La transición en Arabia Saudí se asegura con dos 'hombres de familia' de 69 y 79 años

La muerte del rey Abdalá bin Abdulaziz este jueves a causada de una neumonía a los 90 años ha abierto un proceso de transición en Arabia Saudí. A pesar de ser un monarca absoluto, su ardua tarea reformista de los últimos años parece que tendrá continuidad después de más de una década de reinado.

Austero y poco dado a hacer ostentación de su enorme poder económico, Abdalá deja tras de sí un país al que salpicaron los atentados del 11-S después de que 15 de los 19 autores de los atentados contra las Torres Gemelas y en Pentágono fueran saudíes, la misma nacionalidad que Osama Bin Laden. Desde entonces, Arabia Saudí se convirtió en el germen del terrorismo islamista.

Como muestra de apertura y con el objetivo puesto en las buenas relaciones con los aliados occidentales, sobre todo con Estados Unidos, Abdalá hizo un guiño a las mujeres, a quienes abrió por primera vez las puertas del Consejo Consultivo y de la universidad King Abdullah University for Science and Technology, donde hombres y mujeres comparten mesa en clases, laboratorios e, incluso, en el comedor. Sin embargo, y como marca toda monarquía absoluta, la participación ciudadana brilla por su ausencia en la toma de decisiones de toda índole.

Salman Ibn Abdulaziz, un nuevo rey de 79 años

Con 11 años menos, le sustituirá en el trono Salman Ibn Abdulaziz, el hasta ahora príncipe heredero y que ha sido investido como rey de acuerdo al reglamento establecido en Arabia Saudí. La ceremonia de juramento de los saudíes al nuevo monarca comenzará este viernes, día sagrado para los musulmanes, justo después del último rezo. En esta celebración, también se jurará fidelidad a su hermano menor, Moqren bin Abdelaziz al Saud, que será príncipe heredero.

Salman, nacido en Riad el 31 de diciembre de 1935, recibió una exquisita educación religiosa en las mejores y más cualificadas ulemas del reino. Durante los últimos años, ha estado muy ligado al poder político de Arabia Saudí, algo que se intensificó en junio de 2012 cuando se convirtió en príncipe heredero del reino petrolero ocupando los cargos de viceprimer ministro y ministro de Defensa. Muy apegado a su Riad natal, Salman Ibn Abdulaziz fue alcalde y emir de la ciudad durante varios años en los que se mostró comprometido con las causas humanitarias tanto dentro como fuera del país.

Su nombre ha sido una constante los medios andaluces durante la época estival debido a sus viajes a Marbella, donde posee un palacio.

Sin embargo, no solo ha viajado a nuestro país para disfrutar de un breve retiro vacacional ya que ha protagonizado varias visitas oficiales donde ha sido recibido por los Reyes y otras autoridades, como José María Aznar o Pedro Morenés e, incluso, acudió como invitado a la boda del actual Rey Felipe VI con Doña Letizia.

De su buena amistad con el Rey Juan Carlos y de los contactos que Salman ha mantenido en los últimos años con el Gobierno han surgido dos importantes contratos para las empresas españolas: el Tren de Alta Velocidad en Arabia Saudí y el metro de Riad.

Moqren bin Abdelaziz al Saud, de 69 años, el 'preferido'

A la sombra y 10 años más joven estará Moqren bin Abdelaziz al Saud, considerado por los analistas políticos como el asesor más cercano y de mayor confianza del fallecido rey Abdalá bin Abdulaziz. Muy popular entre los saudíes por su relativa juventud, su amplia experiencia de gobierno y el conocimiento de Occidente, Moqren es para muchos el mejor candidato para dirigir el país entre el resto de los miembros de la realeza, incluido el actual rey.

Según cuentan, él sería quien mejor continuaría con el legado de su ‘mentor’ y quien lo ampliaría para hacer mucho más visibles los cambios que este dejó por hacer.35º hijo del rey Abdalá bin Abdulaziz se formó en la Royal Air Force de la universidad británica en Cranwell graduándose en aeronáutica. A partir de entonces, se unió a la fuerza aérea real saudí (RSAF) llegando a ser presidente de operaciones y planificación. Tras ser gobernador de varias zonas de Arabia Saudí, Moqren fue presidente de la Inteligencia General entre 2005 y 2012. Dos años después, el rey Abdalá le nombró príncipe heredero ‘adjunto’, un cargo que a día de hoy le acerca al trono.