La matanza en la escuela de Winningen no se anunció en Internet

El ministro del interior de Baden Wurtemberg, Heribert Rech, se equivocó. Tim K. no es el autor del mensaje que circuló en Internet seis horas antes de la matanza en la escuela de Winningen. Ese texto, según declaraban anoche fuentes de la policía alemana, no salió del ordenador del muchacho responsable de la carnicería. Tal vez lo lanzó desde otro ordenador diferente, tal vez fue otra persona, que mencionaba esa localidad concreta al suroeste de Alemania. En todo caso, las cosas están más confusas que antes. La fiscalía de Stuttgart va a intentar interrogar en las próximas horas a las personas que participaron en ese chat o que leyeron ese mensaje, para tratar de aclarar quién es su autor.

 

Algunas personas que utilizan habitualmente ese foro, que responde a la dirección www.krautchan.net, ya tenían dudas acerca de la veracidad de su contenido, porque no es la primera vez que en él participan elementos no registrados que lanzan mensajes provocadores con el fin de crear polémica. Además, siempre según estos foreros, ese mensaje concretamente fue manipulado a posteriori y se le añadieron cosas nuevas. Desde anoche esa dirección de Internet se encuentra bloqueada y cuando se intenta abrir hay un mensaje que afirma: “no podemos atender tantas visitas. No hay por otra parte nada que ver, porque la prensa alemana desgraciadamente se ha columpiado -y no es la primera vez- con unos datos falsos. Aquí no se anunció ninguna matanza… solo gente que sabe cómo usar el photoshop”.

Este foro alemán es imagen y semejanza de otro existente en los Estados Unidos, 4Chan, en donde se cuelgan sobre todo imágenes sobre las que se discute acaloradamente. Muchas tienen un contenido violento, y en este foro ya se trató ayer muy favorablemente la “hazaña” de Tim K., subrayando, eso sí, que no había logrado igualar los 32 muertos que había provocado en otra acción similar en Virginia el estudiante Cho Seung-Hui.

La Federación de Periodistas alemanes ha expresado su malestar por el uso de informaciones procedentes de Internet y no contrastadas convenientemente, especialmente por los colegas de las televisiones que se veían obligados a informar constantemente en directo de lo que estaba ocurriendo en la escuela de Winningen y en la escena del tiroteo final en Windlingen. Se ha criticado especialmente el uso de datos y rumores que circulaban en  Twitter y otros foros privados donde ciudadanos anónimos aportaban supuestas informaciones que no tenían, a menudo, ninguna conexión con la confusa realidad del momento.