Es noticia
Argelia estrecha lazos con Mauritania para bloquear la oferta de Mohamed VI a los países del Sahel
  1. Mundo
"La Unión está en coma"

Argelia estrecha lazos con Mauritania para bloquear la oferta de Mohamed VI a los países del Sahel

El presidente argelino ha puesto los cimientos de una estrecha relación con sus dos vecinos orientales, pero para poner en dificultad a Rabat debe convencer a Nuakchot de que se incorpore a su proyecto integrador

Foto: El Rey Mohamed VI de Marruecos durante la recepción de su visita de Estado a Qasr Al Watan en Abu Dhabi. (Reuters/UAE Presidential Court)
El Rey Mohamed VI de Marruecos durante la recepción de su visita de Estado a Qasr Al Watan en Abu Dhabi. (Reuters/UAE Presidential Court)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

"La Unión del Magreb Árabe está en coma", sentenció Ahmed Aattaf, ministro de Asuntos Exteriores de Argelia. "¿Debemos resignarnos a esta situación hasta que vuelva la UMA a tener vida?", se preguntó a continuación. La respuesta es no.

Fundada en 1989 en Marrakech por los jefes de Estado de Marruecos, Argelia, Libia, Túnez y Mauritania, la UMA es desde hace décadas una organización que solo existe sobre el papel. Su última cumbre se celebró en 1994. Desde entonces, las desavenencias entre Argel y Rabat, sobre todo con relación al Sáhara Occidental, impiden cualquier avance en la integración de esa región norteafricana.

Tres días después de su ministro, el presidente argelino, Abdelmadjid Tebboune, anunció ante la prensa que su país, Túnez y Libia —el gobierno de Trípoli que goza de reconocimiento internacional— habían acordado "la creación de una entidad magrebí que no está dirigida contra ningún otro Estado de la región". Su objetivo es "colmar el vacío" de una UMA inexistente.

La diplomacia de Argelia ha decidido, en el fondo, tratar de impulsar una UMA sin Marruecos. Considera que el momento es propicio por dos razones. Primero, ninguna capital magrebí, excepto Rabat, mantiene relaciones con Israel y todas son más contundentes en su condena de la invasión de Gaza. Eso refuerza su cohesión política.

Foto: El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, en una imagen de archivo. (EFE/Zipi Aragón)

Segundo, Argel persigue bloquear la iniciativa que el rey Mohamed VI anunció en noviembre ofreciendo una salida al Atlántico a los países del Sahel a través, sobre todo, del puerto de Dajla en el Sáhara Occidental. "Argelia quiere formar una alianza magrebí contra Marruecos", titulaba Hespress, el principal diario digital marroquí.

Al mes siguiente, en diciembre, la propuesta fue expuesta en Marrakech a los jefes de la diplomacia de cuatro países saharianos —Mali, Níger, Chad y Burkina Faso—. Requiere construir unos 7.000 kilómetros de carreteras para que trasladen sus mercancías de exportación hasta el puerto de Dajla. El proyecto real recabó también el apoyo del Departamento de Estado en febrero y del presidente Pedro Sánchez cuando, ese mismo mes, viajó a Rabat para ser recibido en audiencia por el monarca alauí.

Foto: El contralmirante Mohamed Tahin, Inspector de la Marina Real, supervisa en enero los trabajos de construcción del patrullero de altura. (Navantia)

El presidente español "saludó y marcó el interés de España por las iniciativas estratégicas lanzadas por Su Majestad el Rey, que Dios le asista, especialmente la iniciativa de los países africanos ribereños del Atlántico, la iniciativa real para favorecer el acceso de los países del Sahel al océano Atlántico así como el gasoducto africano-atlántico Nigeria-Marruecos", reza el comunicado real difundido al término de la vista.

Tebboune dio, por su parte, los primeros pasos el 3 de marzo, cuando se celebró en Argel la séptima cumbre de los países exportadores de gas. Mantuvo un encuentro discreto con sus homólogos de Túnez, Kaïs Saied, y de Libia, Mohamed Younes El-Menfi. Volverán a verse cuando termine el Ramadán para hacer un anuncio solemne. A partir de entonces, delegaciones de los tres países deberían reunirse con regularidad e ir perfilando el proyecto. "Se puede hablar ya del inicio de una nueva dinámica magrebí", sostiene Sébastian Boussois, profesor de la Universidad Libre de Bruselas.

Para cercar a Marruecos hace falta que Mauritania se apunte. Sin su colaboración, la salida al mar que ofrece el monarca alauí es imposible de poner en práctica. Tebboune habló por teléfono con su homólogo mauritano, Mohamed Cheik Ould El Ghazouani, pero este no ha dado aún su brazo a torcer. No se ha dado de alta en la nueva UMA que está gestando Argelia.

Foto: El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se reúnen con el presidente mauritano, Mohamed Ould Ghazouani. (EFE/Pool/La Moncloa/Borja Puig de la Bellacasa)

La actual coyuntura es, en teoría, favorable a Argelia. La relación entre Marruecos y Mauritania no pasa por su mejor momento. Prueba de ello es que la aduana mauritana impuso en enero en unos aranceles brutales a las frutas y hortalizas exportadas por Marruecos a través del paso de Guerguerat, en el extremo sur del Sáhara Occidental. Es, aparentemente, un intento de reducir su dependencia alimenticia del país vecino.

Las autoridades de Argelia mezclan todo tipo argumentos para seducir a su vecino del suroeste. Tebboune recurrió a la historia en su última entrevista televisiva. Recordó que en 1960 la Liga Árabe apoyó la reivindicación soberanista de Marruecos sobre Mauritania. "Argelia no participó en esa decisión porque entonces no habíamos obtenido aún nuestra independencia", recalcó.

Foto: El presidente de Níger, Mohaemd Bazoum, el 22 de junio de 2023 en París. (Reuters/Ludovic Marin)

Un mes antes, Tebboune se desplazó al extremo suroeste de Argelia para inaugurar con su homólogo mauritano Ould El Ghazouani las primeras aduanas entre los dos países y anunciar la construcción de una carretera de 840 kilómetros que enlazará Tinduf con la ciudad minera de Zouerat.

Si ambos presidentes han efectuado tales desplazamientos, hasta la punta de sus respectivos países, "no es para inaugurar un puesto fronterizo y una carretera, por muy importante que sea, sino dar una nueva dimensión estratégica a la relación que convertirá a Mauritania en el nuevo acceso hacia África del Oeste", señaló el diario digital argelino TSA. "A diferencia de lo que ofrece Marruecos, el proyecto aquí no es utópico porque Argelia posee los recursos financieros para ejecutarlo", concluía.

Foto: El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, con el presidente de Argelia, Abadelmayid Tebún, en septiembre de 2021. (Ministerio de Asuntos Exteriores/Europa Press)

Hoy en día el comercio entre los países del Magreb es casi inexistente. Representa menos del 3% de sus intercambios. Es la región del mundo con el menor grado de integración económica. Para lograr que por esa carretera, entre Tinduf y Zouerat, circulen camiones repletos de mercancías hay que estimular el comercio.

Tebboune anunció en febrero la creación de tres zonas francas, con Libia, Túnez y, la primera, con Mauritania, que empezará a funcionar este primer semestre del año. Como Argelia tiene músculo financiero, invertirá de entrada en ella unos 202 millones de euros. "Las mercancías mauritanas, cuyo origen esté bien establecido, estarán exentas de aranceles y otro tanto sucederá con los productos argelinos", aseguró el presidente al inaugurar las aduanas.

Queda ahora por ver si esta mano tendida bastará para convencer a unas autoridades mauritanas que tradicionalmente, desde hace más de medio siglo, se han esforzado por navegar entre sus dos grandes vecinos sin arrimarse en exceso a ninguno de ellos para no enfadar al otro.

"La Unión del Magreb Árabe está en coma", sentenció Ahmed Aattaf, ministro de Asuntos Exteriores de Argelia. "¿Debemos resignarnos a esta situación hasta que vuelva la UMA a tener vida?", se preguntó a continuación. La respuesta es no.

Noticias de Marruecos Mauritania
El redactor recomienda