'Tonto el último' en los hospitales españoles: el coronavirus multiplica el robo de mascarillas
Centros hospitalarios de Málaga, Alicante y Madrid han abierto investigaciones ante la desaparición de material clínico pensado para enfrentarse a enfermedades infecciosas
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Ni siquiera las tranquilizadoras palabras de Lorenzo Milá han conseguido evitar que cunda el pánico ante el coronavirus en España, donde apenas se mantienen infectadas 14 personas pero cada vez se suceden episodios más estrambóticos. Al desabastecimiento que empiezan a notar tiendas y farmacias, e incluso la burbuja de productos sanitarios de segunda mano en las plataformas de venta especializadas, se suman acciones más preocupantes: los robos de material en los centros de salud.
[Última hora del coronavirus Covid-19]
Así por ejemplo, el Hospital Clínico Universitario Virgen de la Victoria de Málaga ha abierto este miércoles un expediente para investigar a un médico por la desaparición de cajas de mascarillas de alta filtración. Varios testigos que trabajan en el centro aseguran haber visto al trabajador portando numerosas unidades de este material, algo que estudian ahora los servicios jurídicos, que elevarán los resultados de su informe a la Dirección General del Servicio Andaluz de Salud (SAS).
El Hospital de Villajoyosa (Alicante) también ha detectado la desaparición de mascarillas y solución hidroalcohólica, hecho que ha denunciado ante la Guardia Civil y ha explicado mediante una circular de carácter interno dirigida a los trabajadores del departamento. El documento advierte de la gravedad de lo que se considera "una grave infracción que puede poner en riesgo la seguridad en la atención sanitaria".
La gerencia del departamento ha adoptado una serie de medidas, entre las que se incluyen el establecimiento de controles adecuados de vigilancia y acceso al material sanitario, explica la Consejería de Sanidad en un comunicado que en ningún momento relaciona el hecho con la epidemia de coronavirus. "El 'stock de este producto en estos momentos es el adecuado en los centros, por lo que no se puede hablar de desabastecimiento", garantiza.
De acuerdo con 'Las Provincias', no es el único caso en la Comunidad Valenciana. En hospitales como el Clínico o La Fe de Valencia, también se ha registrado la desaparición de mascarillas de tipo FFP2, efectivas para el contacto con personas que sufren enfermedades contagiosas.
El último caso conocido se ha vivido en el Hospital Infanta Leonor de Madrid, donde se han establecido medidas para "reforzar el control de las mascarillas del centro y contribuir a una mejor utilización", al constatar que faltan unidades en el centro. Según informa el diario 'El Mundo', se han sustraído cientos de mascarillas desechables que médicos, ATS y auxiliares de enfermería utilizan en su día a día. Todo apunta a que los culpables estarían entre el propio personal porque el material se guarda en habitaciones cerradas con llave a las que los pacientes no tienen acceso.
El hospital ha subrayado que el acceso a estas mascarillas está restringido a usos "estrictamente necesarios definidos en los protocolos de actuación sanitaria", si bien ha matizado que, en cualquier caso, la asistencia "no se ha visto afectada y se sigue prestando con todas las garantías". En esta línea, ha recalcado que dispone del material necesario y que está preparado para cualquier actuación específica que determinen las autoridades sanitarias".
La demanda de mascarillas sube un 8.000%
La demanda de mascarillas ha aumentado un 8.000% en las farmacias españolas, donde este producto está agotado, según el presidente de la Federación de Distribuidores Farmacéuticos (Fedifar), Eladio González Miñor. "En estos momentos se demandan 80.000 unidades diarias a través de las farmacias", advierte el experto, que ha hecho un llamamiento a la tranquilidad porque "la alarma es infundada y las mascarillas no son necesarias".
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En apenas un mes, también "se han solicitado todos los geles que normalmente se piden en un año entero, pero en este caso pronto se podrán adquirir en las farmacias" porque a diferencia de las mascarillas, este producto suele ser de fabricación nacional. Aunque los precios no se han disparado en las farmacias, sí lo han hecho en Internet, terreno pantanoso para comprobar quién es el fabricante o verificar si las características sanitarias son fiables.
Ni siquiera las tranquilizadoras palabras de Lorenzo Milá han conseguido evitar que cunda el pánico ante el coronavirus en España, donde apenas se mantienen infectadas 14 personas pero cada vez se suceden episodios más estrambóticos. Al desabastecimiento que empiezan a notar tiendas y farmacias, e incluso la burbuja de productos sanitarios de segunda mano en las plataformas de venta especializadas, se suman acciones más preocupantes: los robos de material en los centros de salud.