Jesús había visto nada de ella, pero Marina ya ha empezado a sentenciar el futuro de su relación en 'La isla de las tentaciones'. La andaluza se siente cada vez más atraída por Isaac y al compararlo con su novio admite que sale perdiendo.

Como si de un ejercicio para preparar su mente se tratase, Marina ya está empezando a justificar su estrechísimo trato con el 'lobo' de los solteros de la villa. Sandra Barneda visitaba a las chicas para anunciarles que esa noche tenían su primera hoguera y la joven no dudó en reconocer lo que empieza a dejar sentir por su novio.

"Con Jesús me siento muchas veces como una madre"

"No me preocupa ver su hoguera, me preocupa que él vea la mía", confesaba Lola en referencia a su reconocido 'feeling' con el tentador Simone. Una frase con la que también Marina se ha sentido identificada, ya que da a entender que Jesús se podría enfrentar a ver escenas de ella que lo podrían destrozar.

Y amplía: "Yo creí llegar bien en mi relación y me estoy dando cuenta de que no". La sevillana va a más y analizar los motivos que le hacen poner a su chico en una balanza junto a Isaac, y por supuesto, Jesús sale perdiendo: "Me estoy dando cuenta aquí que no tengo nada que ver con él, que somos personas totalmente diferentes y no me da lo que realmente yo necesito".

La cristalina dureza con la que se ha atrevido a definir Marina lo que realmente necesita de un chico, y que su novio no le da, tras cinco años de relación, ha impactado: "Yo quiero estar con un hombre. Un hombre que se divierta, que baile, que se relacione… y con Jesús me siento muchas veces como una madre".

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Claro que no es la primera vez que la joven verbaliza este sentimiento de rechazo hacia su novio. Marina ha llegado a comentar con el resto de sus compañeras como durante todos estos años con Jesús ha perdido "la chispa" debido a que, no se siente protegida por él, que siempre está pendiente de ella, que no la deja respirar ni darle tiempo para echarlo de menos o que, como ha repetido en varias ocasiones, "se siente como la madre" de la relación.