George Bush se carteó durante 10 años con un niño filipino al que apadrinó

George Bush ha sido uno de los presidentes de Estados Unidos más queridos por los ciudadanos. Su muerte el pasado 30 de noviembre sirvió para que millones de personas expresaran su devoción por su persona, pero incluso después de fallecer, ha dejado muestras de su gran corazón.

Durante más de 10 años, George Bush apadrinó a un niño filipino por medio de ‘Compassion International’, una ONG que utiliza a las iglesias locales para ayudar a niños de comunidades pobres por todo el mundo. El menor se llama Timothy y durante esa década recibió dinero del expresidente para su educación, actividades extraescolares y sus comidas.

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Ahora, esta organización sin ánimo de lucro ha compartido con CNN algunas de las cartas que ambos se intercambiaron. Aunque la familia no ha querido hacer comentarios al respecto, su portavoz Jim McGrath ha confirmado su autenticidad. La primera carta data de enero de 2002, cuando el expresidente se presenta como G. Walker.

“Querido Timothy:

Quiero ser tu nuevo amigo por carta.

Soy un hombre viejo, de 77 años, pero adoro a los niños; y aunque no nos hayamos conocido, ya te quiero.

Vivo en Texas. Te escribiré de vez en cuando.

Buena Suerte. G. Walker.”

Cuidaron de la seguridad… del niño

El expresidente de la ONG, Wess Stafford, explica a la CNN cómo surgió todo durante un concierto en 2001: "Los músicos eran en su mayoría cristianos y creían en nuestra misión, así que contaban a los espectadores cosas sobre nosotros y les preguntaban si querían apadrinar a un niño. De repente, el señor Bush, que estaba sentado unas pocas filas más atrás y rodeado por su seguridad, levantó la mano y pidió un folleto”.

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Stafford explica que los ejecutivos de Bush tuvieron mucho cuidado de este acto por el bien del niño: "Me dijeron: si va a apadrinar a ese niño, tenemos que asegurarnos de que el niño no sepa quién es su padrino. Por eso firmó todas sus cartas a Timothy como 'George Walker'". El objetivo final era la seguridad de Timothy ya que si descubrían quién era su padrino podría convertirse en un objetivo,

Pese a que pidieron a Bush que no diera detalles sobre su verdadera personalidad, el expresidente intentaba saltarse los límites, como en una carta en la que habla de su perro: “Aquí tienes una foto de nuestro perro. Se llama Sadie. Conoce a mucha gente famosa. Es una perra muy buena, nació en Inglaterra. Atrapa ratones y ardillas y corre como el viento. G. Walker”.

El niño se enteró a los 17 años

Todo el interés que la ONG y los Bush pusieron en cuidar el anonimato del expresidente surtió efecto y Timothy no supo quién fue su verdadero padrino hasta que dejó el programa a los 17 años. Una ejecutiva de Compassion International se reunió con él una vez que se graduó y le explicó quién había sido su verdadero padrino: un expresidente de los Estados Unidos.

Timothy no daba crédito a lo que escuchó y aseguró que esa noticia le iba a cambiar la vida. Sin embargo, desde la ONG no han podido volver a contactar con él. Le perdieron la pista desde entonces y nunca más han tenido noticias suyas. Timothy es uno más de los miles de niños a los que han ayudado a lo largo y ancho del mundo.

Una de sus cartas después de recibir un regalo (que, en principio, los Bush no podían hacer) reflejaba su bondad:

"Estimados Sr. y Sra. Walker:

¿Cómo están? Espero que estén bien.

Quiero darles las gracias por no olvidarse de mí. Son muy buenos.

Dios es muy bueno con nosotros, nos da la posibilidad y la voluntad de llegar a donde queramos ir. Muchas gracias por el libro, me gusta mucho".