'Superhéroes de barrio' que luchan contra la exclusión social y la pobreza

Si pensamos en superhéroes, lo primero que nos viene a la cabeza son esos personajes de DC Comics y Marvel con poderes extraordinarios. Sin embargo, estos no solo viven en los cómics y las superproducciones de Hollywood; también caminan por la calle, pasando totalmente desapercibidos. Ninguno de ellos lleva capa, así que seguramente no los reconocerás a simple vista. Quizá sea esa persona que viaja todas las mañanas en tu mismo vagón, o aquella que espera en el andén de enfrente cuando sales de trabajar. Son los 'Superhéroes de Barrio'. Aquellos a los que Kiko Veneno cantaba eso de “hierven ya las calles, listo el escenario y en los sótanos se entrenan…”.

Y hoy más que nunca, los necesitamos. “Sobre la ciudad, da un salto muy grande. No dejes que el coste de la vida te agarre”. Este coste supone un 26,1% de la población española en riesgo de pobreza y exclusión social, según el indicador AROPE. Más de 12 millones de personas, en su mayoría niños, personas mayores, con discapacidad y enfermedades raras. Casi un millón y medio de niños y jóvenes se encuentran situación de pobreza extrema; el 30% de las personas con discapacidad están en riesgo de exclusión social y un 16% de ellas en exclusión severa, de acuerdo con el VIII informe Foessa elaborado por Cáritas; más de dos millones de nuestros mayores viven solos, según datos del INE; y más de tres millones de personas padecen una enfermedad rara, cuyo diagnóstico tarda una media de cinco años y que para la mayor parte no existe cura.

No obstante, dichos colectivos cuentan con la ayuda de las pequeñas asociaciones que se convierten en los 'Superhéroes de Barrio' a los que cantaba el de Figueras en los 90. Estas conforman el 76% de todo el Tercer Sector Social español y con sus recursos, muchas veces escasos, ayudan a sostener el tejido social de nuestro país. Los años más duros de la crisis económica estuvieron marcados por una disminución drástica de sus recursos económicos. Según el último informe elaborado por PwC, la financiación cayó anualmente un 15,8%. Y aunque de 2013 a 2016 tuvo un repunte del 8,9%, volvió a caer en 2017 un 5%. Además, las asociaciones se encuentra con otro problema: el 60% de su financiación proviene de organismos públicos, que han recortado sus ayudas en áreas sociales como dependencia, sanidad o educación.

Altavoz de las asociaciones

Fundación Mapfre, siendo consciente de esta problemática, ha lanzado la campaña ‘Superhéroes de Barrio. La ayuda de cerca’. Su propósito es apoyar a pequeñas organizaciones, que lideran iniciativas cuya vocación es mejorar la vida de esos colectivos en riesgo de exclusión y pobreza. Ya sea aquellos que luchan para paliar la pobreza infantil, tratando de evitar el abandono escolar como la Asociación Altamar o la Fundación Horizontes Abiertos; los que acompañan a nuestros mayores para erradicar la problemática de la soledad como la Fundación Grandes Amigos, y dan esperanza a los que menos tienen como la Asociación Pato Amarillo. Y otras, como la Fundación Nido, Fundación Lukas o la Fundación Ana Carolina Díez Mahou, están enfocadas en adultos y niños con discapacidad y enfermedades neuromusculares. Recientemente se han unido cinco organizaciones más: AMAI TLP, Asociación Tamtaca, Bona Voluntat en Acció, ACTAYS y Mi Princesa RETT.

La campaña ‘Superhéroes de Barrio’ es una iniciativa del programa #SéSolidario, que Fundación Mapfre creó hace un par de años. Con este proyecto pretende conseguir, por un lado, la especialización de estas entidades, y por otro, ser su altavoz: no solo en facilitar al beneficiario una entidad de referencia para recibir su ayuda, sino que también permite a las organizaciones darse a conocer en otros ámbitos como el empresarial. Desde entonces, ha colaborado con más de 400 pequeñas entidades sociales, superando los 115.000 beneficiarios directos y habiendo impactado en 2.910.926 de personas.