El coche autónomo de Google ha tenido otro accidente (y echa la culpa a los humanos)

En los últimos meses se ha convertido en la imagen más potente de los defensores de los vehículos autónomos. Waymo, la empresa de Google dedicada al desarrollo de coches sin conductor, no ha hecho más que crecer y asegura que llegará a contar con 80.000 de estos automóviles próximamente. Eso sí, su ascenso no le libra de las polémicas. Y es que la compañía se ha visto obligada a confesar un nuevo accidente con uno de sus vehículos en el que, según ellos, la culpa la tuvieron los humanos.

En un comunicado, publicado por la propia marca en su blog en Medium, explican lo sucedido y dejan claro que, para ellos, el culpable de lo sucedido es el factor humano, nada de su tecnología. "Nuestra revisión del incidente confirmó que nuestra tecnología habría evitado la colisión tomando un curso de acción más seguro", comentan en el texto. ¿Quién tuvo entonces la culpa? Pues el conductor de prueba que llevan todos estos coches para controlar todo lo que ocurre y evitar, justamente, estos accidentes.

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"Mientras conducíamos por Mountain View (California), nuestro conductor tomó el control del vehículo al ver que un automóvil que se encontraba a la izquierda se movía bruscamente hacia nuestro carril. El conductor respondió moviendo rápidamente el vehículo hacia el carril derecho. Desafortunadamente, no vio que un motociclista nos iba a adelantar por ese carril. Como resultado, el parachoques trasero derecho de nuestro vehículo entró en contacto con la motocicleta", argumentan desde Waymo.

Lo que llama más la atención es que, según la compañía, la decisión del conductor fue mucho peor que la que habría tomado el sistema de forma autónoma. "Mientras que nuestro conductor de prueba se enfocaba en el auto que tenía delante, nuestro sistema de auto-conducción estaba siguiendo simultáneamente la posición, la dirección y la velocidad de cada objeto que lo rodeaba".

Este choque es solo una muesca más en el historial de la compañía ya que en su tiempo por las carreteras de Estados Unidos ha estado involucrado en al menos cinco accidentes. Eso sí, solo en uno de ellos se ha demostrado la culpabilidad del coche de Google. Fue en 2016 y ahí sí tuvo la culpa el sistema que conduce el coche, o eso dijeron.