¿Por qué una monja le ha hecho un placaje a un ecologista en Francia?

La construcción de un gran centro religioso en Saint-Pierre-de-Colombier, un pueblo ubicado en el departamento de Ardèche, en la región del Ródano-Alpes, es el centro de la discordia entre la comunidad católica de la Familia Misionera de Notre-Dame y los ecologistas desde el año 2019. El pasado lunes, un grupo de monjas se movilizaron formando una cadena humana para proteger las obras ante la presencia de activistas medioambientales con los cuales llegaron a enfrentarse.

“¡Enorme! La buena hermana que deja a un ecologista... un gran espectáculo en Ardèche, donde las monjas defienden las obras de construcción de un futuro centro religioso contra los activistas que lo bloquean por su impacto sobre el medio ambiente”, escribió en su cuenta de X el periodista de France 3 Léo Chapuis, que cubría la noticia.

Precisamente, fue su compañero y cámara Nicolas Ferro quien grabó las imágenes en las que una monja se abalanza sobre uno de los activistas, uno de los varios altercados que se produjeron durante casi una hora hasta que la tensión se rebajó y todo volvió a la calma. El vídeo del “placaje no reglamentario” acumula 3,1 millones de reproducciones.

Un proyecto muy polémico

La orden religiosa, fundada en el pueblo, recibe multitud de peregrinos, por lo que decidió ampliar su capacidad de acogida, según informan desde el diario francés Liberation. Para ello, desarrollaron un proyecto que incluía un gran edificio de hospedaje y una nueva iglesia con capacidad para 3.500 fieles y un campanario de 50 metros de altura.

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El proyecto pareció desmesurado tanto a los residentes del valle como a sus gobernantes, que creen que esta construcción junto a la llegada masiva de peregrinos causaría daños irreparables al medio ambiente. Las manifestaciones y movilizaciones dieron sus frutos y, en octubre de 2020, se logró que las obras se paralizaran.

Sin embargo, estas se reanudaron a finales de 2022, tras la aprobación de la prefectura de Ardèche, que logró obtener los estudios de impacto ambiental que faltaban hasta entonces. Los activistas están preocupados por la presencia en el lugar de una planta protegida, la mignonette de Jacquin, punto del cual informaron al Conservatorio Botánico Nacional y la Oficina de Biodiversidad.

La construcción de este gran centro religioso junto a la llegada masiva de peregrinos podría causar daños irreparables al medio ambiente

Por esta razón, la asociación Ami.es de la Bourges presentó una denuncia al pasado miércoles, 11 de octubre. Un día después, 10 activistas bloquearon al equipo que lleva las obras y dos de ellos se encadenaron a una excavadora. A pesar de que el prefecto de Ardèche ha convocado una reunión el próximo 19 de octubre con todas las partes implicadas, los ecologistas han seguido realizando acciones en contra de las obras, lo que ha provocado la reacción de las monjas católicas.