Slobodan Praljak: la Policía investiga cómo consiguió el veneno en La Haya

En el momento en el que Slobodan Praljak, expolítico y militar bosniocroata estaba escuchando el veredicto del Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) de La Haya, que lo había condenado a 20 años de prisión por los actos cometidos durante la guerra de Bosnia (1992-1995), decidió que su mejor opción era desaparecer de este mundo. Así que aseguró que él no era un criminal de guerra, rechazó la condena recibida por el tribunal y se bebió lo que desde el principio ya se creía que sería veneno. Él mismo lo dijo: "He tomado veneno". La audiencia tuvo que suspenderse y menos de dos horas después, se confirmaba la muerte de Praljak.

Ahora, la Policía neerlandesa ha abierto una investigación para estudiar cómo un acusado en un juicio pudo ser capaz de conseguir introducir un bote de veneno dentro de las instalaciones del tribunal para suicidarse después de escuchar su sentencia, según ha podido saber el diario neerlandés 'Dutch News'.

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T.F.

Tal y como recoge la BBC, Praljak comenzó a encontrarse mal "rápidamente", según confirmó el portavoz del TPIY, Nenad Golcevski, si bien todavía nadie ha podido confirmar qué líquido estaba dentro del bote. Tras la suspensión del juicio, los efectivos sanitarios lo trasladaron al hospital, donde finalmente se confirmó su fallecimiento. Hasta ahora todavía es un misterio el modo en el que consiguió el vial de veneno que utilizó para provocarse la muerte.

En un comunicado recogido por la cadena británica, la Fiscalía neerlandesa ha señalado que la investigación se centrará en estudiar si hubo algún tipo de "suicidio asistido" y se violó la Ley de Medicinas. En Países Bajos es legal la eutanasia y el suicidio asistido siempre y cuando se cumplan todos los requisitos previstos en la Ley neerlandesa de Terminación de la Vida a Petición y Suicidio Asistido, es el único modo de que el sanitario que realice este suicidio asistido quede inmune de un procedimient criminal.

Los investigadores evaluarán quién pudo darle el líquido mortal, qué es exactamente lo que contenía y cómo pudo conseguirlo estando en prisión, e introducirlo en lo que se supone que es una sala de juicios de máxima seguridad.