Bruselas exige el desembarco "inmediato" del barco con más de 200 inmigrantes que Italia ha bloqueado

La Comisión Europea se ha visto obligada a emitir este miércoles por la tarde un comunicado en el que exige el "desembarco inmediato" de los 234 inmigrantes que se encuentran a bordo del barco Ocean Viking desde hace casi 20 días. Las autoridades italianas han prohibido dicho desembarco y han obligado a la tripulación a solicitarlo a Francia, cuyo Gobierno ha cargado duramente contra el recién estrenado Ejecutivo italiano, liderado por la radical Giorgia Meloni.

La negativa por parte de Roma es "inaceptable", según ha explicado el portavoz del Gobierno galo, Olivier Veran. "Italia tiene la responsabilidad de dar la bienvenida a estas personas", ha explicado. Ahora la Comisión Europea interviene, señalando la necesidad de tomar medidas urgentes. "La situación a bordo del buque ha alcanzado un nivel crítico y debe abordarse con urgencia para evitar una tragedia humanitaria", ha señalado el Ejecutivo comunitario en un comunicado. Entre los inmigrantes rescatados hay unos cuarenta menores.

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"La obligación legal de salvamento y de garantizar la seguridad de la vida en el mar es clara e inequívoca, con independencia de las circunstancias que lleven a las personas a encontrarse en una situación de peligro", ha recordado la Comisión Europea, que sin embargo evita incluso mencionar a ninguno de los dos Estados miembros que mantienen el pulso. Bruselas señala claramente a Italia al recordarle sus obligaciones legales, pero también "recuerda el principio de cooperación leal y pide a los Estados miembros que trabajen juntos para garantizar una respuesta común, siendo la inviolabilidad de la vida de la máxima importancia y consideración primordial", señala en su comunicado.

"La gestión de la migración se aborda con mayor eficacia cuando los Estados miembros trabajan juntos para obtener soluciones europeas comunes", apunta Bruselas, que aprovecha el comunicado para recordar que hay sobre la mesa una propuesta para volver a tener un pacto migratorio que vuelva a hacer efectiva una gestión migratoria a escala europea.

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Este mismo miércoles por la mañana, el portavoz del Gobierno francés señalaba que el Ocean Viking, de la ONG francesa SOS Mediterráneo, se encontraba todavía "en aguas italianas" y que "no se puede hacer correr el menor peligro a esas personas". Tras los numerosos rechazos por parte de las autoridades italianas la tripulación señaló que solicitaría desembarcar en el siguiente puerto seguro más cercano en aguas europeas, que está en Cerdeña (Francia).

A la hora en la que la Comisión Europea ha hecho su solicitud del desembarco inmediato la embarcación se encuentra en estos momentos cerca de Cagliari, que es un puerto italiano. Se trata del primer pulso entre Bruselas y el Gobierno italiano liderado por Meloni y por otros partidos de la derecha radical, como por ejemplo la Lega de Matteo Salvini, que durante su anterior etapa en el Ejecutivo italiano ya convirtió el bloqueo de embarcaciones como la Ocean Viking en una de sus principales medidas.

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Europa Press

Meloni visitó la capital comunitaria por primera vez la semana pasada y se reunió con Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, con el objetivo de tranquilizar a la cúpula de la Unión. Sin embargo, en esos encuentros quedó claro que uno de los principales puntos de fricción entre Bruselas y Roma en los próximos años puede ser la gestión migratoria, que se encuentra en el centro de los intereses electorales de la formación que lidera Meloni, Fratelli d’Italia.