Cieza, la historia del pueblo que se levantó en defensa de su funcionaria

Ana Melgarejo no es una funcionaria cualquiera. Ella trabaja en el Instituto Nacional de la Seguridad Social de Cieza (Murcia), atendiendo y asesorando a sus ciudadanos y a los de los municipios aledaños en materia de prestaciones sociales. Su eficiencia y entrega le han hecho merecedora del cariño de los vecinos por un trabajo que le encanta. Sin embargo, Melgarejo se va. Tiene problemas laborales y se va. Algunos vecinos identifican estos problemas con presiones que recibe de la oficina en la que actualmente trabaja. A finales de mes tiene previsto trasladarse a la Tesorería de la Seguridad Social. Es por ello por lo que Cieza está triste y se ha levantado en armas en apoyo de una funcionaria que hace “muy bien” su trabajo.

Ella no quiere hablar con los medios de comunicación. Según un vecino de esta localidad, “lo está pasando mal por el eco que ha tenido su caso”. Melgarejo ha preferido no denunciar esa tensión laboral y dejar un trabajo que le gusta y desde el que podía ayudar a sus vecinos.

Ahora esos vecinos le devuelven el favor: han constituido de manera espontánea una asociación en apoyo de Ana. En total, un grupo de entre 12 y 16 personas, que se reúnen eventualmente para tratar de solucionar la difícil situación por la que está pasando la funcionaria. No tienen el apoyo de los partidos políticos. “No hemos recibido apoyo, ni lo hemos pedido ni tampoco lo queremos”, afirman y añaden “de hecho, no hemos creado ni plataforma”.

Desde la asociación sólo tienen un objetivo: defender una excelente atención a la ciudadanía y denunciar la “insoportable” situación sufrida por Ana, debido a las condiciones laborales. “Unas condiciones que no se corresponden con las de hace seis o siete años”, afirman.

“Ella se entrega totalmente con una capacidad incalculable y con una predisposición total y absoluta”, confiesa a este diario un vecino. Este mismo ciudadano declara que los ciudadanos acudían a ella porque es una persona que “solucionaba mejor los problemas que otros funcionarios”. “Eso había creado una situación de tensión, ya no con el resto de funcionarios, sino incluso con el propio jefe de la oficina”, dice el vecino. Una tensión de la que algunas veces fueron testigos los propios ciudadanos: “el jefe se ponía al lado de su mesa mientras atendía a la gente o decía que pasara a su despacho…”. Según fuentes del colectivo ciudadano, “quien se tiene que ir es el director”.

Traslado por prescripción médica

Tal ambiente le provocó alguna que otra crisis y por ello los propios médicos “le aconsejaron que dejase su trabajo por su estado de salud”, afirman desde la asociación. Desde la delegación local del Instituto de la Seguridad Social del municipio murciano no quieren hacer declaraciones. El propio jefe de la oficina señala a El Confidencial que “quien debe hablar es ella”.

Por su parte, en la Tesorería de la Seguridad Social de Cieza confiesan a este diario que no conocen el caso, sólo que esta funcionaria se incorporará el mes que viene. El colectivo de vecinos ya ha llevado a cabo dos concentraciones durante marzo y esperan seguir así, hasta que se les oiga.

En la última convocatoria –el pasado martes-, unas 200 personas se concentraron a las puertas de la oficina de la Seguridad Social, en la calle de San Sebastián de Cieza para mostrar su apoyo y agradecimiento a esta murciana. Durante el acto, los manifestantes portaron pancartas con frases en defensa de la funcionaria y en contra del resto de personal de la oficina, incluso de su director: “Por hacerle la vida imposible”.

“Ana es muy querida en el pueblo y el hecho de que se vaya de su trabajo a finales de mes ha hecho que los ciudadanos se movilicen”. Un movimiento que ha surgido ante “el berrinche, la pesadumbre, el coraje de la gente al enterarse que el traslado de Ana iba a ser a muy corto plazo”.

“Es el cariño tan grande que se le tiene a Ana, su trabajo es encomiable como funcionaria. Ana ha ayudado a conseguir a mucha gente jubilaciones, prestaciones que, por otro lado, se lo daban por perdidas por otras personas”.

Su vida sigue en el pueblo

Desde el Ayuntamiento del municipio se informa que ya son cerca de 8.500 personas de diversos puntos de España y de otros países los que han mostrado cierto interés por este caso en tan sólo dos días, a través del blog ‘Dos horas con Ana: ¡¡Queremos a Ana!!'.

Asimismo, fuentes de la asociación confirman que ya han recogido más de 3.500 firmas en apoyo de la funcionaria y no van a parar hasta que se llegue a una solución.

De momento, “su vida, su familia, su casa están en el pueblo”, afirma un vecino de Cieza. Por ello, no espera mudarse y dejar su ciudad. Ahora continúa en su actual puesto, pero el mes que viene comenzará a gestionar otras peticiones de ayudas desde otro asiento.