Por qué 'muebles' como Darek deterioran 'GH VIP 6'

Esta nueva edición de 'GH VIP' está demostrando que el género de la telerrealidad no está desfasado. Superado el drama de no contar con personas anónimas, algo lógico ya que no interesan tanto como los populares, los nuevos VIPS están haciendo las delicias de un público que demanda mucho movimiento, acciones inesperadas y personalidades a las que odiar o amar de forma pasional.

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Miriam Saavedra, Mónica Hoyos, Ángel Garó o Suso Álvarez, al margen de sus actitudes en Guadalix de la Sierra, mantienen viva la casa, generando el interés de la audiencia que cada día es más exigente. Sin embargo, hay otros personajes que hacen todo contrario. Los denominados coloquialmente como 'muebles', todo un clásico de 'Gran Hermano', deterioran notablemente su funcionamiento.

Si hablamos de concursantes que no aportan absolutamente nada al reality show nos vienen rápidamente a la cabeza Darek o Tony Spina. Tener un carácter más tranquilo, ser prudente y no tener conflictos no está reñido con ser buen concursante. Pero cuando lo único que haces en tu día a día es comer, asearte y dormir, estás siendo todo un estorbo (en el caso de los citados, únicamente muestran su cuerpo).

Si todos fueran como Darek o Tony no habría entretenimiento. Es por ello que la más que probable expulsión del exnovio de Obregón está tan justificada

Ir a un programa así no deja de ser un trabajo, un sitio en el que se paga un importante caché porque se espera algo concreto, una realidad alternativa en la que mostrar tu mejor o peor cara es uno de los principales atractivos. Por eso, cuando te quedas al margen de todo, no generas contenido, ves la vida pasar pensando únicamente en cómo esta creciendo tu cuenta corriente, no solo estás quitando ese puesto a personas que sí podrían hacerlo bien, estás yendo contra la naturaleza de la empresa que ha confiado en ti.

Por si aún existen dudas, el objetivo de shows como 'GH VIP' o 'Supervivientes' es entretener. Sacar de la rutina a la gente que decide verlo con un toque importante de polémica, clara declaración de intenciones que Mediaset España fomenta desde hace años.

El principal fallo es contar con ellos, pero es cierto que hasta que no se observa al sujeto dentro de este concreto contexto no se puede saber cómo actuará. Pero indagando un poco en su personalidad sí que se puede intuir. Por lo tanto, punto negativo al programa por contratar celebritys aburridas y sosas, a la hora de dar el sí definitivo debería haber unos mínimos para que no sean un bluf.

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Y en segundo lugar, mal por los que pretenden pasar desapercibidos, dejar el peso a otros y llevárselo calentito sin dar un palo al agua. Saben dónde van, dónde se están moviendo, qué es la telerrealidad... Tienen una responsabilidad.

Por suerte el público de este tipo de programas ha evolucionado al condenar a los insulsos y premiar a los guerreros, porque si todos los concursantes fueran como Darek o Tony no habría entretenimiento por ninguna parte. Es por ello que la más que probable expulsión del exnovio de Ana Obregón está tan justificada. Los 'muebles' deben dejar paso a los verdaderos protagonistas, aquellos que hacen su trabajo de forma brillante y generan algo en sus espectadores.