Este el OnePlus 5T: la alternativa al iPhone X que no cuesta un dineral

Turrón destacado en los líneales del supermercado. Luces en los calles. Convocatorias a cenas y comidas. Más luces. Más turrón. Black Friday. Alguna quedada de más por eso de las fechas especiales. Números de lotería yendo y viniendo. A estas alturas del año tenemos ya la campaña navideña en plan efervescente. La lógica diría que en el cada vez más previsible mundial de constructores móviles habría que colgar ya el cartel anunciando que no queda más pescado que dispendar. Nada más lejos de la realidad. Aquí está el OnePlus 5T. A su ritmo. Con sus tiempos. Casi sin mirar el calendario.

OnePlus nació con la vocación de ser el Android más sexy del año. Desde el principio de los tiempos. Desde su origen, se la jugó con la erótica del precio. Lo sigue haciendo. Carnaza pura ahora en los tiempos del 'mileurismo' decretado por el iPhone X, el Note 8 o el Pixel 2XL. El coste de salida para hacerse con este móvil de primera línea será de 499 euros.

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G.C.

Más recientemente jugó la baza de capturar algo de la esencia de Apple en sus terminales. Sólo hay que comparar la trasera o los laterales del One Plus 5 con la del iPhone 7 Plus. El parecido es innegable. Es una imitación, sí. Pero hay maneras y maneras de hacerlo. Sin hacer apología de las copias, hay que reconocer que en este caso está bien hecha.

Con el OnePlus 5T se repite este movimiento. No tiene sentido un cambio radical de diseño cuando, cómo la letra 'T' indica, se trata de una evolución del anterior modelo, no de un salto de generación. La formulación, sin embargo, no es idéntica a la del móvil de primera mitad de año. Toca pagar el peaje de subirse al carro del 'todo pantalla' y mandar el lector de huellas a la parte trasera. El resto sigue igual. Se nota al cogerlo. Mismo tacto, mismo agarre, mismas curvas.

Face ID y 'todo pantalla': lo nuevo

Reconocimiento facial. O 'Face ID' como se ha popularizado gracias al iPhone X. La configuración es relativamente sencilla y el primer contacto ha resultado bastante sorprendente. En un primer momento he pensando que incluso no estaba activado. Instantáneo. En la comparativa rápida que hemos con el iPhone X, aqui hay un ganador claro: el OnePlus 5T. Otra cosa es la complejidad del sistema -Apple utiliza el sensor de profundidad- y la tasa de 'falsos'positivos.

Ha reaccionado muy bien con y sin gafas. Sólo ha sufrido un poco con las gafas de sol, momento en el que he tenido que acercarme un poco más el teléfono a la cara.

No hay 'notch' en la parte frontal. Eso sería un calco descarado, que sonrojaría a cualquiera. Han apurado tanto los márgenes, especialmente los laterales, que su pantalla de 6,01 pulgadas de diagonales se siente más pequeña en la mano que otros terminales de esas medidas. Se trata de un panel AMOLED con resolución de 1080 por 2160 píxeles, que da un reparto de 401 píxeles por pulgada.La primera impresión es que da la necesario, tanto en brillo como en calidad se ve más que suficiente.

Snapdragon 835 y 6 u 8 GB de RAM. Un motor más que solvente. De primera línea

El motor es uno de los aspectos más cuidados de este terminal. No hay que olvidar que vienen vendiendo eso de 'prestaciones de primera línea a precios populares'. Como no pueden montar sus propios chips como hacen Huawei o Samsung, se lanzan a lo mejor que hay en el mercado. El Snapdragon 835 de Qualcomm. Llega jalonado con seis y ocho 'gigas' de RAM, pero no están dedicado al mismo fin. Dos de ellos en ambos casos dan soporte a la cámara.

Una cámara muy buena que podría ser mejor

La cámara trasera parece que nos volverá a situar en la eterna contradicción en la que nos instaló su predecesor. Ahora la han remozado para ofrecer una doble cámara con dos sensores de 16 y 20 megapíxeles con una distancia focal -en ambos casos- de 27,22 mm y apertura de f/1.7(una configuración con la que pretenden mejorar en imágenes escasas de luz). Una ecuación cuánto menos peculiar. Dos sensores RGB sin 'tele' ni 'gran angular' o distinta distancia focal. El vídeo soporta grabación en 4K hasta 30 fps. La frontal, por su parte, es de 16 megapíxeles.

Se sigue echando en falta el estabilizador para la cámara, que es muy buena, pero podría ser mejor

La carta de servicios se mantiene: 'modo pro' -estrenado en el OnePlus 5-, 'modo retrato' y 'modo zoom' (que permite hacer dos aumentos con una solución de software sin pérdida de calidad). Se sigue echando en falta, sobre el papel, el estabilizador de imagen, algo que se notará en situaciones de poca luz o disparos rápidos. Sin embargo, aspira a mejorar el buen resultado que ofrecía el anterior modelo. Lo comprobaremos en la 'review' que publicaremos en los próximos días.

Batería y software, punto fuerte

La batería. Parece uno de sus puntos fuertes. No sólo por los 3.300 mAh sino por la gestión de la energía visto su historial. Además ahora se refuerza con su sistema de carga rápida. Media hora utilizando su carga rápida daba al OnePlus 5 casi el 60% de la autonomía, más que suficiente sobre el papel para aguantar gran parte del día, así que esperable que en este apartado se mantengan las prestaciones.

¡CUIDADO GOOGLE! Hay alguien que maneja Android casi tan bien como tú. La verdad que OnePlus está casi a la altura del buscador. El sistema operativo, a pesar de contar con una capa de personalización, se siente fluido, sin tirones y sin problemas superficiales. Llegará construido sobre Android Nougat y con funciones como 'apps paralelas', para iniciar sesiones en dos cuentas al mismo tiempo; 'galería en mapa' o 'modo lectura'.

OnePlus es, a excepción de Google, el que mejor ha sabido integrar Android en sus móviles

Sin embargo, es de esperar que próximamente se de una actualización de software para este teléfono (que se pone a la venta el día 21) y otros modelos anteriores después de la polémica de los agujeros provocados por aplicaciones destinadas a desarrolladores que no fueron eliminadas en las versiones comerciales.

Atractivo pero difícil de conseguir

OnePlus es la punta de lanza de un silencioso conglomerado llamado BBK. Al menos en Europa y EE UU donde sus terminales generan gran expectación. Silenciosamente, sin hacer mucho ruido, se ha convertido en el tercer fabricante del móvil sólo por detrás de Samsung y Huawei, basándose en esta marca, Viboo y Oppo, muy conocidas en el gigante asiático.

Probablemente junto a Xiaomi, OnePlus sea el mejor de los abanderados en la guerra para tumbar el denostado sello 'Made in China'. Sin embargo, mientras esta marca ha conseguido situarse como un referente de alta gama, algo que no termina de conseguir Xiaomi, debido a que toca muchos palos y centra gran parte de su estrategia en móviles más básicos y asequibles.

Xiaomi y OnePlus son los grandes abanderados de la generación de marcas que reinventó el denostado sello 'Made in China'

Su relación calidad-precio lo hace, sin lugar a dudas, lo mejor del mercado móvil. Pero conseguirlo no es fácil. No está en ninguna tienda. Ni operador. Sólo vende por internet. Principalmente por su página web, aunque es posible encontrarlo en otras plataformas. Controlan mucho el 'stock'. Eso es parte de su éxito. Si lo exhuberante se vuelve mayoritario, simplemente se vuelve corriente. Por eso hace que en unas pocas semanas el plazo de espera vaya aumentando progresivamente y no sea fácil hacerse con uno de elllos sin tener que esperar. El 21 empieza la venta. Versión de 64 GB: 499 euros. Ampliables por microSD. La versión de 128 GB y 8 GB de RAM, 559. Es una alternativa a cualquier móvil de gama alta. Incluso al iPhone X o al Note 8. Y no cuesta un dineral.