Crear una sala de cine en casa es posible: solo tienes que colocar los altavoces de esta forma

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Si eres de esas personas que no encuentran mejor manera de invertir un viernes o un sábado por la noche que en ver una película, seguro que has realizado una fuerte inversión en un televisor de 50, 65 o, incluso, 80 pulgadas. Es más, estamos convencidos de que también has querido recrear la experiencia de un cine en casa comprando un conjunto de altavoces que te brinden la mejor calidad de sonido.

Sin embargo, para convertir el salón en una auténtica sala de cine es necesario colocar estos altavoces en una posición adecuada respecto al televisor y al sofá. De lo contrario, será imposible que el sonido llegue a tus oídos de forma adecuada. Eso sí, todo va a depender en buena medida del número de estéreos que vayas a utilizar.

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La regla para los dos altavoces estéreo es muy sencilla. La clave está en colocarlos a los lados del televisor, de modo que la distancia entre ellos sea la misma que hay entre el centro del sofá y la pantalla. Esto es lo que se conoce como “triángulo estéreo”, en cuyo vértice se produce el sweet spot o “punto dulce”.

Hacia un cine en casa completo

Llega el momento de colocar el subwoofer, es decir, el elemento responsable de los graves dentro de tu cine en casa. El lugar ideal para su ubicación es el centro de la sala y justo debajo del televisor, ya que esto favorecerá la propagación de este tipo de sonidos. Con esto ya tendrías un conjunto de audio 2.1, aunque puedes ir mucho más allá.

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En concreto, hacia un sistema 5.1. Para ello, es necesario colocar dos altavoces dipolos a los lados del sofá. Lo aconsejable es colgarlos de las paredes a entre 40 y 120 centímetros de altura. En caso de que no te resulte posible, solo tendrás que inclinarlos hacia arriba o hacia abajo, enfocándolos hacia tu posición al ver una película. También deberás poner un altavoz central junto al subwoofer, el cual tendrá la función de reproducir los diálogos.

Por su parte, para alcanzar una experiencia de sonido 7.1 es necesario que, además, añadas otros dos altavoces justo detrás del sofá. Entre ellos ha de haber, al menos, una separación de un metro. En caso de que el sofá esté pegado a la pared o haya menos de un metro de separación, es recomendable usar altavoces dipolo. Si puedes alcanzar esa distancia, resulta más aconsejable apostar por altavoces de proyección directa.

Siguiendo estas recomendaciones, podrás convertir tu salón en una sala de cine y disfrutar de tus películas y series preferidas con sonido envolvente. Además, no es obligatorio que compres todos los altavoces de una sola vez, sino que también tienes la posibilidad de empezar con un sistema 2.0 y, posteriormente, ir añadiendo elementos hasta alcanzar un 7.1.